Pues ahí ha estado la diferencia entre un filial correcto ("correcto" pero es el mejor Promesas en los últimos 15 años como mínimo), que está rindiendo por encima de sus posibilidades, frente a otro que tiene al mejor jugador de la categoría y que está hecho para ascender. Entre el gol de córner (uno más), y que te marquen en la última jugada nada más empatar...