El Gobierno obligará por ley a retirar los símbolos religiosos de los colegios
El ministro de Justicia anuncia esta medida cinco meses después de que el colegio Macías Picavea quitara, por orden judicial, los crucifijos de sus aulas
J. MORENO
| VALLADOLID
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se plantea incluir en la Ley de Libertad Religiosa que pretende aprobar durante esta legislatura la retirada de todos los símbolos religiosos que existan en colegios e institutos públicos, a excepción de aquéllos que tengan valor histórico, artístico o para el patrimonio.
Este anuncio hecho ayer por el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, se produce cinco meses después de que un juzgado de Valladolid diese la razón al colectivo Asociación Cultural Escuela Laica (Acel) y obligase a la retirada de todos los símbolos religiosos que estaban en el colegio Macías Picavea de la capital.
El consejo escolar de este centro acordó esta retirada el 3 de abril de este mismo año, justo el día en el que comenzaban las vacaciones de Semana Santa. En el auto, el juez señalaba entonces que la retirada de los símbolos religiosos de los espacios comunes «no supone que se vulnere el derecho de los alumnos del centro a recibir la enseñanza religiosa, por la que han optado voluntariamente y de sus padres a que así sea».
Ahora, el ministro Francisco Caamaño señala, en una entrevista a Europa Press, que la «idea matriz» de este proyecto es que «haya un claro deslinde entre el fenómeno religioso y el espacio público y la laicidad del Estado». «Nuestra idea es que en los colegios públicos no exista ningún símbolo religioso, pero si resulta que hay una imagen que es patrimonio histórico y es un centro público, si tiene valor histórico-artístico, no podrá destruirse», argumenta.
El pasado curso, cuatro colegios de la provincia mantenían crucifijos en sus paredes. Eran, además del Macías Picavea (ya retirada), el colegio Isabel la Católica -en la capital- y los colegios Teresa Revilla, de Fresno el Viejo, y San Juan Bautista de Rodilana.
Caamaño defiende la necesidad de «dar un paso adelante» en esta materia para evitar que exista «confusión entre las funciones públicas estatales y las religiosas», al tiempo que rechaza que el debate se limite a si los crucifijos o los belenes se retiran o no de los centros escolares públicos. «Hay que ir matizando», apunta.
En relación con la escuela concertada, el ministro admite que «el tema no es tan sencillo» y que se legislará en función de «usos y costumbres y pautas de conductas. «Hay cosas que son perfectamente razonables en una sociedad como la española, donde el sentimiento religioso tiene un peso, una dimensión y donde se viven muchos elementos religiosos como los belenes», señala.
De igual modo, explica que el objetivo de esta ley no es evitar que «un alumno lleve un pequeño crucifijo», aunque matiza: «Todos sabemos que porque uno tenga una conciencia muy moderna y muy libre, eso no va a permitir a un niño, probablemente, ir desnudo al colegio y que diga que lo hace por su libertad de conciencia».
Comedores escolares
Con respecto a los comedores escolares, el Gobierno pretende regular que los niños de religión musulmana o judía puedan «comer de manera distinta» si así lo desean. «Yo no le puedo dar de comer distinto que a los demás porque éste es un servicio público para todos, pero al menos le puedo permitir bajo la responsabilidad de los padres que traiga su propia comida y se siente en el comedor escolar», dice Caamaño.
El proyecto de ley, que el Ejecutivo confía en remitir a las Cortes «al inicio quizá del próximo periodo de sesiones», tendrá como objetivos, en palabras del ministro, «la igualdad, el reconocimiento de la libertad religiosa, la laicidad del Estado y la separación de funciones» de la Iglesia y el Estado.
Tras apuntar que la sociedad española «ha evolucionado muchísimo» en materia de «sensibilidad religiosa» en los últimos años, el ministro destaca la necesidad de establecer «con prudencia y sensatez» un sistema que «reconozca esta pluralidad y trate a todas las religiones en igualdad», según palabras del ministro.
http://www.nortecastilla.es/20090810/valladolid//gobierno-obligara-retirar-simbolos-20090810.html
Ya era hora de que el Gobierno gobierne, que para eso está elegido. Católicos contrarios a la libertad religiosa, con todos los respetos, a rezar en el templo y si vais mal de tiempo, en casa se puede montar un tenderete por un módico precio. Escuela laica y para todos, sin distinciones y sin imposiciones.
El ministro de Justicia anuncia esta medida cinco meses después de que el colegio Macías Picavea quitara, por orden judicial, los crucifijos de sus aulas
J. MORENO
| VALLADOLID
El Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se plantea incluir en la Ley de Libertad Religiosa que pretende aprobar durante esta legislatura la retirada de todos los símbolos religiosos que existan en colegios e institutos públicos, a excepción de aquéllos que tengan valor histórico, artístico o para el patrimonio.
Este anuncio hecho ayer por el ministro de Justicia, Francisco Caamaño, se produce cinco meses después de que un juzgado de Valladolid diese la razón al colectivo Asociación Cultural Escuela Laica (Acel) y obligase a la retirada de todos los símbolos religiosos que estaban en el colegio Macías Picavea de la capital.
El consejo escolar de este centro acordó esta retirada el 3 de abril de este mismo año, justo el día en el que comenzaban las vacaciones de Semana Santa. En el auto, el juez señalaba entonces que la retirada de los símbolos religiosos de los espacios comunes «no supone que se vulnere el derecho de los alumnos del centro a recibir la enseñanza religiosa, por la que han optado voluntariamente y de sus padres a que así sea».
Ahora, el ministro Francisco Caamaño señala, en una entrevista a Europa Press, que la «idea matriz» de este proyecto es que «haya un claro deslinde entre el fenómeno religioso y el espacio público y la laicidad del Estado». «Nuestra idea es que en los colegios públicos no exista ningún símbolo religioso, pero si resulta que hay una imagen que es patrimonio histórico y es un centro público, si tiene valor histórico-artístico, no podrá destruirse», argumenta.
El pasado curso, cuatro colegios de la provincia mantenían crucifijos en sus paredes. Eran, además del Macías Picavea (ya retirada), el colegio Isabel la Católica -en la capital- y los colegios Teresa Revilla, de Fresno el Viejo, y San Juan Bautista de Rodilana.
Caamaño defiende la necesidad de «dar un paso adelante» en esta materia para evitar que exista «confusión entre las funciones públicas estatales y las religiosas», al tiempo que rechaza que el debate se limite a si los crucifijos o los belenes se retiran o no de los centros escolares públicos. «Hay que ir matizando», apunta.
En relación con la escuela concertada, el ministro admite que «el tema no es tan sencillo» y que se legislará en función de «usos y costumbres y pautas de conductas. «Hay cosas que son perfectamente razonables en una sociedad como la española, donde el sentimiento religioso tiene un peso, una dimensión y donde se viven muchos elementos religiosos como los belenes», señala.
De igual modo, explica que el objetivo de esta ley no es evitar que «un alumno lleve un pequeño crucifijo», aunque matiza: «Todos sabemos que porque uno tenga una conciencia muy moderna y muy libre, eso no va a permitir a un niño, probablemente, ir desnudo al colegio y que diga que lo hace por su libertad de conciencia».
Comedores escolares
Con respecto a los comedores escolares, el Gobierno pretende regular que los niños de religión musulmana o judía puedan «comer de manera distinta» si así lo desean. «Yo no le puedo dar de comer distinto que a los demás porque éste es un servicio público para todos, pero al menos le puedo permitir bajo la responsabilidad de los padres que traiga su propia comida y se siente en el comedor escolar», dice Caamaño.
El proyecto de ley, que el Ejecutivo confía en remitir a las Cortes «al inicio quizá del próximo periodo de sesiones», tendrá como objetivos, en palabras del ministro, «la igualdad, el reconocimiento de la libertad religiosa, la laicidad del Estado y la separación de funciones» de la Iglesia y el Estado.
Tras apuntar que la sociedad española «ha evolucionado muchísimo» en materia de «sensibilidad religiosa» en los últimos años, el ministro destaca la necesidad de establecer «con prudencia y sensatez» un sistema que «reconozca esta pluralidad y trate a todas las religiones en igualdad», según palabras del ministro.
http://www.nortecastilla.es/20090810/valladolid//gobierno-obligara-retirar-simbolos-20090810.html
Ya era hora de que el Gobierno gobierne, que para eso está elegido. Católicos contrarios a la libertad religiosa, con todos los respetos, a rezar en el templo y si vais mal de tiempo, en casa se puede montar un tenderete por un módico precio. Escuela laica y para todos, sin distinciones y sin imposiciones.