'EL ANÁLISIS DEL EXPERTO'
La Aviva Premiership inglesa cruzó el 'ecuador' con tres principales candidatos
· Exhaustivo análisis, uno por uno, de los doce equipos de la Aviva Premiership inglesa una vez concluida la primera vuelta de la temporada regular
POR JOSÉ IGNACIO BENITO 12/01/11
Acabada la primera vuelta de la Aviva Premiership, el campeonato inglés de rugby que este año ha cambiado de denominación por el tema de patrocinadores, Guinness dejó su sello durante muchos años, pasamos a analizar las actuaciones de los doce equipos hasta ahora y ver cuáles serán sus aspiraciones para lo que resta de campeonato: toda la segunda vuelta y las eliminatorias por el título. Hoy comenzamos con la 'zona noble' de la clasificación... con lo que habrá segunda parte... esperemos que mañana mismo.
Empezamos por los tres grandes aspirantes al título, Northampton Saints, líderes en la primera vuelta; Leicester Tigers, actuales campeones como se puede ver en la foto; y Saracens, el 'tapado' de esta Liga
Empezamos por los tres grandes aspirantes al título, los Saints, líderes al final de la primera vuelta y que acaban de ceder el liderato al caer en Leicester... aunque aún tienen dos partidos menos; los propios Tigers, los actuales campeones; y Saracens, que están volviendo a cuajar una gran temporada regular como el año pasado.
NORTHAMPTON SAINTS: Líder sólido, tanto en Inglaterra -actualmente tiene 5 puntos menos que Leicester pero está con dos partidos menos, como se puede ver en la clasificación actualizada de abajo- como en Heineken Cup, la única incógnita es saber si llegará fresco al tramo final de las competiciones, pues con un VI Naciones de por medio, sus jugadores internacionales acumularán muchos partidos y llegado el momento, podría notar las ausencias o el cansancio de los Foden, Ashton, Lawes, Hartley... fijos también para Martin Johnson. La dirección del juego ofrece muchas variantes con dos buenos aperturas, Myler y Gerarthy, y dos medios de corte clásico, Dickson y Powell, sin apenas distinción entre titulares y suplentes. Un punto a favor, no hay dependencia de un jugador en estos puestos.
La semifinal de la pasada temporada le aporta esa experiencia tan necesaria en estos partidos y no creo que la máxima competición europea le despiste, su verdadero objetivo es la Liga, es lo que cualquier jugador inglés quiere ganar. Su cuerpo técnico es de lo mejor de la Premiership: a Jim Mallinder le acompañan dos leyendas como Dorian West y Paul Grayson, entrenador suyo muchos años y héroe en su Heineken Cup del 2000 como jugador, al conseguir todos los puntos del equipo frente a Munster. En la Academia imparte doctorado William 'Dusty' Hare, mito en Leicester con casi 400 partidos a sus espaldas y más de 4.000 puntos, y que dirigió muchas temporadas la categorías inferiores allí y no tardarán en verse los resultados en Northampton.
LEICESTER TIGERS: Equipo que por tradición, historia y presencia está obligado a ganar todas las competiciones que juegue. No pueden elegir relajarse en alguna, los Tigers no. Le costó coger la forma y sólo su solidez en casa le hizo estar arriba, perdiendo sus cuatro primeros desplazamientos de forma consecutiva. Recuperado Toby Flood, perderán muy pocos partidos de aquí al final y, al igual que a Northampton, el tener tantos internacionales le condiciona los finales de temporada, pero cuando uno es grande o quiere serlo, tiene ese hándicap, para eso hay plantillas de más de 30 jugadores.
Houggard es uno de los diez surafricanos que hay en la plantilla de los Saracens, finalista el año pasado y con mimbres suficientes para dar la sorpresa en la Aviva.
Si quedase fuera de los cuartos de la Heineken Cup, pasaría a ser el máximo favorito para repetir un nuevo título inglés. La ausencia de Flood ha dejado al descubierto el grave problema de aperturas que tiene, pues ni Staunton ni Twelvetrees están a la altura del resto del equipo. Magnífico en primera línea como siempre -en todos los partidos hay un ensayo de castigo desde la melé-, con un Youngs que se sale y donde Tom Waldrom está siendo el jugador de la temporada. Llevan seis finales consecutivas en Twickemham y nada indica que no haya una séptima. Quien sabe si en alguna de las próximas podría estar en sus filas nuestro César Sempere, que ya debutó en octubre con su segundo equipo.
SARACENS: Finalista la temporada pasada, lo cual es una experiencia impagable, es un equipo con mimbres suficientes para dar la sorpresa, pues ya ha ganado a los dos equipos anteriores. Sólo hay que ver la plantilla, con diez sudafricanos más el namibio Burguer. Hasta el entrenador es de allí, el señor Venter. A su favor, estar ya descolgado de la Heineken Cup y poder centrarse en el campeonato inglés, donde llegará fortísimo al final al no tener tantos internacionales europeos como otros. Muy compensado en todas sus líneas, destaca la primera, totalmente sudafricana con Du Plessis, Castrens y el supertalonador Brits, ex de los Stormers y uno de mis jugadores favoritos; la combatividad de sus terceras Brown, Burguer y Joubert; y la buena dirección del juego, también con denominación de origen 'springbok' con De Kock y Houggard, bien sustituidos por la experiencia de Wigglesworth y Farrell. ¡ Cuidado que es el 'tapado' de esta Liga !
Tras estos tres equipos nos encontramos con otros cuatro que considero un peldaño por debajo y que, salvo sorpresa, disputarán la cuarta plaza de acceso a semifinales. Hablamos de Wasp, Irish, Harlequins y Gloucester.
LONDON WASP: Un gran campeón venido a menos, tardará mucho en reverdecer laureles tras la retirada de sus grandes hombres. Todavía es un gustazo ver a gente como Simon Shaw, con 37 años, más de 300 partidos y todo ganado, que siga jugando con esa ilusión, igual que Worsley a sus 33 años o Betsen a los 36, Ejemplos a seguir y base para hacer equipo con jugadores jóvenes. Muy fuertes en casa, da gusto ver su clásica defensa con el ala adelantado, bajan mucho fuera y siguen con su rugby fiero herencia de Dallaglio e Ibañez, más efectivo que vistoso.
LONDON IRISH: Equipo calcado a Cardiff Blues, el vigente campeón de la Challenge Cup: grandísimos jugadores fichados a base de talonario que luego no consiguen los resultados esperados. Con internacionales en todas sus líneas, dos aperturas con mucha experiencia en la Liga como Ryan Lamb y Malone y dos buenos centros, sólo hay una explicación a la crisis de juego y resultados: falta de confianza del jugador, el peor problema que puede tener un deportista profesional. Un jugador con confianza está en disposición de vencer a cualquiera, sin confianza está derrotado de antemano.
Varndell avanza con el oval durante un partido de los Wasps, un gran campeón venido a menos y que tardará mucho en reverdecer laureles. Eso sí, aún es un gustazo ver a veteranos con la ilusión de Simon Shaw, Worsley o Betsen. Ejemplos a seguir y base para hacer un equipo como el de antaño: muy fuertes en casa y da gusto ver su clásica defensa con el ala adelantado.
Suele haber una solución para esto, algo absurda, pero lógica: destituir al entrenador. Toby Booth es el responsable de las alineaciones, del método de juego y de mantener la moral de la 'tropa' y, aunque los que saltan al campo son ellos, los anteriores aspectos son fundamentales en el grupo de trabajo, los resultados no son buenos y algo debe cambiar. En Inglaterra se suele tener paciencia, pero tras la derrota frente a Bath es complicado.
HARLEQUINS: El equipo con el patrón de juego más claro de la Liga, saben a qué juegan y a qué no tienen que jugar. Dificilísimo de ganar, tres derrotas con punto bonus defensivo y dos empates, lo que indica una lucha total, una fe en el equipo inquebrantable y una combatividad máxima; es el más peleón e incómodo de jugar de la Liga, tipo combinado de Escocia. Entre tanto músculo y sudor, hay calidad, el medio Care maneja al paquete como un noveno delantero, dando mucha continuidad a los ataques y el ex 'all black' Nick Evans aporta cabeza fría y visión, alternando ataques con delanteros y tres cuartos poderosísimos como Turner-Hall y Monye. El suplente de Evans, Rory Clegg, dará que hablar estos años, tiene una patada que vale dinero.
Destacan también sus terceras Skinner, Robshaw y Easter, incansables en el esfuerzo, los pilieres Marler y Johnston y el espíritu del mejor jugador de la historia de Inglaterra impregnándolo todo: Dean Richards. Mi ídolo de siempre, culpable de mi amor al Rugby, un delantero adelantado a su tiempo, visión de juego, recuperación, lectura de juego, una mezcla de McCaw y Dallaglio. Como entrenador, cautro Ligas y dos Heineken Cups con sus Tigers y 'maestro' de Martin Johnson, estaba construyendo unos grandes Quins hasta que el 'Bloodgate' acabó con su carrera. Supuso una gran decepción personal, el ídolo caído. Siempre tendré mucho cariño a este equipo.
GLOUCESTER: La historia debe a este equipo un título, aunque si no la consiguió entonces, menos ahora. Teledeporte retransmitió su victoria contra Leicester y la afición lo celebró como si fuese la final. Entre 'tigres' y 'avispas' les han amargado la vida tras ganar dos ligas regulares de forma justísima y dominadora y luego perder una final y una semifinal. En homenaje a ese equipo citaré algunos nombres: Simpson-Daniel, Willie Walker, Mike Tindall, Tony Allen, Vainikolo, Cris Paterson, un jovencísimo Ryan Lamb, Rory Lawson y una delantera al mando del Cappo Bortolami con una primera línea de lujo: Nieto, Califano y Azam. Creo que es el que practica mejor rugby de estos cuatro y, al final, será semifinalista.
http://www.marca.com/2011/01/12/mas_deportes/rugby/1294847689.html
