El partido de ayer es simplemente el típico partido que estamos viendo fuera de casa de continuo, sólo que en casa. De tanto no ser competitivos fuera pues ya se liaron.
El partido fue directamente indigno. Indigno por consecución propia, igual de indigno que hubiera sido ese mismo partido si el rival no hubiera sido el Athletic sino otro de todavía más nivel. De esto que te da hasta algo de vergüenza ajena.
En fin, yo ya he asumido todo lo que hay que asumir respecto al futuro próximo