«Jugar con el primer equipo es lo máximo, aunque sean 15 minutos»
Avalado por sus 27 partidos con el Promesas y diez goles, el domingo salió del banquillo por segunda vez esta temporada
Se cumplían los 90 minutos de juego cuando Jose (José Manuel Arnaiz, Talavera de la Reina, 1995) envió un balón desde la banda derecha a Mojica, que fue derribado en el área por el exblanquivioleta Carlos Lázaro, provocando el penalti que dio el gol de la honra a un Pucela irreconociblemente infausto sobre el césped de Anduva.
El extremo toledano del Promesas tuvo su decisiva participación en el enjuague de última hora en Miranda, en la que ha sido su segunda aparición con la elástica blanquivioleta en el primer equipo. Aunque fue la quinta vez que viajaba convocado con el Real Valladolid, avalado por sus 27 partidos con el filial, en Segunda B, y sus 10 goles en el campeonato, dos de los cuales los marcó el pasado jueves sobre el césped de los Anexos ante la Arandina, decisivos (3-1) para sumar los tres puntos que alimentan la posibilidad de mantener la categoría.
Su segunda temporada como blaquivioleta ha dado un giro de 180 grados a su proyección, ya que el año pasado apenas sumo 320 minutos en los ocho partidos en los que participó con el filial, con un saldo de dos goles.
Sabe Jose, («sí, sin tilde») a punto de cumplir 21 años, lo que es entrenar toda la semana para descubrir que no está en la convocatoria o pasar los noventa minutos en el banquillo. Por eso, y porque ha demostrado que tiene futuro en sus botas, aprecia de forma especial las llamadas de Portugal al primer equipo.
«Aunque sean 6 minutos como en Leganés, o 15, como en Anduva, es una alegría, es lo máximo. Poder ayudar al primer equipo me ilusiona».
Dice la etiqueta de la web del Real Valladolid que Jose es extremo derecho. Ayer salió en sustitución de Villar, pero jugó por ambas bandas. «Manejo Las dos piernas. Me da igual una banda que otra», afirma José, aún paladeando su participación con el primer equipo.
«Admito que me ha quedado una mala sensación por el resultado del encuentro. Ha sido un golpe duro, pero también hay una parte satisfactoria: los minutillos que he disputado con el primer equipo».
Jose admite que en el vestuario del Real Valladolid había desolación por lo ocurrido en Miranda. Pero asegura que había voluntad de enmendar el mal partido.
«Estaban fastidiados, yo también. Pero puedo había esperanza y ganas de superar esta situación».
Le queda una temporada más con el Pucela. Y dice que le gustaría defender su colores en Primera.
http://realvalladolid.elnortedecastilla.es/noticias/201603/29/jugar-primer-equipo-maximo-20160328205710.html