El tema es muy sencillo.
En España existen sólo selecciones autonómicas cuyos partidos los organizan entidades regionales deportivas como la federación vasca. Por lo tanto no existe ni cabe posibilidad de que dichos partidos los pueda jugar un combinado cuya nomenclatura administrativa no existe. Navarra es otra comunidad autónoma, que tiene su federación y su propio combinado. Y lo de las provincias francesas, mejor no hablar, salta a la vista.
Como decía muy acertadamente el alcalde de Bilbao, que les pague la federación de Euskal Herria, veremos cuando cobran.
Eso desde el punto de vista jurídico, pero desde el punto de vista ético, aún peor. Es como si la selección de Castilla y león llama a jugadores de Cantabria, la Rioja, Madrid o incluso Álava, y todo ello con mayor legitimidad que los vascos. Eso no lo hacemos porque sabemos estar en nuestro sitio.
Claro que si lo que pretenden es sólo utilizar el deporte como arma arrojadiza política, en sus aspiraciones fascistas, pues que se llamen Imperio Euskaldun y perfecto.
la raíz de todo es que las selecciones autonómicas no deberían existir, al menos con profesionales y mucho menos jugar partidos con estados independientes, eso no pasa en ningún lugar del mundo, sólo en catetoespaña, y como buenos pueblerinos estos nacionalistas vascos les das la mano y se cogen el brazo.
Lo de los jugadores que firman pues ya se sabe, gente que vive de esto, y que firma lo que haga falta con tal de caer bien al mundo batasuno y que no les amenacen y no tengan que pagar más de la cuenta. Pobres hombres al fin y al cabo.
En España existen sólo selecciones autonómicas cuyos partidos los organizan entidades regionales deportivas como la federación vasca. Por lo tanto no existe ni cabe posibilidad de que dichos partidos los pueda jugar un combinado cuya nomenclatura administrativa no existe. Navarra es otra comunidad autónoma, que tiene su federación y su propio combinado. Y lo de las provincias francesas, mejor no hablar, salta a la vista.
Como decía muy acertadamente el alcalde de Bilbao, que les pague la federación de Euskal Herria, veremos cuando cobran.
Eso desde el punto de vista jurídico, pero desde el punto de vista ético, aún peor. Es como si la selección de Castilla y león llama a jugadores de Cantabria, la Rioja, Madrid o incluso Álava, y todo ello con mayor legitimidad que los vascos. Eso no lo hacemos porque sabemos estar en nuestro sitio.
Claro que si lo que pretenden es sólo utilizar el deporte como arma arrojadiza política, en sus aspiraciones fascistas, pues que se llamen Imperio Euskaldun y perfecto.
la raíz de todo es que las selecciones autonómicas no deberían existir, al menos con profesionales y mucho menos jugar partidos con estados independientes, eso no pasa en ningún lugar del mundo, sólo en catetoespaña, y como buenos pueblerinos estos nacionalistas vascos les das la mano y se cogen el brazo.
Lo de los jugadores que firman pues ya se sabe, gente que vive de esto, y que firma lo que haga falta con tal de caer bien al mundo batasuno y que no les amenacen y no tengan que pagar más de la cuenta. Pobres hombres al fin y al cabo.