Con esta plantilla estaría perdido cualquiera. El problema se puede resumir en dos errores clave: primero, que en el verano vinieron trece jugadores nuevos, ninguno marca diferencias y se fueron cuatro que sí las marcaban, segundo, la plantilla estaba descompensada en la defensa y lo vio el 99% del foro. Los que ahora defienden a Olabe, utilizan como argumento los tres fichajes del mercado de invierno: contradicción pura.