Primera entrevista extensa de Javier Clemente en Valladolid. Arturo Posada en El Norte de Castilla ha sido el encargado de hacer la entrevista.
http://www.canalpucela.es/noticias/2010-04-08/esta-plantilla-trabajado-como-20100408.html
Javier Clemente (Barakaldo, 1950) ya visto el toro que debe lidiar de aquí a mayo. En ocho partidos quiere volver a disfrutar del trabajo de entrenador y afrontar el reto de salvar al Real Valladolid. Pero Clemente sigue siendo Clemente. Un tipo combativo y un personaje en las antípodas de la corrección política. Su fuerte personalidad debe servir al menos para que la plantilla blanquivioleta finalice la Liga dignamente. Pero si hay milagro y el Real Valladolid se mantiene, el artífice será él.
-¿Qué pulso le ha visto al equipo tras el primer contacto?
-Lo primero fue hablar con los jugadores. En un porcentaje alto hubo recepción, curiosidad. En el entrenamiento la sensación también ha sido buena. Intentan hacer las cosas. Me ha gustado el trabajo que han hecho, pero sobre todo lo que han intentado. Pero hablo a 23 y todos saben cómo contrarrestar lo que digo. Es normal que ganen siempre los suplentes. Ya saben lo que van a hacer los titulares. La actitud de todos es muy buena.
-Usted llega por ocho partidos. ¿El reto es la salvación o domar este vestuario que parece tan difícil?
-Eso va unido. ¿Domar? Yo no voy a domar nada. Sé cómo quiero que funcionen. Estando yo tienen que funcionar como un equipo. Un equipo bueno, menos bueno, regular o malo.
-¿Eso es lo más importante?
-Es lo que tenía que haber ocurrido desde el principio.
-Y usted cree que no ha sucedido así...
-Por la forma de verles no han trabajado en equipo todo el año. Han trabajado individualmente.
-¿Se puede convencer a la plantilla de que la salvación es posible?
-Para que vean que es posible se les puede recordar que en algún momento les puede haber ganado un equipo de Tercera División. Fíjate: en el fútbol el malo le gana al bueno. No digo que el Real Valladolid sea malo, pero un equipo malo puede ganar al Real Madrid o al Barcelona. Lo que hay que mirar es que quedan ocho partidos individuales.
-Usted ha coincidido con un montón de presidentes. ¿Qué impresión le ha causado Carlos Suárez?
-Me he llevado bien con casi todos ellos. A Carlos le veo muy joven. Tiene mucho mérito siendo tan joven meterse en un club. Tiene unas ideas muy profesionales y de exigencia. Me parece un tío muy serio dentro de la poca seriedad que hay en el mundo del fútbol.
-Y usted ya conocía a Roberto Olabe...
-Sí, le tuve en la Real Sociedad. Allí él era el que llevaba el visionado de jugadores extranjeros. Llevaba porteros porque él fue portero.
-No hay muchos entrenadores que acepten venir por ocho partidos en una situación como ésta...
-Yo lo analizo como profesional. Es un reto, pero la vida está llena de retos. Salvar a un equipo en esta situación es muy duro, pero además me gusta el trabajo de entrenar a un equipo. Yo trabajaría de la misma manera si el Real Valladolid estuviese el quinto. Mi objetivo como entrenador es que el equipo funcione. Pero siempre en función de las posibilidades que tiene. No puedo pretender que funcione como el Barcelona.
-El club contrató a un psicólogo recientemente. ¿A usted que le parece esta medida?
-No puedo cambiar nada en este último mes porque no puedo alterar los hábitos de los jugadores. Si quieren seguir teniéndole, por mi parte no hay inconveniente. Fuera de mis horas de trabajo, claro.
-Una parte del trabajo psicológico también corresponde al entrenador.
-Como entrenador está el tema del campo, del vestuario, de la relación personal y, sí, el tema psicológico del grupo...
-¿Ha cambiado su carácter con los años?
-No, tengo el mismo.
-¿Y en los conocimientos?
-En el fútbol se evoluciona. Tengo suerte porque soy veterano, pero tengo capacidad para aprender. Si me dices algo que me guste, lo aprendo.
-¿Tiene la idea de blindar la defensa?
-El fútbol es todo. De nada vale que marques cuatro goles si te meten cinco. Será más fácil que no te metan ninguno y meter uno.
-El nombre de Javier Clemente ha trascendido el ámbito futbolístico. Usted se ha convertido en todo un personaje...
-Porque estuve en la selección, claro. Y porque me he fajado mucho con muchos periodistas. Sólo he demandado a un periodista que es una estrella en España: Luis del Olmo. Le han condenado dos veces, pero ahí sigue hablando en la radio como si fuera el Papa. A ése me he enfrentado yo. Si hay un falso voy a por él. Como si es el hijo del presidente del Gobierno.
-¿Le han perjudicado todas sus guerras?
-He sido como he sido y el que ha querido darme caña me la ha dado. Yo me enfrento a todo dios. No me arruga ni uno. He pasado momentos duros, pero me he sentido bien porque he sido yo. Pero a veces pienso: 'hoy he metido la gamba'.
-Usted tuvo hasta un célebre guiñol televisivo...
-Me suelo reír cuando veo a uno que me imita y hace bromas conmigo. Pero también digo: ¡hombre, no me importaría que imitase también a su padre!
-¿Se acuerda de su breve etapa de jugador, de la grave lesión que le retiró a los 19 años?
-¡Cómo no me voy a acordar si todavía sigo con ella! Lo más grande del fútbol pasa por ser jugador. Luego está ser entrenador, ser árbitro y ser directivo.
-¿Qué pasa cuando la vida de un futbolista se acaba tan pronto?
-Hay que estar preparado para saber qué vas a hacer después.
-¿Qué piensa un entrenador cuando gana con poco más de 30 años la Liga y la Copa con el Athletic?
-En seguir trabajando. Como te creas que has conseguido todo te pegas un bofetón. Yo no le di importancia.
-Con 60 años y un currículum tan extenso, ¿hay algo que todavía le sorprenda del fútbol?
-Sí, que cada día me gusta más. Pero de lo que me pueda pasar ya no me sorprende nada. En muchos clubes vives auténticas chapuzas. Al fútbol le falta honradez. Esto es un deporte que nace de unos niños que juegan en la calle porque les gusta. La gente tiene la suerte con ese juego estupendo de llegar a ser profesional. Y cuando lo consigue es el desmadre padre. En vez de gustarles jugar, ya no les gusta tanto. Están más pendientes de los anuncios que van a hacer, del contrato que los retire para comprarse tres viviendas... Luego están los presidentes. Este chaval, Carlos el del Valladolid, me parece serio. Demasiado serio. Hay otros que son unos insensatos. ¿Somos un equipo humilde? Pues no matemos al entrenador y a los jugadores si los pobres no dan más de sí.
-¿Cómo ve ahora las guerras de medios que se desataron cuando usted era seleccionador?
-Todo empieza porque yo soy un tío que atiende a todo el mundo, pero soy amigo de José María García. En esa época si eras amigo de García, eras enemigo de los otros. García me defendía hasta cuando metía la gamba. El otro me mataba hasta cuando lo hacía bien. Ahora he recibido mensajes de suerte de una persona como Michael Robinson, que es del Grupo Prisa. Me llevo con él de cine. También con periodistas de 'El País'. Con De la Morena en cambio me llevo a matar.
-Pero sí mantuvo el martes una entrevista muy correcta con él...
-Si me llama yo entro, pero no le paso ni una. Ni me lleva al terreno que él quiere. El último revuelo que tuve en el Murcia fue con uno de su grupo que mintió. Yo dije una frase, pero la cortaron. Cuando yo escuché mi propia voz diciendo que yo deseaba que Manolo Lama hubiera muerto en 1987... Eso es muy fuerte. Aunque me hubiera venido bien que hubiera muerto para evitarme todos los palos que me ha dado ni aún así deseo que le pase nada a Manolo Lama. Esa parte la cortaron. Y va el chulo del Gabilondo y me pega otro palo. Ahora la Cuatro están con la Roja. Es un estandarte del Grupo Prisa. Pero si sientes algo por la Roja es desde que tienes uso de razón. Desde Luis Suárez y luego el Mundial de España... Pero cuando yo estuve con la Roja, hicieron todo lo posible por cargarse a la Roja. Ahora son de la Roja porque les da dinero. Son unos interesados. Si Vicente se va del Mundial en octavos, le inflan y la Roja es una vergüenza.
-Cambiemos de asunto. ¿Alguien le ha recordado ya aquel partido que ganó con el Betis 0-3 por alineación indebida del Real Valladolid?
-Eso fue Lopera. Estaba en la tribuna, bajó en el descanso y dijo que el Valladolid había hecho alineación indebida. Le contesté: déjenos tranquilos para seguir jugando.
-¿Qué le parece como entrenador ganar un partido de esa manera?
-Me parece bien. Valdano lo ha hecho dos veces y no le sancionaron. El reglamento está para cumplirlo.
-¿Aunque sea un error puntual?
-¿Y si lo has hecho a propósito? ¿Te has equivocado? Pues lo siento. Las equivocaciones las tiene que pagar cada uno. Si pasas por una dirección prohibida te ponen una multa. Yo no tenía ni idea. No sé ni quienes son los extranjeros. Eso fue cosa de Lopera, que era un avispado.
http://www.canalpucela.es/noticias/2010-04-08/esta-plantilla-trabajado-como-20100408.html
Javier Clemente (Barakaldo, 1950) ya visto el toro que debe lidiar de aquí a mayo. En ocho partidos quiere volver a disfrutar del trabajo de entrenador y afrontar el reto de salvar al Real Valladolid. Pero Clemente sigue siendo Clemente. Un tipo combativo y un personaje en las antípodas de la corrección política. Su fuerte personalidad debe servir al menos para que la plantilla blanquivioleta finalice la Liga dignamente. Pero si hay milagro y el Real Valladolid se mantiene, el artífice será él.
-¿Qué pulso le ha visto al equipo tras el primer contacto?
-Lo primero fue hablar con los jugadores. En un porcentaje alto hubo recepción, curiosidad. En el entrenamiento la sensación también ha sido buena. Intentan hacer las cosas. Me ha gustado el trabajo que han hecho, pero sobre todo lo que han intentado. Pero hablo a 23 y todos saben cómo contrarrestar lo que digo. Es normal que ganen siempre los suplentes. Ya saben lo que van a hacer los titulares. La actitud de todos es muy buena.
-Usted llega por ocho partidos. ¿El reto es la salvación o domar este vestuario que parece tan difícil?
-Eso va unido. ¿Domar? Yo no voy a domar nada. Sé cómo quiero que funcionen. Estando yo tienen que funcionar como un equipo. Un equipo bueno, menos bueno, regular o malo.
-¿Eso es lo más importante?
-Es lo que tenía que haber ocurrido desde el principio.
-Y usted cree que no ha sucedido así...
-Por la forma de verles no han trabajado en equipo todo el año. Han trabajado individualmente.
-¿Se puede convencer a la plantilla de que la salvación es posible?
-Para que vean que es posible se les puede recordar que en algún momento les puede haber ganado un equipo de Tercera División. Fíjate: en el fútbol el malo le gana al bueno. No digo que el Real Valladolid sea malo, pero un equipo malo puede ganar al Real Madrid o al Barcelona. Lo que hay que mirar es que quedan ocho partidos individuales.
-Usted ha coincidido con un montón de presidentes. ¿Qué impresión le ha causado Carlos Suárez?
-Me he llevado bien con casi todos ellos. A Carlos le veo muy joven. Tiene mucho mérito siendo tan joven meterse en un club. Tiene unas ideas muy profesionales y de exigencia. Me parece un tío muy serio dentro de la poca seriedad que hay en el mundo del fútbol.
-Y usted ya conocía a Roberto Olabe...
-Sí, le tuve en la Real Sociedad. Allí él era el que llevaba el visionado de jugadores extranjeros. Llevaba porteros porque él fue portero.
-No hay muchos entrenadores que acepten venir por ocho partidos en una situación como ésta...
-Yo lo analizo como profesional. Es un reto, pero la vida está llena de retos. Salvar a un equipo en esta situación es muy duro, pero además me gusta el trabajo de entrenar a un equipo. Yo trabajaría de la misma manera si el Real Valladolid estuviese el quinto. Mi objetivo como entrenador es que el equipo funcione. Pero siempre en función de las posibilidades que tiene. No puedo pretender que funcione como el Barcelona.
-El club contrató a un psicólogo recientemente. ¿A usted que le parece esta medida?
-No puedo cambiar nada en este último mes porque no puedo alterar los hábitos de los jugadores. Si quieren seguir teniéndole, por mi parte no hay inconveniente. Fuera de mis horas de trabajo, claro.
-Una parte del trabajo psicológico también corresponde al entrenador.
-Como entrenador está el tema del campo, del vestuario, de la relación personal y, sí, el tema psicológico del grupo...
-¿Ha cambiado su carácter con los años?
-No, tengo el mismo.
-¿Y en los conocimientos?
-En el fútbol se evoluciona. Tengo suerte porque soy veterano, pero tengo capacidad para aprender. Si me dices algo que me guste, lo aprendo.
-¿Tiene la idea de blindar la defensa?
-El fútbol es todo. De nada vale que marques cuatro goles si te meten cinco. Será más fácil que no te metan ninguno y meter uno.
-El nombre de Javier Clemente ha trascendido el ámbito futbolístico. Usted se ha convertido en todo un personaje...
-Porque estuve en la selección, claro. Y porque me he fajado mucho con muchos periodistas. Sólo he demandado a un periodista que es una estrella en España: Luis del Olmo. Le han condenado dos veces, pero ahí sigue hablando en la radio como si fuera el Papa. A ése me he enfrentado yo. Si hay un falso voy a por él. Como si es el hijo del presidente del Gobierno.
-¿Le han perjudicado todas sus guerras?
-He sido como he sido y el que ha querido darme caña me la ha dado. Yo me enfrento a todo dios. No me arruga ni uno. He pasado momentos duros, pero me he sentido bien porque he sido yo. Pero a veces pienso: 'hoy he metido la gamba'.
-Usted tuvo hasta un célebre guiñol televisivo...
-Me suelo reír cuando veo a uno que me imita y hace bromas conmigo. Pero también digo: ¡hombre, no me importaría que imitase también a su padre!
-¿Se acuerda de su breve etapa de jugador, de la grave lesión que le retiró a los 19 años?
-¡Cómo no me voy a acordar si todavía sigo con ella! Lo más grande del fútbol pasa por ser jugador. Luego está ser entrenador, ser árbitro y ser directivo.
-¿Qué pasa cuando la vida de un futbolista se acaba tan pronto?
-Hay que estar preparado para saber qué vas a hacer después.
-¿Qué piensa un entrenador cuando gana con poco más de 30 años la Liga y la Copa con el Athletic?
-En seguir trabajando. Como te creas que has conseguido todo te pegas un bofetón. Yo no le di importancia.
-Con 60 años y un currículum tan extenso, ¿hay algo que todavía le sorprenda del fútbol?
-Sí, que cada día me gusta más. Pero de lo que me pueda pasar ya no me sorprende nada. En muchos clubes vives auténticas chapuzas. Al fútbol le falta honradez. Esto es un deporte que nace de unos niños que juegan en la calle porque les gusta. La gente tiene la suerte con ese juego estupendo de llegar a ser profesional. Y cuando lo consigue es el desmadre padre. En vez de gustarles jugar, ya no les gusta tanto. Están más pendientes de los anuncios que van a hacer, del contrato que los retire para comprarse tres viviendas... Luego están los presidentes. Este chaval, Carlos el del Valladolid, me parece serio. Demasiado serio. Hay otros que son unos insensatos. ¿Somos un equipo humilde? Pues no matemos al entrenador y a los jugadores si los pobres no dan más de sí.
-¿Cómo ve ahora las guerras de medios que se desataron cuando usted era seleccionador?
-Todo empieza porque yo soy un tío que atiende a todo el mundo, pero soy amigo de José María García. En esa época si eras amigo de García, eras enemigo de los otros. García me defendía hasta cuando metía la gamba. El otro me mataba hasta cuando lo hacía bien. Ahora he recibido mensajes de suerte de una persona como Michael Robinson, que es del Grupo Prisa. Me llevo con él de cine. También con periodistas de 'El País'. Con De la Morena en cambio me llevo a matar.
-Pero sí mantuvo el martes una entrevista muy correcta con él...
-Si me llama yo entro, pero no le paso ni una. Ni me lleva al terreno que él quiere. El último revuelo que tuve en el Murcia fue con uno de su grupo que mintió. Yo dije una frase, pero la cortaron. Cuando yo escuché mi propia voz diciendo que yo deseaba que Manolo Lama hubiera muerto en 1987... Eso es muy fuerte. Aunque me hubiera venido bien que hubiera muerto para evitarme todos los palos que me ha dado ni aún así deseo que le pase nada a Manolo Lama. Esa parte la cortaron. Y va el chulo del Gabilondo y me pega otro palo. Ahora la Cuatro están con la Roja. Es un estandarte del Grupo Prisa. Pero si sientes algo por la Roja es desde que tienes uso de razón. Desde Luis Suárez y luego el Mundial de España... Pero cuando yo estuve con la Roja, hicieron todo lo posible por cargarse a la Roja. Ahora son de la Roja porque les da dinero. Son unos interesados. Si Vicente se va del Mundial en octavos, le inflan y la Roja es una vergüenza.
-Cambiemos de asunto. ¿Alguien le ha recordado ya aquel partido que ganó con el Betis 0-3 por alineación indebida del Real Valladolid?
-Eso fue Lopera. Estaba en la tribuna, bajó en el descanso y dijo que el Valladolid había hecho alineación indebida. Le contesté: déjenos tranquilos para seguir jugando.
-¿Qué le parece como entrenador ganar un partido de esa manera?
-Me parece bien. Valdano lo ha hecho dos veces y no le sancionaron. El reglamento está para cumplirlo.
-¿Aunque sea un error puntual?
-¿Y si lo has hecho a propósito? ¿Te has equivocado? Pues lo siento. Las equivocaciones las tiene que pagar cada uno. Si pasas por una dirección prohibida te ponen una multa. Yo no tenía ni idea. No sé ni quienes son los extranjeros. Eso fue cosa de Lopera, que era un avispado.