Qué mala suerte tenemos, coño. Todo mala suerte. Lo hacemos todo de puta madre, pero qué mala suerte.
Joder, yo soy presidente de un club y sale mi entrenador diciendo esto tras tirar el ascenso a la basura contra un filial descendido, y es que no vuelve ni al vestuario a despedirse de la plantilla.
Acaban de decir en la Cope que el anterior doble gol en propia puerta en Segunda, mirad si han pasado equipos por Segunda en estos años, fue de otro jugador del Valladolid contra la Cultural. O sea, en x años (no me he quedado con cuántos) nadie se ha metido dos goles en propia puerta, nadie. Nosotros, dos veces. ¿Y sabéis por qué pasan estas cosas, que a priori podrían parecer simple mala suerte? Porque pasan los años, pasan los jugadores, pasan los entrenadores, pasan los secretarios técnicos, pasan los presidentes incluso, y nadie, absolutamente nadie, mueve un puto dedo para cambiar la idiosincrasia de este club. Nadie. Según el entrenador se puede jugar a una cosa o a otra, se puede correr más o menos, pero nadie sienta unas bases sólidas que te hagan fuerte incluso cuando estás mal, fuerte por encima de momentos de juego, de la categoría en que estés, de lo que estés peleando deportivamente. Nadie. Aquí somos todos muy amigos, una gran familia, todo buen rollito, y todo desidia y falta de exigencia. ¿Cuándo fue la última vez que se sancióno a un jugador por bajo rendimiento o por saltarse a la torera las normas del Club? Porque esas cosas son las que hacen que los jugadores sepan que aquí no se bromea, que se tienen unos objetivos y que hay que hacer todo lo posible para cumplirlos. Al señor Roque Mesa, por ejemplo, habría que haberle dado un toque serio cuando se borró para el Heliodoro. Nada. Al señor Plata se le debió haber dado un toque serio tras el affaire nocturno. Nada. Y, bueno, así, podemos retrotraernos hasta el infinito. Y así es imposible pintar nada. Podrás ascender, podrás tener alguna temporada buena, pero así no vas a ser un Club respetado en la puta vida. ¿Cómo podrías, si no te respetan ni tus jugadores?
En fin, disfrutad de esta pelea -peleílla- aun perdida, por ascender, porque en pocos años nuestos hilos hablarán de no bajar a 1ª RFEF y recordaremos con nostalgia los tiempos es que teníamos posibilidades de ascender. Porque, en este bendito Club, si algo se puede hacer peor, se hará peor.