Anuar si se puliese como libre sería Beckenbauer...
A Borja le veo más como el clásico jugador escoba que se mete entre los centrales y ayuda en la defensa que como un tío que se incorpore más al ataque como son los líberos alemanes, que en ese caso, pues sí, Anuar tendría más aptitudes que Borja.
También depende de cómo te plantee Luis César el partido. Si sólo ve tarjeta uno de ellos, puedes volver a probar con Luismi y Anuar, pero en paralelo y no con Anuar haciendo de libre, o incluso con Luismi asumiendo ese rol
Lo que me parece fuera de lugar es criticar a Toni por este partido. Evidentemente jugábamos con 2 situaciones: 1. Marcar pronto. 2. El miedo a perder después de tantos partidos sin hacerlo por no ser sólidos atrás.
Luego imperó el juego gris pero efectivo de dejar el balón al contrario pero no dejar jugar. Si no tienes el balón el balón a Toni apenas le llega, creo recordar un tímido disparo, pero jugando así ni Toni ni nadie va destacar ofensivamente, otra cosa es que defendió como pudo y aportó lo que pud, de los de arriba es el que más apoya al lateral y el que más intenta achuchar al contrario lo consiga o no por lo que evidentemente no destacó pero es que jugando así no se le pude pedir más. Ojo creo que, en este partido, esa respuesta fue muy positiva porque el Oviedo tiene muchísima pólvora y si vas ganando para nada te conviene una batalla abierta al gol porque lo mismo nos meten 3 en un momento. No fue que el Oviedo fuera malo sino que el Valladolid no le dejo jugar, no pudo apenas moverse ni contragolpear pero supo defenderse muy bien con un juego oscuro y gris pero efectivo. Luego Míchel le dió la puntilla. Yo no le tengo que objetar nada a Toni en este partido ya que defendió lo que pudo y apenas todo el equipo creo nada sino que destruyó.
3-1: El Pucela tira de practicidad El tempranero gol de Deivid permitió a los blanquivioleta arriesgar menos y llevarse un partido sin apenas sobresaltos
El Real Valladolid necesitaba reencontrarse con la victoria y lo hizo. No fue la victoria más brillante ni la más espectacular, pero supo a gloria después de cinco encuentros sin vencer. De paso, el Pucela rompió un par de malos farios, como el hecho de encajar en los primeros minutos y el de solo marcar a balón parado.
La clave del encuentro estuvo, sin ninguna duda, en el tempranero gol de Deivid a la salida de un saque de esquina botado por Óscar Plano. El tanto hizo que los locales mostrasen un guión apenas visto esta temporada: repliegue y contragolpe. Lo cierto es que el Real Oviedo apenas creó apuros, pero el Pucela tampoco fue capaz de robar y correr para hacer daño.
No había apenas ocasiones de gol pero sí se vislumbraba con claridad que los blanquivioleta mordían por cada pelota, en cada jugada. Solidaridad y trabajo para romper una mala racha que se esfumó, como la de Jaime Mata. El pichichi aprovechó un magnífico servicio lateral de Míchel para cabecear a la red el 2-0 y volver a saborear la sensación de ver puerta.
El Oviedo adelantó líneas y se encontró con sus mejores ocasiones del partido ya en el minuto 85. Primero, un disparo al palo. Después, el gol de Linares que ponía emoción en el marcador. Afortunadamente, sin necesidad de sufrir en el descuento, Míchel puso la guinda a una bonita jugada colectiva y colocó el definitivo 3-1 en el marcador. El Cádiz será el próximo rival del Pucela el próximo sábado a partir de las 16,00 horas, en el Estadio Ramón de Carranza.
"Tenemos que ser camaleónicos" Luis César reconoció que el gol tempranero de Deivid modificó la forma de jugar del Pucela
Luis César compareció serio en la sala de prensa. Satisfecho con el resultado, pero quizá con los restos de angustia que el gol de Linares, cuando puso el 2-1 en el tramo final, llevó a la grada y al banquillo. “Ha sido un partido distinto a los que hemos jugado hasta ahora. Hemos marcado y teníamos la ocasión de robar y contragolpear, y no lo hemos conseguido, pero al menos hemos tenido el control del partido; no el control del balón, porque lo despreciamos, pero sí el control del partido. La realidad es que no nos han hecho daño hasta el minuto 85, pero tampoco hemos contragolpeado como yo quería. Llevábamos cinco partidos sin ganar y tenía miedo de que cualquier detalle nos privara de la victoria”, comentó el técnico blanquivioleta.
“Hoy hemos dado una versión diferente a lo que hemos venido dando hasta ahora. El 1-0 en el minuto 4 me hace replantearme el planteamiento del partido. Con 0-0 no estamos esperando a que se equivoquen. Estábamos esperando el error para robar y correr. Hemos robado poco y cuando lo hemos conseguido no hemos logrado contragolpear. No hemos estado muy finos con el balón y tampoco a nivel individual hemos tenido buenas versiones. Había que ganar para que los problemas no aumenten y lo hemos conseguido ante un buen rival, que venía de ganar dos partidos y que cree, que siempre creyó en la remontada”, valoró.
Por último, el entrenador vallisoletano consideró que "tenemos que ser camaleónicos y adaptarnos un poco a los rivales con nuestras herramientas. Seguro que veremos las dos versiones a partir de ahora. Estoy muy contento con la victoria. Tenemos que ser un equipo que tenga armas y siga creciendo. Tenemos que ser versátiles y ser un equipo completo, con muchas herramientas para vencer.
Anquela, enfadado Juan Antonio Anquela no ocultó su enfado con el resultado y con el juego de su equipo en el Estadio José Zorrilla. “Nos vamos con la sensación de que con muy poco nos han hecho mucho daño. Hemos peleado hasta el último segundo, pero ellos, sin apenas tirar a puerta, nos han marcado tres goles. El rival ha metido el primer gol muy pronto, se ha venido atrás para jugar a la contra y nosotros hasta el final no hemos estado clarividentes en los últimos metros. Hemos creado al final alguna ocasión bastante clara, pero no estamos finos en ninguna de las dos áreas”, subrayó.
“No me ha gustado la actitud que muchas veces veo. Parece que nos tienen que dar un golpe fuerte para espabilar y esto es la Segunda y no te recuperas. Teníamos claro qué es lo que teníamos que hacer: presionar al rival arriba y ganar los duelos individuales. Pero hemos tenido que ir a remolque”, argumentó el técnico carbayón.
El Pucela cambia el paso El triunfo ante el Real Oviedo permite a los blanquivioleta truncar varias malas rachas
La necesaria e importantísima victoria ante el Real Oviedo significó más que tres puntos para el Pucela, que fue capaz de romper varias malas rachas en las que se había instalado. Para empezar, y la más importante, el triunfo llegó después de cinco partidos sin conseguirlo. Cuatro empates y una derrota que habían frenado la trayectoria blanquivioleta desde el pasado 12 de octubre, fecha en la que se saboreó por última vez una victoria.
Otra racha negativa truncada fue la relacionada con los goles encajados. En los últimos choques se había hecho habitual recibir un tanto en los primeros compases del encuentro, antes del minuto 10. Frente al Oviedo se cambiaron las tornas y fue el Real Valladolid el que encarriló el duelo en el minuto 4 por mediación de Deivid.
El central grancanario vio puerta por primera vez después de 166 partidos como profesional. La mala racha de Deivid duraba desde la temporada 2011/12, cuando debutó en Primera en las filas del Sevilla. La tranquilidad y puntería de Míchel en el tercer y definitivo gol ante los carbayones también cambió la dinámica por lo que respecta a los tantos anotados. Hasta entonces, los ocho anteriores se habían producido gracias al balón parado, una herramienta fundamental en el fútbol y de la que ha sabido aprovecharse el Real Valladolid hasta el momento en la presente campaña.
Re: Real Valladolid - Real Oviedo. Sábado 18 de Noviembre. 18:00Dom 19 Nov 2017, 21:23