Es una jugada dudosa para mí, pero desde luego no es para que te llamen y te coman la cabeza para no pitarlo. Ahí le faltó personalidad, pero luego la expulsión estoy seguro que la hace por el cargo de conciencia, no porque no pueda expulsarlo, pero estoy convencido que en otras circunstancias se la perdona.
Es una jugada dudosa para mí, pero desde luego no es para que te llamen y te coman la cabeza para no pitarlo. Ahí le faltó personalidad, pero luego la expulsión estoy seguro que la hace por el cargo de conciencia, no porque no pueda expulsarlo, pero estoy convencido que en otras circunstancias se la perdona.
Es mucho mas clara la expulsión que el penalti, pero sin ninguna duda
0-0: Punto que se queda corto El Real Valladolid, especialmente en la segunda mitad, hace méritos para conseguir los tres puntos pero el balón no entró en un empate que permite seguir dependiendo de sí mismos
Un empate que sabe a poco, con la sensación de que el RCD Espanyol se marcha vivo de Zorrilla, en un partido que ha tenido de todo menos goles. Un punto que vale para, eso sí, dormir líderes y seguir dependiendo de uno mismo, pero con la amargura de que los tres han estado muy cerca y se han escapado, en esta jornada 39 en LaLiga Hypermotion en la que el Pucela ha jugado con un jugador más durante treinta minutos en los que ha tenido para marcar pero sin el acierto necesario para conseguirlo.
Llegaba uno de esos partidos marcado en rojo, ante un rival directo por el ascenso directo, un equipo hecho con mimbres de Primera División. Y con un Real Valladolid en racha, flechita para arriba, cinco triunfos consecutivos, siete encuentros sin perder, zona de ascenso directo. Por eso fue normal la intensidad del comienzo, con ambos equipos mordiendo, y con los locales que se hicieron con la bola en unos primeros 45 minutos (52, ya que fueron siete de añadido) donde la pugna de fuerzas decretó igualdad en el marcador y sobre el terreno de juego. Sin ocasiones claras para nadie, pero con sensación de peligro constante en las dos áreas, los barceloneses fueron ganando metros conforme pasaba el tiempo pero sin llegar a intimidar de forma clara a los vallisoletanos, quienes volvieron a hacer de la solidez defensiva un bastión. De hecho, Jordi Masip sigue aumentando sus minutos imbatido y ya ha superado su propio récord, el histórico de la entidad blanquivioleta, sumando actualmente 718 minutos consecutivos sin encajar.
En el tiempo añadido del primer acto el Pucela tuvo dos buenas oportunidades que no llegó a materializar, la primera en un centro lateral de Luis Pérez que Arnu deja de cara a Monchu, quien tras recortar disparó a puerta atrapando el portero. Y la segunda, un remate de cabeza de Lucas Rosa, que se fue rozando el palo. Con eso se llegaba al descanso, que depararía una segunda mitad muy distinta.
Porque los segundos 45 minutos (55, ya que fueron diez de añadido) estuvieron marcados por la influencia de las decisiones arbitrales. En el minuto 60 el colegiado decretó penalti sobre Monchu en una acción en la el portero golpea en su salida al centrocampista, desequilibrado por el defensa. Pero, tras la intervención del VAR y la revisión en pantalla, se anuló y se consideró que no había pena máxima. Seis minutos después llegó otra clave, la expulsión de Nico Mr por doble amarilla después de entender el colegiado que había simulado un penalti. A partir de ahí, el dominio blanquivioleta se evidenció y el 1-0 estuvo cerca.
Pero no llegó. No llegó en la de Salazar, en el 69', quien controló de espaldas un centro lateral al área pero el portero achicó bien. Tampoco en la de Negredo, en el 75', con el balón a su zurda y el disparo dentro del área que se perdió arriba. Tampoco con el cabezazo de Monchu en el 86', desviado, ni con el de Jurić en un saque de esquina en el 90'. Amenazó el Espanyol con una falta directa de Pere Milla que repelió Masip, y el partido finalizó con ese empate agrio que deja al Real Valladolid al frente de la tabla con 68 puntos a la espera de lo que hagan SD Eibar y CD Leganés este fin de semana.
En clave local, el foco está puesto en la jornada 40, la antepenúltima, y la visita a la AD Alcorcón el domingo 19 de mayo a partir de las 16.15 horas. Los de Pezzolano dependen de sí mismos para lograr el objetivo por la vía directa cuando solo quedan tres fechas para la conclusión.
[UFicha técnica[/U] (0) Real Valladolid: Masip; Luis Pérez, Tárrega, Javi Sánchez, Escudero (Negredo, min. 72); Meseguer, Lucas Oliveira (Jurić, min.72), Monchu; Iván Sánchez (Moro, min. 72), Arnu (Salazar, min. 66), Anuar (Lucas Rosa, min. 34) (0) RCD Espanyol: Joan García; Óscar Gil (Víctor Ruiz, min. 73), S. Gómez, Cabrera, B. Olivan; Jofre (Roca, min. 18), Gragera (Bauza, min. 73), Aguado (Keidi Bare, min. 57), Nico Mr; Braithwaite, Gastón (Pere Milla, min. 57) Árbitro: Cordero Vega (C.T. cántabro) amonestó con cartulina amarilla a Anuar, Meseguer, Javi Sánchez; y a los visitantes Nico Mr, Gragera, Roca, Gastón, Pere Milla, Olivan. Expulsó, con doble amarilla, a Nico Mr. Incidencias: jornada 39 en LaLiga Hypermotion disputada en el Estadio José Zorrilla el sábado 11 de mayo de 2024, a partir de las 18.30 horas, ante 23.450 espectadores
Sabor amargo Pezzolano aseguró que al Real Valladolid se le fueron dos puntos tras hacer todo para ganar al Espanyol y no poder conseguirlo
El Real Valladolid se entregó en la tarde de este sábado en Zorrilla, donde generó para salir victorioso frente al RCD Espanyol. Pero, lamentablemente, no consiguió pasar del 0-0. “Lo único que tengo que hacer es felicitar a los jugadores. Ha mejorado mucho el equipo y sigue mejorando. Nos vamos con sabor amargo porque se nos fueron dos puntos. Fue un partido parejo y disputado en el primer tiempo y en el segundo todo nuestro. Lo bueno es que sumamos y estamos en el lugar que queríamos”, expresó Paulo Pezzolano tras el encuentro.
El técnico blanquivioleta explicó que el conjunto perico pasó “a línea de cinco”, por lo que se les hizo “más difícil”: “Nos faltó más velocidad en el giro de balón y paciencia para que lleguen espacios y lograr esos duelos por fuera. Tuvimos las ocasiones, no concretamos y nos vamos con este punto”.
En ese sentido, insistió en la falta de paciencia para elaborar las jugadas, aunque ensalzó la entrega de los suyos. “Había muchas ganas y queríamos, pero a veces nos faltó el pienso. Me quedo con que fuimos hasta el último segundo a buscarlo. Ahora a trabajar y a pensar en lo que viene”.
La nota más positiva fue el estreno de Arnu, quien se convirtió en el segundo debutante más joven. “Muy contento por él. Lo único que le he pedido es que disfrute. Muchas diagonales, presión alta… Hizo un excelente partido. Es un jugador en progreso”, comentó. Precisamente, uno de los que ayudó al delantero fue Negredo. “Estoy orgulloso de tener a Álvaro. Cuando se entera de que no juega lo único que hacía era dar consejos a Arnu. Siempre está con el compañero trabajando día a día”, señaló Pezzolano. Por otro lado, no quiso “hablar” de la acción del penalti cometido sobre Monchu para evitar una posible sanción. Para terminar, dijo que ahora es momento de “desconectar un poco, mirar al Alcorcón y pensar en adelante”.