Creo que hay que tener una visión global de las cosas. Yo he sido de los que crucifiqué a Marcos. Sus dos últimas temporadas en Primera División y la primera en Segunda fueron lamentables, ahí sí que fue un coladero. Ahora lleva tres temporadas rindiendo a buen nivel. ¿Que falla y hace cagadas? Pues claro, como Pedro López, como Raúl Cámara, como Juanra, como Valera... como Diego Alves, como Capdevila y como Abidal. Pero con cagadas y todo ha sido ha sido, junto a Sesma (al que ahora estaríamos crucificando de marcar tres goles en lugar de siete, porque anda que no le salen regates y centros malos, pero malos de desesperar) el jugador más regular de la temporada. La velocidad que ha perdido hace años la ha suplido con colocación (ahora me diréis que cuántos fueras de juego ha roto) y ha demostrado un espíritu de lucha que ya quisieran otros muchos. A mí me vale.
Luego está el tema de planificar una plantilla. No nos gusta Marcos, vale. Pero tampoco nos gusta Óscar Sánchez, Víctor está para jugar minuto y medio, Pedro López tampoco nos vale (se ve a la legua que hay quince laterales mejores que él en Primera, todos asequibles y a buen precio). Tornadijo dice hoy en el As que tendremos una plantilla con un tercio de jugadores nuevos, o sea, unos ocho. Yo creo que se queda corto y apuesto por un mínimo de doce, es decir, media plantilla. Y si por los foreros fuera, nos quedaríamos con Asenjo y Pedro León y traeríamos a veinte (ojo, habrá que estar atentos a Abidal, que no acaba de cuajar en el Camp Nou, aunque puede que aquí tampoco, porque le coge Robben y su banda parece una autopista, lástima que Evra tenga contrato).
Todos queremos jugadores jóvenes y con proyección. Parece que si se concreta lo de Barragán y Nauzet vamos en esa línea. Pero cuidado, rememoremos cuántas plantillas nuevas, con 15-18 jugadores nuevos (algunos bastante buenos), se han ido a Segunda División dos meses antes de acabar la competición, incluido el Pucela que montó Juanjo Díaz.
Resumiendo, hay que renovar y se va a renovar la plantilla. Pero es necesario hacerlo con sentido común (no sé por qué se llama "común", como si abundara) y jugadores como Marcos, Víctor o García Calvo (en condiciones mínimas) son imprescindibles. Este año un lateral capaz de sentar a Marcos en el banco y el año que viene el madrileño retirándose con 36 tacos parece la opción más razonable. La siguiente opción es Óscar Sánchez haciendo el papel de Marcos y éso sí que da miedo.
Para acabar, Víctor, que es el título del hilo. Hay que hablar y reflexionar por parte de todos. Víctor tiene que asumir su edad, que no hay ningún jugador de Primera capaz de jugar 35 partidos con 35 años y mantenerse a tope. Ha sido el mejor en muchos partidos, pero en otros se ha arrastrado por el campo y si ha llegado bien a la final del Villamarín tal vez sea porque no ha jugado tanto como él quisiera. El Club debe entender el papel de Víctor en el vestuario, su implicación y la enorme calidad que tiene, que cuando juega trabaja y que se mantiene físicamente muy bien para su edad, con más resistencia que Vivar, por ejemplo. Y los aficionados debemos valorar las circunstancias en las que se maneja el Club, la aportación real de cada jugador y analizar los pros y los contras que puede suponer una profunda renovación de la plantilla.