Antes de que acabe la jornada la cosa ya toma carices dramáticos:
Todos han jugado menos que nosotros y todos tienen más puntos que nosotros (menos el Huesca, lo cual no es suficiente para salvarse, pobre Sergio).
Esto es lo que cabe esperar comparándonos con la permanencia teórica:
Aspiramos a unos 39 puntos y la permanencia estaría en 42. Si perdemos los tres partidos que vienen, que es perfectamente factible y seguro que ya están pensadas las excusas para todos, bajaríamos nuestras espectativas a unos 35 puntos, ¿y si cae un empatito contra Osasuba? pues 36, mientras la permanencia seguiría en torno a los 39-42.
Pero claro, estamos en el ajo hasta el gaznate y esa permanencia teórica la marca el tercero por la cola, por lo cual, superarlos nos valdría para ser nosotros los terceros por la cola, con lo que daríamos con nuestros huesos en segunda. Entonces nos interesa más bien marcarnos al cuarto por la cola como objetivo, que en este caso es el Osasuna con dos partidos menos.
Así que para superarlos y salvarnos tendríamos que hacer unos 43 puntos.
43 puntos-10 puntos que llevamos=33. 33/(38-15)=1,43 puntos por partido, lo cual ya no entra dentro de nuestras capacidades, si lo llevas a una temporada entera son ¡55 puntos! y sin margen de error. Sin embargo, quedan muchos partidos y pueden pasar muchas cosas.
Probablemente Sergio se vuelve a jugar el puesto el 29 de diciembre en la jornada 16 contra el Cádiz. Si ganamos, seguiremos agonizando. Si perdemos, podemos certificar el descenso salvo cambio radical. Esto contando con no rascar más de 1 ó 2 puntos contra Osasuna, Sevilla y Barça.
¿Lo que espera Sergio? Que otros bajen el pistón, que la permanencia caiga como los años anteriores por debajo de 40 y volver a salvarse haciendo lo que viene haciendo.
¿Va a caer la permanencia? Estando Osasuna, Betis y Valencia ahí metidos y con Cádiz y Elche muy lejos, creo que está claro que la permanencia de este año va a estar cara.
¿Qué nos contarán a final de temporada? Que este año la permanencia estuvo muy cara y Sergio no pudo hacer nada.