Las camisetas falsas de Hummel se cuentan por millares entre aficionados de toda condición. Lo que nos lleva a la conclusión de que si Hummel fabrica sus camisetas en la conchinchina y un señor de la conchinchina se las plagia y dando una calidad parecida las puede vender por la cuarta parte de su precio... Hummel son unos estafadores, vamos, como lo fueron todas las marcas deportivas que nos han vestido las 2 ó 3 últimas décadas.