A decir verdad, PRISCO, no tengo el toreo como algo muy trillado. Me gusta, y disfruto con las faenas de gente como El Cid, Enrique Ponce, Sebastián Castella o José Tomás, por ejemplo, pero me falta muuucha base. Sin embargo, sí he de decirte que aún valorando el que se pongan delante de un toro, poco mérito para mi tiene el toreo actual de Francisco Rivera, Finito de Córdoba, El Fandi o El Cordobés.
Dicho esto, decirte que justamente has ido a citar a mi favorito, Enrique Ponce. En "otras tierras" pude descubrir que no es del gusto de kolvjose, pero a mi me parece de una técnica y pulcritud exquisitas, y es quizá hoy día el torero que más empatía desprende en el coso de San Roque, junto a El Cid y su izquierda. Del valenciano, jamás olvidaré lo que pudo haber sido y no fue por un inoportuno grito desde la grada a la hora de entrar a matar, ya que de no ser por el "por tu hija, Enrique", aquel día habría visto cortar por primera vez un rabo en directo.
No menos cierto es, sin embargo, que también mucha empatía desprende el toreo de Castella y el propio José Tomás. Pueden ser arriesgados, poco convencionales y quizá de escasa técnica, pero conectan por lo que se arriman al astado. Cierto es que ello les provoca revolcones, pero al fin y al cabo, es el vulgo quién decide qué toreo le gusta, y el de ellos gusta también mucho.
Para mi no es buscar el efectivismo ni las cogidas, es simplemente otro toreo, del que el de Galapagar y el francés son máximo exponente y el cual no por ser menos pulcro puede considerarse de menor nivel, creo. Fíjate sino, dejando de lado las manoletinas, estatuarios y demás gama de temeridades que José Tomás acomete en cada faena, lo bajo que lleva en ocasiones la muleta. En eso los dos anteriores toreros de los que te he hablado son dos genios, pero José Tomás no es menos figura, creeme.
De todas formas, para gustos colores, desde luego. Un saludo.