Entrevista a Pablo Cacheda

Hoy se cumplen 200 días desde que Pablo Cacheda cayera lesionado en pretemporada y aprovechando esta circunstancia El Norte de Castilla le realiza una entrevista para ver que tal avanza su recuperación y como se encuentra de ánimo. Según sus palabras, el día 3 de abril podría recibir el alta médica. Os copio integra la entrevista:

Hoy se cumplen doscientos días desde que aquel 17 de agosto del año pasado una mala caída en un amistoso de pretemporada en Aranda de Duero cortase de raiz los sueños de Pablo Cacheda (Lalín, 1992) en el BM Valladolid. La resonancia confirmó la rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y la temporada se convirtió en una condena de siete meses para el joven central gallego que había llegado a las filas del Cuatro Rayas como la estrella del equipo. A sus 21 años, Pablo Cacheda pasó por el quirófano por primera vez en su carrera deportiva el pasado 3 de septiembre y desde el día siguiente su único objetivo es recuperarse y volver a ser el mismo. Este joven jugador, incluido en el mejor cinco del pasado Mundial júnior de balonmano, dejó su Galicia natal y cambió el club que le crió, el Academia Octavio, para probar fortuna en el Cuatro Rayas Valladolid. Y la fortuna le dio la espalda a la primera oportunidad.

–¿Cómo se encuentra ahora mismo?
–Bastante bien, con muchos ánimos. Todavía no entreno con normalidad con el equipo.
–¿Qué plazos le han dado los médicos?
–Esta misma semana he estado con el doctor Fernando Baró y los fisios. Me hicieron una prueba de esfuerzo muscular y todo marcha según lo previsto, pero todavía tengo que esperar un mes. Tengo que comprobar las sensaciones y perder los miedos. El 3 de abril tengo que volver y es cuando cumplen siete meses de la operación. Quizás entonces me den el alta para competir, siempre que todo vaya bien.
–Se le tienen que haber hecho larguísimos estos seis meses
–Muy largos y muy duros porque se juntaron muchos factores. Era la primera vez que salía fuera de Galicia, la primera lesión grave, las expectativas que tenía..... No ha sido nada fácil. Y eso que afortunadamente no he tenido ni un problema con la rodilla. No se me ha inflamado y ello me ha dado confianza para seguir trabajando y comprobando que todo evolucionaba bien.
–¿Cuál ha sido el momento más duro?
–Sin duda el de la propia lesión y la semana siguiente, con la incertidumbre de si era grave o no. Las dudas y luego la operación y la semana posterior, fueron los momentos más duros sin duda. Después cuando comienzas la rehabilitación ya tienes otros objetivos que vas cumpliendo poco a poco y eso ayuda. Nunca olvidaré ese 17 de agosto ni el 3 de septiembre.
–¿Tiene miedo a una recaída o a volverse a lesionar?
–De momento he trabajado muy bien, todos los ejercicios y las prescripciones médicas las he llevado a rajatabla y hasta ahora todo ha funcionado tal como estaba previsto. Yo siento la rodilla estable, me da seguridad, pero aún no tengo plena confianza. Me falta un poco de fuerza y eso me provoca algunas molestias que espero que se solucionen en este último mes.
–¿Cómo ve a su equipo?
–Pues, ahora, bastante bien. Estas dos victorias consecutivas nos han dado confianza y fuerza a todos. Hacia falta un triunfo como el del Bidasoa, con autoridad, y también un triunfo fuera, y lo logramos en Cangas. Desde luego que todavía nos va a tocar sufrir y no hay nada hecho. El sábado ante el BM Aragón es un partido muy importante y muy complicado. Una tercera victoria sería extraordinario.
–¿Se sufre más en el campo o en la grada?
–Por supuesto que en la grada. No poder ayudar... ahora que empiezo a estar mejor a veces me dan ganas de saltar a la cancha a echar una mano. Pero ya me queda poco.