SERVICIO DE DOCUMENTACIÓN
J.P.
“El primer intento fue esquivo”
La primera ocasión en la que el Real Valladolid Deportivo jugó ante el Granada CF en partido oficial, se puede calificar de histórica. No fue un partido cualquiera. Nada menos que una plaza en Primera se disputaron ambas escuadras.
Corría la primavera de 1943, y en la pequeña capital de provincias que era el Valladolid de la posguerra, sólo se hablaba de fútbol. Ni el hambre, ni el desarrollo de la II Guerra Mundial lograban desviar la atención. Esa semana, sólo balompié.
Y todo porqué el equipo titular de la ciudad, tras una gran temporada en Segunda habría logrado clasificarse para disputar la promoción de ascenso a Primera. Un sólo punto a favor de la Real Sociedad había dado el ascenso directo a los vascos y el club castellano debía esperar. Era un buen equipo, aquel blanquivioleta del húngaro Platko. La delantera daba miedo por allí donde pasaba y se recitaba casi de memoria: Viso, Barinaga, Sañudo, Arrieta y Lizosoaín. Todos ellos surtidos de balones por el gran Torquemada que desde la media dominaba en gran medida el juego.
Equipo del Real Valladolid D. Que saltó al césped de las Corts para intentar subir a 1ª.
Alineación del Granada CF ese día de Abril del 43.
Aunque la sede designada por la Federación no era la más adecuada, el estadio de las Corts en la lejana Barcelona, la euforia se desató entre la afición pucelana que en buen número acudió a la ciudad condal. El rival, el Granada CF, lo había pasado mal en Primera y se confiaba en poder doblegarlo.
La ocasión pucelana más clara la tuvieron entre Barinaga y Sañudo. Lástima.
Sin embargo, tras un choque realmente igualado, el Real Valladolid Deportivo se vio superado en los últimos 25 minutos por su rival andaluz, truncándose de esa manera las ilusiones de una afición que tocó la Primera División con las manos durante muchos minutos.
El recibimiento al Real Valladolid fue de lo más caluroso.
Para el histórico partido y a las ordenes del valenciano Vilalta, los equipos se alienaron en un abarrotado estadio de Las Corts, del siguiente modo:
Real Valladolid: Ispizúa; Roque Busquet, Antonio Barrios, Estrada; Torquemada, Leoncito; Lizosoaín, Barinaga, Sañudo, Quetglás y Menéndez
Granada CF: Pérez; Millán, José Luis, Sierra; Bonet, Sosa; Marín, Trompa, Nicola, Alejandro y Aparicio.
Los dos tantos del partido llevaron la firma del goleador catalán del Granada, Nicola. Minutos 70 y 83 de partido.
Otro lance de aquel partido.
Fue un partido histórico donde el Real Valladolid, quizá por inexperiencia, no tuvo fortuna en su primer asalto a la máxima categoría del fútbol español. El sueño de Don José Cantalapiedra, quizá el mejor presidente en la historia del club, no se pudo cumplir.
Cinco años después se llegaría a Primera por la puerta grande, como campeones de Segunda y para quedarse toda una década entre los grandes . Pero esa, es otra historia.
Curiosa anécdota sobre la deportividad vivida en aquel partido, a pesar de lo mucho que había en juego. Eran otros tiempos, sin duda.
PD: Esta pequeña historia narrada en este post no hubiera sido posible sin las crónicas que dejaron para la posteridad tres de los grandes periodistas deportivos vallisoletanos de la época que vivieron in situ para sus medios el encuentro de Las Corts. Hablo de Luis Calabia del “Diario Regional”, de Luis Ángel Merlo del diario “Libertad” y de López Pérez del “Norte de Castilla”.
Última edición por byv11 el Miér 02 Feb 2011, 12:52, editado 1 vez
J.P.
“El primer intento fue esquivo”
La primera ocasión en la que el Real Valladolid Deportivo jugó ante el Granada CF en partido oficial, se puede calificar de histórica. No fue un partido cualquiera. Nada menos que una plaza en Primera se disputaron ambas escuadras.
Corría la primavera de 1943, y en la pequeña capital de provincias que era el Valladolid de la posguerra, sólo se hablaba de fútbol. Ni el hambre, ni el desarrollo de la II Guerra Mundial lograban desviar la atención. Esa semana, sólo balompié.
Y todo porqué el equipo titular de la ciudad, tras una gran temporada en Segunda habría logrado clasificarse para disputar la promoción de ascenso a Primera. Un sólo punto a favor de la Real Sociedad había dado el ascenso directo a los vascos y el club castellano debía esperar. Era un buen equipo, aquel blanquivioleta del húngaro Platko. La delantera daba miedo por allí donde pasaba y se recitaba casi de memoria: Viso, Barinaga, Sañudo, Arrieta y Lizosoaín. Todos ellos surtidos de balones por el gran Torquemada que desde la media dominaba en gran medida el juego.
Equipo del Real Valladolid D. Que saltó al césped de las Corts para intentar subir a 1ª.
Alineación del Granada CF ese día de Abril del 43.
Aunque la sede designada por la Federación no era la más adecuada, el estadio de las Corts en la lejana Barcelona, la euforia se desató entre la afición pucelana que en buen número acudió a la ciudad condal. El rival, el Granada CF, lo había pasado mal en Primera y se confiaba en poder doblegarlo.
La ocasión pucelana más clara la tuvieron entre Barinaga y Sañudo. Lástima.
Sin embargo, tras un choque realmente igualado, el Real Valladolid Deportivo se vio superado en los últimos 25 minutos por su rival andaluz, truncándose de esa manera las ilusiones de una afición que tocó la Primera División con las manos durante muchos minutos.
El recibimiento al Real Valladolid fue de lo más caluroso.
Para el histórico partido y a las ordenes del valenciano Vilalta, los equipos se alienaron en un abarrotado estadio de Las Corts, del siguiente modo:
Real Valladolid: Ispizúa; Roque Busquet, Antonio Barrios, Estrada; Torquemada, Leoncito; Lizosoaín, Barinaga, Sañudo, Quetglás y Menéndez
Granada CF: Pérez; Millán, José Luis, Sierra; Bonet, Sosa; Marín, Trompa, Nicola, Alejandro y Aparicio.
Los dos tantos del partido llevaron la firma del goleador catalán del Granada, Nicola. Minutos 70 y 83 de partido.
Otro lance de aquel partido.
Fue un partido histórico donde el Real Valladolid, quizá por inexperiencia, no tuvo fortuna en su primer asalto a la máxima categoría del fútbol español. El sueño de Don José Cantalapiedra, quizá el mejor presidente en la historia del club, no se pudo cumplir.
Cinco años después se llegaría a Primera por la puerta grande, como campeones de Segunda y para quedarse toda una década entre los grandes . Pero esa, es otra historia.
Curiosa anécdota sobre la deportividad vivida en aquel partido, a pesar de lo mucho que había en juego. Eran otros tiempos, sin duda.
PD: Esta pequeña historia narrada en este post no hubiera sido posible sin las crónicas que dejaron para la posteridad tres de los grandes periodistas deportivos vallisoletanos de la época que vivieron in situ para sus medios el encuentro de Las Corts. Hablo de Luis Calabia del “Diario Regional”, de Luis Ángel Merlo del diario “Libertad” y de López Pérez del “Norte de Castilla”.
Última edición por byv11 el Miér 02 Feb 2011, 12:52, editado 1 vez