SERVICIO DE DOCUMENTACIÓN
J.P
Lo de Osasuna y el Nuevo Estadio es ABSOLUTAMENTE TREMENDO. Parece que jugamos en el Sadar cada vez que los navarros aparecen por aquí.
Antaño, en el Viejo Zorrilla les ganábamos siempre o casi siempre, precisamente un triunfo sobre los rojillos (2-0, 7 de Febrero de 1982) ponía punto y final a 40 años de historia del recinto del Paseo de Zorrilla .
Gail bate a Basauri. Último tanto conseguido en el Viejo Zorrilla
En el NUEVO ZORRILLA, sólo 5 victorias de 17 enfrentamientos. Increible. El Osasuna tiene números de visitante grande en Zorrilla. No se les gana desde 2002. Fue por la mínima y el tanto lo marcó Tote.
Tote marcó en el último triunfo sobre los navarros.
Como anécdotario del partido decir que el mayor triunfo castellano fue en Tercera División, en la 1946-47 donde el Real Valladolid se impuso, con hat-trick de Julián Vaquero al cuadro rojillo por 8 a 2.
En Primera el triunfo más holgado llegó en la 59-60. Nada menos que por 5-1 ganó el Pucela, con tres tantos del pequeño extremo, Mirlo.
Así recogía “el Norte” el momento del cuarto gol del Valladolid conseguido por Mirlo en aquel lejano partido ante Osasuna de 1960
Por el contrario, los rojillos golearon en Valladolid en la 57-58, por 0 a 4.
El resultado más repetido es el de empate a 1, que se dio en Zorrilla, nada menos que 7 veces.
Gilberto Yearwood, el crack hondureño del Valladolid de los 80, falló su único penalti en España ante los navarros en el Nuevo Zorrilla (Temporada 82-83). 1 a 1 al final
Imagen de aquel partido de 1983.
Mauro Ravnic paró un penalti en el último minuto del partido de 1988. 1 a 0 para los pucelanos, en choque nocturno de sábado. A partir de ahí, el croata se metió a la afición en el bolsillo.
El balcánico Ravnic, toda una garantía bajo palos.
Los partidos ante los rojillos tienen cierta fama de “durillos”. Los de los finales de los años 70 fueron poco menos que de lucha libre. Increíble la dureza que se vio sobre el campo. Hoy dia, y con el regalamento actual, el partido se hubiera suspendido por falta de efectivos.
Dos crónicas de la época.
En 1970-71 con los dos equipos hundidos en TERCERA, se lucho codo a codo con los navarros por subir. Al final, y en una última jornada de infarto, la suerte sonrió a los albivioletas que ganaron al Tudelano, mientras que el Osasuna pinchaba en su desplazamiento a Andorra (Teruel), donde un “maletín” vallisoletano dio alas a los jugadores aragoneses.
J.P
Lo de Osasuna y el Nuevo Estadio es ABSOLUTAMENTE TREMENDO. Parece que jugamos en el Sadar cada vez que los navarros aparecen por aquí.
Antaño, en el Viejo Zorrilla les ganábamos siempre o casi siempre, precisamente un triunfo sobre los rojillos (2-0, 7 de Febrero de 1982) ponía punto y final a 40 años de historia del recinto del Paseo de Zorrilla .
Gail bate a Basauri. Último tanto conseguido en el Viejo Zorrilla
En el NUEVO ZORRILLA, sólo 5 victorias de 17 enfrentamientos. Increible. El Osasuna tiene números de visitante grande en Zorrilla. No se les gana desde 2002. Fue por la mínima y el tanto lo marcó Tote.
Tote marcó en el último triunfo sobre los navarros.
Como anécdotario del partido decir que el mayor triunfo castellano fue en Tercera División, en la 1946-47 donde el Real Valladolid se impuso, con hat-trick de Julián Vaquero al cuadro rojillo por 8 a 2.
En Primera el triunfo más holgado llegó en la 59-60. Nada menos que por 5-1 ganó el Pucela, con tres tantos del pequeño extremo, Mirlo.
Así recogía “el Norte” el momento del cuarto gol del Valladolid conseguido por Mirlo en aquel lejano partido ante Osasuna de 1960
Por el contrario, los rojillos golearon en Valladolid en la 57-58, por 0 a 4.
El resultado más repetido es el de empate a 1, que se dio en Zorrilla, nada menos que 7 veces.
Gilberto Yearwood, el crack hondureño del Valladolid de los 80, falló su único penalti en España ante los navarros en el Nuevo Zorrilla (Temporada 82-83). 1 a 1 al final
Imagen de aquel partido de 1983.
Mauro Ravnic paró un penalti en el último minuto del partido de 1988. 1 a 0 para los pucelanos, en choque nocturno de sábado. A partir de ahí, el croata se metió a la afición en el bolsillo.
El balcánico Ravnic, toda una garantía bajo palos.
Los partidos ante los rojillos tienen cierta fama de “durillos”. Los de los finales de los años 70 fueron poco menos que de lucha libre. Increíble la dureza que se vio sobre el campo. Hoy dia, y con el regalamento actual, el partido se hubiera suspendido por falta de efectivos.
Dos crónicas de la época.
En 1970-71 con los dos equipos hundidos en TERCERA, se lucho codo a codo con los navarros por subir. Al final, y en una última jornada de infarto, la suerte sonrió a los albivioletas que ganaron al Tudelano, mientras que el Osasuna pinchaba en su desplazamiento a Andorra (Teruel), donde un “maletín” vallisoletano dio alas a los jugadores aragoneses.