Todavía a día de hoy sigo maldiciendo aquel fatídico día en el cual nacho Lewin puso pie en el Real Valladolid. Era el comienzo de una era que se iba a fundamentar en la mentira y el engaño, pero lo más grave en la usurpación a los aficionados del Real Valladolid de su club.
Poniendo como caramelo el halo madridista de los Valdano y Cortes Elvira, apoyados en el soporte mediático del Grupo Prisa del Nacho Lewin era todavía parte preponderante, el club comenzó a caminar a lo que sería a día de hoy una de las peores etapas en la historia del club.
Los primeros dispendios económicos comenzaron ahí, si bien es verdad que con la idea de hacer cosas grandes que como siempre pasa en este club se quedan en pequeñas y aquellos polvos trajeron estos lodos y entre lodo siempre viene porquería y entre ella apreció Carlos Suarez siendo el principio del fin, un caminar lento que incluso se hacía imperceptible pero que ha llevado a que diez años después de su llegada al club consumemos el tercer descenso, que estos dos años en primera sean la etapa más corta del pucela en primera desde los años 60 y sobre todo que después de una dolorosísima temporada de auténtico sufrimiento finalizada de manera vergonzosa haciendo el ridículo en Sevilla y en tu propia casa llenando un campo para ni siquiera empatar.
El club hoy, más que ayer pero menos que mañana es un foribundo en manos de un inconsciente que busca únicamente su beneficio personal.
Esta década ha escrito su ultimo capitulo en una temporada, que desde tengo uso de razón ha sido posiblemente la peor, con una plantilla indigna de un mal equipo de primera división.
Tengo que decir que para mí la pesadilla se hizo realidad el día que fui a ver al equipo en Pretemporada a Luarca, voy normalmente por proximidad y suele ser un buen test de lo que puede ser la temporada. Este año ha sido el más preciso. Fue un equipo sin calidad con un entrenador que empezó a ejercer de lo que ha sido toda la temporada un arrastrado sin criterio propio cumpliendo órdenes de secretario técnico y directiva. Su primera fechoría a quel día fue tener a Carlos Lázaro calentando la segunda parte para no jugar ni un minuto (en pretemporada), no hay más que decir.
Pero en esto hay que reconocer que el gran cerebro de todo esto ha sido el gran Alberto Marcos. Empezó por hacer una secretaria técnica a su gusto, es decir sacando a gente que trabajaba por poco dinero (bien o mal pero trabajaba) para meter amigos suyos como Víctor y Juan Carlos para poder tener gente que fuera con él a jugar los partidos de veteranos. Cuantos fines de semana han estado jugando partidos de veteranos y viendo al promesas en casa cuando había partidos de selecciones autonómicas o partidos de segunda B a los cuales iba Torres Gómez pero no ninguno de los que tenían tal función.
La conclusión ha sido que hemos fichado como fichan los ciegos, sin ver solo palpando y catando sin abrir el melón y sin saber de dónde venía ni el tiempo que llevaba, incluso sin saber si necesitábamos un melón (podía hacer un chiste fácil pero me lo guardo).
Quizás los peor de todo es que hay veces que uno se da cuenta que se ha equivocado en un planteamiento y en el mundo del futbol más, ese es el momento de rectificar de cambiar cosas pero eso es difícil de hacer cuando no has trabajado y no sabes cuál es el mercado ni las opciones que hay con lo que te has dedicado a traer gordos todos ellos maravillosas estrellas a las que teóricamente el único problema es que le sobraba algún kilo.
El mercado de invierno de este año pasara a la historia como la peor gestión posible. No vendes a un jugador que te habría reportado unos recursos increíbles, traes a una medianía y a un lesionado, conclusión el equipo no se ha reforzado y ha perdido dinero.
La ultima gestión es la del entrenador, que fichas con la recomendación de uno de tus fichajes ara tu secretaria técnica como es Víctor, pues bien, te doy como bueno el fichaje porque venía de salvar la levante dos años consecutivos, a un club del “potencial” del pucela, pero si durante la temporada no te das cuenta que no ha cuajado ni con afición ni sobre todo con plantilla, hace ver que eres un incompetente para este puesto.
Ara el final dejemos a CARLOS, aquí la cuestión es fácil ya que se define el mismo ayer. En declaraciones a la radio habla de que lo mejor es la gestión del club estos dos años, es decir los años que no los ha gestionado él sino los jueces concursales, TODO DICHO.
Y hoy me levanto como todos diciendo, a ver si es Mendilibar, que si sobra un delantero o un central o seis jugadores o si tiene que subir de la cantera pepito o Juanito y la realidad es que sé que es el comienzo de otra época que sólo acabara el día que este señor abandone el club, solo espero y deseo que no sea demasiado tarde.
Crecí acostumbrado a vivir en primera división sufriendo, incluso llegando a Europa, viendo a la gente de la casa tener oportunidad de jugar en su club. Crecí acostumbrado a que el Valladolid fuera un club modesto, muy modesto haciendo rifas por bares, buscando el dinero, viviendo de cesiones de Madrid, Atletico y Barca pero con jugadores deseosos de venir a este club que daba prestigio y en el que se quedaban prendados de la ciudad y su gente, para pasar a ser un club al que se le ha perdido el respeto y con el que ningún club quiere tratar porque sabe que al frente del mismo hay alguien que no es de fiar.
Ojalá algún día podamos escribir algo diferente pero a día de hoy al real valladolido solo se le puede decir una cosa D.E.P.
Poniendo como caramelo el halo madridista de los Valdano y Cortes Elvira, apoyados en el soporte mediático del Grupo Prisa del Nacho Lewin era todavía parte preponderante, el club comenzó a caminar a lo que sería a día de hoy una de las peores etapas en la historia del club.
Los primeros dispendios económicos comenzaron ahí, si bien es verdad que con la idea de hacer cosas grandes que como siempre pasa en este club se quedan en pequeñas y aquellos polvos trajeron estos lodos y entre lodo siempre viene porquería y entre ella apreció Carlos Suarez siendo el principio del fin, un caminar lento que incluso se hacía imperceptible pero que ha llevado a que diez años después de su llegada al club consumemos el tercer descenso, que estos dos años en primera sean la etapa más corta del pucela en primera desde los años 60 y sobre todo que después de una dolorosísima temporada de auténtico sufrimiento finalizada de manera vergonzosa haciendo el ridículo en Sevilla y en tu propia casa llenando un campo para ni siquiera empatar.
El club hoy, más que ayer pero menos que mañana es un foribundo en manos de un inconsciente que busca únicamente su beneficio personal.
Esta década ha escrito su ultimo capitulo en una temporada, que desde tengo uso de razón ha sido posiblemente la peor, con una plantilla indigna de un mal equipo de primera división.
Tengo que decir que para mí la pesadilla se hizo realidad el día que fui a ver al equipo en Pretemporada a Luarca, voy normalmente por proximidad y suele ser un buen test de lo que puede ser la temporada. Este año ha sido el más preciso. Fue un equipo sin calidad con un entrenador que empezó a ejercer de lo que ha sido toda la temporada un arrastrado sin criterio propio cumpliendo órdenes de secretario técnico y directiva. Su primera fechoría a quel día fue tener a Carlos Lázaro calentando la segunda parte para no jugar ni un minuto (en pretemporada), no hay más que decir.
Pero en esto hay que reconocer que el gran cerebro de todo esto ha sido el gran Alberto Marcos. Empezó por hacer una secretaria técnica a su gusto, es decir sacando a gente que trabajaba por poco dinero (bien o mal pero trabajaba) para meter amigos suyos como Víctor y Juan Carlos para poder tener gente que fuera con él a jugar los partidos de veteranos. Cuantos fines de semana han estado jugando partidos de veteranos y viendo al promesas en casa cuando había partidos de selecciones autonómicas o partidos de segunda B a los cuales iba Torres Gómez pero no ninguno de los que tenían tal función.
La conclusión ha sido que hemos fichado como fichan los ciegos, sin ver solo palpando y catando sin abrir el melón y sin saber de dónde venía ni el tiempo que llevaba, incluso sin saber si necesitábamos un melón (podía hacer un chiste fácil pero me lo guardo).
Quizás los peor de todo es que hay veces que uno se da cuenta que se ha equivocado en un planteamiento y en el mundo del futbol más, ese es el momento de rectificar de cambiar cosas pero eso es difícil de hacer cuando no has trabajado y no sabes cuál es el mercado ni las opciones que hay con lo que te has dedicado a traer gordos todos ellos maravillosas estrellas a las que teóricamente el único problema es que le sobraba algún kilo.
El mercado de invierno de este año pasara a la historia como la peor gestión posible. No vendes a un jugador que te habría reportado unos recursos increíbles, traes a una medianía y a un lesionado, conclusión el equipo no se ha reforzado y ha perdido dinero.
La ultima gestión es la del entrenador, que fichas con la recomendación de uno de tus fichajes ara tu secretaria técnica como es Víctor, pues bien, te doy como bueno el fichaje porque venía de salvar la levante dos años consecutivos, a un club del “potencial” del pucela, pero si durante la temporada no te das cuenta que no ha cuajado ni con afición ni sobre todo con plantilla, hace ver que eres un incompetente para este puesto.
Ara el final dejemos a CARLOS, aquí la cuestión es fácil ya que se define el mismo ayer. En declaraciones a la radio habla de que lo mejor es la gestión del club estos dos años, es decir los años que no los ha gestionado él sino los jueces concursales, TODO DICHO.
Y hoy me levanto como todos diciendo, a ver si es Mendilibar, que si sobra un delantero o un central o seis jugadores o si tiene que subir de la cantera pepito o Juanito y la realidad es que sé que es el comienzo de otra época que sólo acabara el día que este señor abandone el club, solo espero y deseo que no sea demasiado tarde.
Crecí acostumbrado a vivir en primera división sufriendo, incluso llegando a Europa, viendo a la gente de la casa tener oportunidad de jugar en su club. Crecí acostumbrado a que el Valladolid fuera un club modesto, muy modesto haciendo rifas por bares, buscando el dinero, viviendo de cesiones de Madrid, Atletico y Barca pero con jugadores deseosos de venir a este club que daba prestigio y en el que se quedaban prendados de la ciudad y su gente, para pasar a ser un club al que se le ha perdido el respeto y con el que ningún club quiere tratar porque sabe que al frente del mismo hay alguien que no es de fiar.
Ojalá algún día podamos escribir algo diferente pero a día de hoy al real valladolido solo se le puede decir una cosa D.E.P.