El Real Valladolid debería tener presente que las condiciones físicas y técnicas de Miguel son las de un delantero para marcar época aquí, por supuesto si sigue con una buena progresión, que pasa como mínimo por una temporada completa como titular en el Real Valladolid B y jugando en su sitio y no en banda, como le está sacando el iluminado que hemos traído para relevar a Rubén Albés.
Espero que Gómez se esté moviendo de la forma lo suficientemente inteligente para plantear todas las facilidades posibles para que Miguel pueda llegar al primer equipo y ser otro de los grandes traspasos por un canterano, y no simplemente un traspaso estilo Lolo por 600.000€. Con Miguel hay que firmar el contrato sub-23 que han tenido Jose, Toni, Anuar, Calero..., el de que con 10 partidos en el primer equipo se es miembro de pleno derecho de éste y se pasa definitivamente a la profesionalidad. Y por supuesto con la cláusula de 4 millones de euros.
Y vaya, si nos quedamos el 1 de septiembre con MAta y VIllalibre como únicos delanteros, la mejor opción es contar con Miguelín... y no con Suárez, que no deja de estar cedido.