Te quedas con mal cuerpo porque los robos que estamos sufriendo son escandalosos y el equipo rema y rema y se superan cada día para morir en la orilla. Entonces le quitan el sentido a toda la competición. No nos respeta nadie y de eso es culpable Suárez; a partir de aquí para ganarse el respeto y que no te den pero tampoco te quién puede quiten no sé lo que hay que hacer.
Tienes el ejemplo bien fresquito del presi del Geta; y tenga razón o no mira, ahí están, quintos.
Estoy seguro de que si alguien del Pucela levantara un poquito la voz (no digo nada si ese alguien fuera Ronaldo) se tentarían mucho las ropas antes de ningunearnos de esta forma.
Undiano, al frente del VAR en Vigo, no ordenó revisar ni el gol de Maxi Gómez, ni el agarrón a Olivas. Hoy el AVAR era Pablo González Fuertes (nacido en Gijón), con Undiano sobre el césped. La mano de Olivas no la protesta ningún jugador del Atlético, y con el balón ya en campo contrario, desde el VAR ordenan parar la jugada y revisarla. La nuestra, que la ha visto todo el Fondo Norte (¡como para no!), pues desde el VAR mandan seguir.
Undiano, al frente del VAR en Vigo, no ordenó revisar ni el gol de Maxi Gómez, ni el agarrón a Olivas. Hoy el AVAR era Pablo González Fuertes (nacido en Gijón), con Undiano sobre el césped. La mano de Olivas no la protesta ningún jugador del Atlético, y con el balón ya en campo contrario, desde el VAR ordenan parar la jugada y revisarla. La nuestra, que la ha visto todo el Fondo Norte (¡como para no!), pues desde el VAR mandan seguir.
¡Cómo tienen los huevos en las radios de decir que nos es penalti!
Está claro que el tema VAR es un engaño, no lo querían poner y al final lo han puesto pero a su manera, y los medios de comunicación son cómplices de este desatino. Pero qué vas a esperar de unos medios que cuando ataca el grande dicen "¡Vamos, vamos, vamos!" y cuando lo hace el pequeño "¡Cuidao, cuidao, cuidao!".
Ayer salí del campo, con una sensación de impotencia total, porque lo justo hubiera sido el empate y entre Undiano y el VAR, nos fastidiaron el partido. Yo cuándo se anunció la utilización del VAR, estaba a favor de ello, pero según van avanzando las jornadas, veo que el VAR está siendo muy selectivo, dependiendo del equipo o el rival al que te enfrentes.
Con la miel en los labios El ambiente de las grandes citas volvió a Zorrilla, prácticamente lleno, en la visita del Atlético de Madrid
Zorrilla vibró como en las grandes tardes de fútbol. Con todos los billetes vendidos y mucha expectación, la pasión blanca y violeta se desató por los aledaños antes de la llegada del equipo, y continuó en las gradas para dar calor a los jugadores en un día de cielo gris pero sin lluvia.
Decenas de espectadores esperaron al autobús del Pucela para arropar a los suyos desde el minuto cero, preciosa imagen que recuerda al reciente ascenso. Ya con el balón en juego, ese ánimo no se enfrió ni siquiera con los primeros goles visitantes. La afición local respondió a la perfección con sus bufandas al viento y alentando en todo momento.
Los decibelios aumentaron aún más después de que Calero rematara a gol el 1-2. Y la bendita locura de ser del Real Valladolid se personó en el mismo momento en el que Ünal, con la ayuda de Saúl, empató el encuentro. Si la afición ya estaba encendida, el 2-2 hizo de Zorrilla una caldera donde se coreó todo el repertorio tradicional. El baile de luces en la grada con los móviles de los aficionados sirvió para envolver de navidad el ambiente mientras los jugadores sobre el campo devolvían con su buen hacer el cariño recibido. El tercero cayó como jarra de agua fría, aunque el público apretó hasta el final.
El Real Valladolid puso el fútbol y los aficionados agradecieron el esfuerzo, conectados los 90 minutos, conscientes de su importante papel. Aunque finalmente la victoria fue esquiva, de nuevo Pucela demostró que, en las buenas y en las malas, está al lado de su equipo. Sin olvidar que este sábado se registró la segunda mejor entrada de la temporada con 22.585 personas, solo superada por los 22.651 espectadores del partido frente al FC Barcelona en la jornada 2. Un partido en el que además se contó con la visita de Papa Noel, quien antes del choque repartió regalos entre los pequeños en los anexos como despedida de este inolvidable 2018 para el Real Valladolid.
2-3: El Pucela cae con honor Griezmann sentenció un partido en el que el Pucela igualó en la segunda parte un 0-2
El Real Valladolid cayó con honor ante el Atlético de Madrid (2-3). Perder tiene podo de honorable en deporte profesional, pero perdió con el honor que supone haber sido capaz de sobreponerse a un 0-2 en la primera parte, aunque al final la calidad del enemigo decidiera el choque.
Porque si a un equipo en el mundo es difícil remontarle un 0-2 es al Atlético de Madrid, un equipo camaleónico, capaz de atacar cuando el enemigo le deja jugar y de defender la ventaja si considera que el partido lo requiere. Con el máximo nivel de concentración defensiva en cada jugada y con uno de los mejores porteros del mundo para guardar las espaldas a sus compañeros si se ven superados por el talento del rival.
A todo eso se sobrepuso el Real Valladolid esta tarde. No puntuó porque cuando el partido enfilaba la recta final, sin que diera la sensación de que al Atlético de Madrid tuviera muchos argumentos ofensivos colectivos para dar la vuelta a un empate que el Pucela se había trabajado, Griezmann decidió con un disparo cruzado imparable para Masip. Griezmann ya había sido el protagonista de los dos primeros goles. En el primero, mediada la primera mitad, con un pase milimétrico sobre Kalinic, que el delantero croata hizo bueno cruzando el balón ante la salida de Masip y el intento desesperado de Kiko Olivas por llegar a interceptar el disparo. Pero el pase había sido espléndido, la carrera de Kalinic veloz y la definición como mandan los cánones.
En el segundo tanto del Atleti, Griezmann disparó desde la frontal y el balón se estrelló en la mano de Kiko Olivas. La acción fue muy rápida por la potencia del tiro y porque Kiko Olivas, que se gira para quitarse el cañonazo, está muy encima del balón, pero el VAR avisó a Undiano Mallenco pasados unos segundos y el colegiado navarro, tras revisar la jugada en el monitor, señaló la pena máxima que ejecutó el francés clavando el balón en la escuadra. Con 0-2 y el Atleti enfrente, la operación remontada parecía una utopía, pero una vez más, como siempre, el Real Valladolid, que antes del segundo tanto rojiblanco ya había tenido las dos ocasiones más claras del partido en disparos francos de Óscar Plano y Enes Unal que no encontraron portería por centímetros, no dejó de pisar el acelerador.
Primero Calero, de un cabezazo preciso a la salida de un córner, y después de Saúl, en propia puerta, tras un testarazo de Unal hacia el punto de penalti que tropezó en la puerta del internacional colchonero sin que Oblak pudiera reaccionar, enloquecieron Zorrilla. En cinco minutos, el Real Valladolid había puesto el marcador en tablas. Pero todavía quedaba el último cuarto del encuentro y el Atleti, que nunca había conseguido superar al Real Valladolid en situaciones de juego abierto, esperó su oportunidad, la encontró y Griezmann no perdonó.
Después de tanto trabajo, después de haber dado la cara ante uno de los equipos más rocosos del mundo, el Pucela se quedaba sin premio. Y encima, con la sensación de que el colegiado, Undiano Mallenco, y el VAR, no le trató igual que al Atleti, porque los vallisoletanos reclamaron un penalti por mano tras un centro de Nacho que era el posible penalti para el 3-3, pero esta vez a Undiano no le aconsejaron ver la jugada para evaluar la intencionalidad. La vieja historia del humilde contra el poderoso. Con VAR o sin VAR.
Mejores pero sin premio Sergio González destaca el buen partido de los suyos, que a su juicio merecieron más ante el Atlético de Madrid
“Puede sonar a chiste visto el resultado pero lo cierto es que hemos sido mejores que el Atlético de Madrid en mi opinión”. Sergio González tenía claro tras el encuentro que los suyos merecieron más, pero que se vieron castigados por la tremenda pegada de un rival que celebró la victoria sabedor de que estuvo a punto de perder puntos importantes en Zorrilla.
“Estamos con rabia y fastidiados por la derrota. Nos han castigado mucho en la primera parte y en la segunda hemos salido muy bien, con mucho ímpetu. Hemos marcado dos goles a un equipo muy difícil y nos hemos encontrado cómodos, pero una jugada de mala suerte nos ha condenado”.
El técnico se mostró contrariado con el hecho de que Undiano Mallenco no visionara la jugada protestada por Nacho y por casi todo el Estadio, unas manos en el área atlética. “Tengo muchas ganas de que alguien me explique cuál es el criterio para revisar una jugada sí y otra no. Me queda una sensación rara con el VAR”.
Simeone, muy satisfecho Por su parte, Diego Pablo Simeone se mostró muy satisfecho con el triunfo y dio gran valor a los puntos cosechados por los suyos. "Cualquier otro equipo se habría visto remontar después de pasar del 0-2 al 2-2".
