Tres jugadoras de la selección española
Por el mejor juego en el exilio
Se han ido a Inglaterra a jugar con uno de los mejores equipos de la Premier
ANA PARRADO. MADRID 30/09/11
Esta es la historia de María Ribera, Berta García y Eli Martínez. Es el cuento famoso de esas deportistas que hacen lo que sea por mejorar su carrera, incluso irse de su país, con poco equipaje y una certeza: su pasión por el rugby.
Se han ido a Inglaterra a jugar con uno de los mejores equipos de la Premiership, el Richmond. No saben como van a sobrevivir aunque ahorraron para poder hacerlo. El año pasado María trabajó limpiando en un hotel, es licenciada en Ciencias del Deporte, pero el idioma es un impedimento. Y el resto se apuntaron a esta aventura hace unas semanas.
Surge una pregunta ¿cuál es el problema del rugby en España? y una misma respuesta "hay muy pocas jugadoras". "Uno de los principales problemas es que no se trabaja la base", explicó María. "Las jugadoras empiezan muy tarde. Además, del abandono por parte de los clubes de sacar adelante la sección femenina", aseguró. Y no está falta de razón, ya que un ejemplo de esto se ha dado esta temporada en Madrid. Las chicas de Alcobendas no llegaron a tiempo para apuntarse a la competición autonómica por falta de facilidades del club. Por su parte, Berta da una solución "sería genial que tanto las niñas como los niños empezasen a conocer el rugby en el colegio".
La mayoría de las chicas que acaban jugando al rugby descubrieron el deporte en la Universidad. "Es muy triste que no tengan ningún contacto antes de los 18 años, así es imposible que se puedan crear jugadoras completas" reflexionó Eli. Ella también comenzó después del instituto y lo achaca a la falta de difusión de este deporte.
En cuanto a su nuevo equipo, se sienten muy a gusto. Dicen que las compañeras se esfuerzan para que entiendan lo que se está pidiendo en cada entrenamiento. "Las chicas son amateur como en España, tienen su trabajo, pero tienen la satisfacción de disfrutar de rugby de nivel tanto en el club como en las numerosas concentraciones y partidos tanto de seven como de quince y no solo absolutas sino con sub 21, sub 20 , sub 18... Y como se paga por convocatoria también recaudan más a final de año", avanzó María.
Otra cosa que les llamó la atención en Richmond fue la cantidad de campos de césped natural que existen y los medios que tienen. El material es más abundante y tienen entrenadores tácticos y físicos. "En Inglaterra los clubes tienen más soporte por parte de la federación y también hay mayor número de personas" por lo que las instalaciones son mejores, puntualizó Eli.
La distinción entre la selección masculina y femenina dicen que "existe". Aunque Berta apuntaló esperanzada que "ahora parece que van a tenernos más en cuenta, sobre todo en el seven que van a hacer alguna Serie Mundial de Chicas de cara a la promoción e inclusión del rugby seven en el programa olimpico para 2016".
En el Mundial apuestan por Nueva Zelanda como favorito aunque "si los resultados siguen así se cruzarían en semifinales contra el que ganador Sudáfrica vs. Australia. Así que los europeos irán por un lado y los del hemisferio sur por otro. Sera muy interesante" contó María. Y cómo equipo femenino quisieron nombrar al su club de adopción, el Richmond, sin olvidar los orígenes de cada una la universidad y su club en España.
Berta García: juega de Ala, empezó en el CRAT-Universidade da Coruña y entrenó a las chicas del Gijón rugby Club.
Eli Martínez: juega de ala o de centro, jugó en el GEIEG, y si vuelve a España volvería a este equipo.
María Ribera: juega de pilier o de segunda línea, integrante del INEF Barcelona "es el equipo donde debo estar y donde estoy", enfatizó.
http://www.marca.com/2011/09/30/mas_deportes/rugby/1317390336.html
Por el mejor juego en el exilio
Se han ido a Inglaterra a jugar con uno de los mejores equipos de la Premier
ANA PARRADO. MADRID 30/09/11
Esta es la historia de María Ribera, Berta García y Eli Martínez. Es el cuento famoso de esas deportistas que hacen lo que sea por mejorar su carrera, incluso irse de su país, con poco equipaje y una certeza: su pasión por el rugby.
Se han ido a Inglaterra a jugar con uno de los mejores equipos de la Premiership, el Richmond. No saben como van a sobrevivir aunque ahorraron para poder hacerlo. El año pasado María trabajó limpiando en un hotel, es licenciada en Ciencias del Deporte, pero el idioma es un impedimento. Y el resto se apuntaron a esta aventura hace unas semanas.
Surge una pregunta ¿cuál es el problema del rugby en España? y una misma respuesta "hay muy pocas jugadoras". "Uno de los principales problemas es que no se trabaja la base", explicó María. "Las jugadoras empiezan muy tarde. Además, del abandono por parte de los clubes de sacar adelante la sección femenina", aseguró. Y no está falta de razón, ya que un ejemplo de esto se ha dado esta temporada en Madrid. Las chicas de Alcobendas no llegaron a tiempo para apuntarse a la competición autonómica por falta de facilidades del club. Por su parte, Berta da una solución "sería genial que tanto las niñas como los niños empezasen a conocer el rugby en el colegio".
La mayoría de las chicas que acaban jugando al rugby descubrieron el deporte en la Universidad. "Es muy triste que no tengan ningún contacto antes de los 18 años, así es imposible que se puedan crear jugadoras completas" reflexionó Eli. Ella también comenzó después del instituto y lo achaca a la falta de difusión de este deporte.
En cuanto a su nuevo equipo, se sienten muy a gusto. Dicen que las compañeras se esfuerzan para que entiendan lo que se está pidiendo en cada entrenamiento. "Las chicas son amateur como en España, tienen su trabajo, pero tienen la satisfacción de disfrutar de rugby de nivel tanto en el club como en las numerosas concentraciones y partidos tanto de seven como de quince y no solo absolutas sino con sub 21, sub 20 , sub 18... Y como se paga por convocatoria también recaudan más a final de año", avanzó María.
Otra cosa que les llamó la atención en Richmond fue la cantidad de campos de césped natural que existen y los medios que tienen. El material es más abundante y tienen entrenadores tácticos y físicos. "En Inglaterra los clubes tienen más soporte por parte de la federación y también hay mayor número de personas" por lo que las instalaciones son mejores, puntualizó Eli.
La distinción entre la selección masculina y femenina dicen que "existe". Aunque Berta apuntaló esperanzada que "ahora parece que van a tenernos más en cuenta, sobre todo en el seven que van a hacer alguna Serie Mundial de Chicas de cara a la promoción e inclusión del rugby seven en el programa olimpico para 2016".
En el Mundial apuestan por Nueva Zelanda como favorito aunque "si los resultados siguen así se cruzarían en semifinales contra el que ganador Sudáfrica vs. Australia. Así que los europeos irán por un lado y los del hemisferio sur por otro. Sera muy interesante" contó María. Y cómo equipo femenino quisieron nombrar al su club de adopción, el Richmond, sin olvidar los orígenes de cada una la universidad y su club en España.
Berta García: juega de Ala, empezó en el CRAT-Universidade da Coruña y entrenó a las chicas del Gijón rugby Club.
Eli Martínez: juega de ala o de centro, jugó en el GEIEG, y si vuelve a España volvería a este equipo.
María Ribera: juega de pilier o de segunda línea, integrante del INEF Barcelona "es el equipo donde debo estar y donde estoy", enfatizó.
http://www.marca.com/2011/09/30/mas_deportes/rugby/1317390336.html