MUEVE MILES DE MILLONES ENTRE SOMBRAS
La OCDE denuncia que el fútbol es el deporte 'perfecto' para blanquear dinero
* Casos de tráfico de humanos, corrupción, drogas, dopaje y delitos fiscales
* Considera que ha pasado de ser 'un deporte popular' a 'una industria global'
* 'El criminal compra una entrada para entrar en la alta sociedad'
* Las cinco grandes ligas movían 2.500 millones de euros en 1996
* En la temporada 2008-2008 generaron 7.900 millones de euros
Javier González
Madrid.- La relación entre crimen organizado y fútbol "es más profunda y compleja de lo que se pensaba". El Grupo de Acción Financiera de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha investigado el blanqueo de dinero en este deporte, y ha llegado a la conclusión de que los delitos son peores de lo que cabría imaginarse: "tráfico de seres humanos, corrupción, drogas, dopaje y delitos fiscales de todo tipo.
"El fútbol es el mayor deporte del mundo", recoge el informe. De 265 millones de jugadores, unos 38 millones eran profesionales y cinco millones eran árbitros en 2006, según fuentes de la FIFA. Alemania (seis millones) Estados Unidos (cuatro) y Brasil (dos) eran los países con más jugadores inscritos en torneos oficiales. España, una de las grandes ligas del mundo, tenía más de 400.000.
En este marco, la OCDE denuncia cómo el fútbol ha pasado de ser "un deporte popular" a convertirse en "una industria global" desde inicios de los noventa por la inversión en derechos televisivos y publicidad corporativa. Una conversión en puro negocio que se complica aún más con la entrada de las casas de apuestas "más allá del control de las autoridades".
Aunque no hay cifras oficiales sobre el dinero que mueve el fútbol, un informe de Deloitte estima que sólo en Europa generó unos 13.800 millones de euros en 2007. De esta cantidad, 7.200 millones pertenecían a las primeras divisiones de las cinco grandes ligas (España, Italia, Alemania, Inglaterra y Francia).
La OCDE denuncia varias vulnerabilidades dentro del fútbol: es fácil entrar en este negocio; participan en él numerosos intermediarios, desde las televisiones a los agentes de los futbolistas, que gestionan sus relaciones de forma opaca y compleja; los dirigentes "carecen de la profesionalidad de otras empresas"; y la diversidad de estructuras legales que envuelve a este mundillo, desde sociedades anónimas a fundaciones sin ánimo de lucro.
Ejemplo de ello son las comisiones. Según publicó el diario 'Marca', el ex presidente del Real Madrid Ramón Calderón y su directiva invirtieron cerca de 320 millones de euros sin incluir unos 24 millones en comisiones por fichajes como el de Lassana Diarra.
Por su parte, los agentes FIFA operan con otros agentes sin licencia "formando una comunidad cerrada que hace difícil seguir las transacciones operadas por ellos". No obstante, a ello se suma también el aumento de las empresas que poseen una parte de los derechos sobre el futbolista sin tener relación directa con el fútbol, muchas de ellas "con ramificaciones en paraísos fiscales", lo que hacen más difícil desenmarañar la red de pagos.
'El club soy yo'
Un palco de fútbol es una golosina para hacer negocios. "El criminal compra una entrada para entrar en la alta sociedad. El fútbol tiene una larga historia de inversiones de ricos o empresas que tuvieron éxito en otros negocios. También hay casos de personas de dudosa reputación que invirtieron en el fútbol y ganaron aceptación social", explica el informe.
A la falta de profesionalidad y regulación se suman miles de millones de euros en constante movimiento entre países y paraísos fiscales, con fichajes pagados con cifras astronómicas basadas en expectativas a corto plazo imposibles de predecir. "Perder un partido tiene consecuencias financieras masivas", agrega.
En cualquier caso, para el empresario metido a presidente no supone un problema. Muchas inversiones en fútbol no buscan más beneficios que la rentabilidad de ganar estatus social, dice la OCDE al citar una veintena de formas de lavar dinero.
Una es comprar un club de Tercera e invertir en infraestructuras y jugadores dinero del tráfico de drogas. Al subir el valor del club y la publicidad, el margen vale para blanquear dinero. Otra es directamente utilizar el club como plataforma para ampliar contactos en las altas esferas, algo perfectamente visible en muchos palcos de Primera.
Otro ejemplo que cita el informe tiene lugar en "la experimentada" Italia, donde se abrieron procesos judiciales en 2006 por la utilización de clubes que salían a Bolsa para lavar dinero y enriquecerse con falsas ofertas de compra (subiendo así las acciones) que luego no se produjeron (con su consecuente desplome).
Futbolistas, 'una mercancía'
El informe de la OCDE también recoge cómo los futbolistas son "personas socialmente vulnerables". "Si son mal aconsejados, pueden ser fácilmente protagonistas de negocios oscuros", denuncia.
El último escándalo ha sido el protagonizado por José Luis Pérez Caminero, estrella en los noventa de Atlético de Madrid, Valladolid y selección, imputado por su presunta implicación en una red de blanqueo de dinero obtenido del tráfico de drogas.
Por otro lado, el problema del tráfico de jóvenes jugadores comenzó a ser preocupante en algunos países europeos a inicios de los noventa, según el informe. "Las condiciones al reclutar a los jugadores no son nada claras", denuncia la OCDE al destacar en especial los fichajes de promesas de América Latina y África.
Ejemplo de ello fue la investigación de la fiscalía Anticorrupción sobre cuatro fichajes del Atlético de Madrid, Maxi, Bernardo Matías, Limamou Mbengue y Muyiwa Lawal, por los que el entonces presidente Jesús Gil pagó 3.100 millones de pesetas. Una "barbaridad", reconoció Matías.
"La liberalización de los mercados televisivos y la expansión de los canales de pago han contribuido a incrementar el patrimonio de los clubes, los salarios de los jugadores y, en consecuencia, la internacionalización del mercado de jugadores", recoge el informe de la OCDE.
"Los factores fiscales también han tenido su parte", agrega la OCDE. "En los últimos años, para un club importante de Reino Unido o España es más barato fichar a un jugador extranjero porque tienen un tratamiento fiscal diferente que el de los residentes temporales", apunta.
España es de las ligas europeas el país con menores costes fiscales para los futbolistas extranjeros, según el último estudio elaborado por Ernst & Young Abogados. Gracias a la 'Ley Beckham', un jugador de otro país, aunque sea comunitario, paga un 24% en impuestos frente al 43% de los futbolistas nacionales.
http://www.elmundo.es/mundodinero/2009/07/01/economia/1246466141.html