Siento disentir, pero en este hilo no veo debate, salvo que se desvíe el tema de conversación. Lo que sí veo son personalismos que tratan de salvar el culo, porque les ha pillado en fuera de juego todo el bombazo informativo de ayer.
Y digo que no hay debate, porque no es una cuestión de sueños, sino de realidades y de aplicar lógicas. Si el club tiene un dueño que es el único que se juega su dinero, querrá lo mejor para el club. ¿Coincide con los intereses de los aficionados? En gran medida sí: Si Suárez quiere que el Club crezca (nos guste el proyecto deportivo o no, que aún lo lo conocemos) deberá hacer un proyecto atractivo para el aficionado. Y el hecho de que un movimiento accionarial encriptado por nacer, crecer y morir dentro de los intestinos del propio accionariado nos da ciertas claves, como que es muy poco probable que se compre para seguir igual, en la mediocridad del aplazamiento continuo de deudas, del gasto cero y de la huida hacia adelante. Suárez es un personaje paradójico y controvertido. Se le puede criticar hasta la saciedad. Pero ni es ni ha sido nunca tonto, conoce todos los entresijos tras once años en el Club y dudo mucho de que se juegue su dinero para ir haciendo "el migas" con el mismo rumbo que antes de los cambios. ¿Ganará dinero? Pues claro y además tendrá que amortizar deuda. Serán los sueños de los aficionados los que deban adaptarse a la realidad del Club, empresa privada que gestionará dentro de unas posibilidades. Así que nosotros seguiremos a lo nuestro, diciendo lo que nos gusta y lo que no, lo que queremos y lo que no. Egos aparte, claro: ya hay quien asegura que Suárez no es un empresario innovador, cuando sólo conocemos su faceta de gestor. ¿Un poco pronto, no? ¿O ya empezamos con el "ya lo dije yo"?