José Varela escribió:"Pero esta pedazo de selección no dejó que se le escapara el bronce, el merecidísimo bronce."
ya sabía yo que esta medalla iba a ser calificada como un éxito, mientras que el bronce de Pekín lo fue como un fracaso poco menos que estrepitoso. Es lo que tiene llamarse Valero Rivera y estar vinculado a Barcelona, y no Juan Carlos Pastor y estar vinculado a la provinciana Valladolid.
Me alegro profundamente de los éxitos cosechados por nuestras selecciones -aunque esta, en el partido decisivo, hizo crak-, pero hay cosas que me superan ampliamente. Los palos que se llevó Pastor por perder la semifinal con Islandia, madre mía. No eran nadie. El otro día, cuando les ganamos bien ganados, no había que olvidar que los islandeses eran una de las más potentes selecciones del mundo.
Y es que las diferentes varas de medir no me han gustado nunca. A Valero se le ha perdonado todo, hasta la infame actuación de España en el mundial de Croacia 2009 (13ª posición final, se dice pronto). A Pastor está visto que nunca le perdonarán haber hecho a España Campeona del Mundo.
La verdad es que es acojonante.
Felicidades a la selección.