La semana santa, con su colección de penitentes fustigándose la espalda con fustas jalonadas de pinchos, gente descalza arrastrando cruces hasta que les sangran los pies, fulanos deslomándose intentando sacar un paso de tropecientos kilos por una pequeña abertura de la puerta de una iglesia... a mí todo eso me parece más fuerte que lo del rocío, qué quereis que os diga.
Y se da en toda España, incluyendo estas tierras castellanas.