Y eso que el penalti lo ha tirado como el culo
GUZMÁN, DOS AÑOS. ‘Para que llegue un delantero se tiene que ir Guzmán’. El mantra repetido desde el club en los últimos días no era falso. Guzmán se negaba a rescindir y a que le tocasen la ficha. Va a ser padre y no se quiere mover de la ciudad, donde está muy a gusto. A última hora el extremo ha cambiado de opinión... porque el club le ha ofrecido una alternativa.
En vez de pagarle su actual ficha en un año, le desembolsará una cantidad algo superior en dos, bajando la percepción de esta temporada lo suficiente como para no rebasar el límite salarial. Club y jugador han quedado en revisar su situación en junio para no sentirse hipotecados. Guzmán está convencido de que con Herrera le llegará su oportunidad.