Que llegue ya el domingo
Roberto, debutante en la portería blanquivioleta, se queda con la versión del equipo en la segunda mitad
Roberto, debutante en la portería blanquivioleta, se queda con la versión del equipo en la segunda mitad
Roberto Jiménez tuvo la agradable sensación de debutar con la camiseta del Real Valladolid pero no pudo irse del Benito Villamarín con una sonrisa. El equipo perdió y el guardameta no pudo hacer nada para evitar los dos tantos verdiblancos, que llegaron muy pronto en una mala primera parte del Pucela.
El guardameta quiso quedarse con la parte positiva, la del debut. “Mis sensaciones más allá del resultado fueron buenas, la verdad. Me encontré cómodo en el campo, buena conexión con los compañeros, a gusto… Con un buen resultado todo sabe mejor pero el fútbol es así y nos siempre te da la oportunidad de irte contento de los partidos. Feliz por debutar y esperar ya el siguiente”.
El descanso vino bien a un equipo que en la segunda parte estuvo “más cerca de su verdadero potencial” y que, tras las correcciones del míster, mejoró sus prestaciones. “No entramos al partido como nos hubiera gustado”, reconoció.
En su presentación, Roberto expuso su intención de sumar al equipo y aportar en todo lo posible, sabedor de la gran trayectoria de Masip en el Real Valladolid. Lamentablemente, se vio bajo palos por una circunstancia negativa para su compañero, algo que asumió con naturalidad y deseoso de que Jordi vuelva cuanto antes. “Uno trabaja siempre para estar preparado en cualquier momento. El fútbol me ha demostrado durante toda mi carrera que es imprevisible y que siempre tienes que estar preparado. Lo importante es estar a la altura para ayudar al equipo. Todos deseamos que Jordi se recupere lo antes posible para estar todos juntos y remar estando en plenas condiciones físicas”.
Un penalti en una acción fortuita
La clave del encuentro, sin duda, estuvo en el tempranero penalti señalado por Jaime Latre en una acción que no entrañaba peligro pero que acabó con el balón en el brazo de Óscar Plano. Roberto rompió una lanza por la ecuanimidad arbitral, aunque lamentó que la normativa sea demasiado estricta. “Hay normas que han cambiado en los últimos tiempos que se salen un poco de la lógica. Fue una jugada totalmente fortuita que no afectaba para nada a una acción de peligro y que la norma te castiga demasiado”.
El vestuario ya piensa en el compromiso de este domingo (Zorrilla, 18.30 horas) ante el Celta de Vigo, un partido “muy importante” para sacarse la espina de la derrota en Heliópolis y buscar la primera victoria de la temporada. “Ellos son un buen rival que llega en un buen momento, tenemos muchas ganas de que llegue ya el partido”.
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