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OPEN DE AUSTRALIA

Federer, Djokovic y Berdych eliminan a Robredo, Almagro y Verdasco

Robredo fue el único español capaz de hacer un set en la jornada. Almagro y Verdasco cayeron en tres mangas. Nadal y Ferrer, los únicos tenistas de la Armada que siguen en competición.

Roger Federer, Novak Djokovic y Tomas Berdych eliminaron a tres de los integrantes de la 'Armada española' al eliminar en octavos de final del Open de Australia, primer Grand Slam de la temporada, a Tommy Robredo, Nicolás Almagro y Fernando Verdasco.

La Armada, que había batido el récord de representantes en la cuarta ronda del primer Grand Slam de la temporada con cinco, queda ahora en manos de Rafael Nadal y David Ferrer, que jugarán el lunes sus respectivos compromisos.

El suizo Roger Federer, vigente campeón, se impuso a Tommy Robredo por 6-3, 3-6, 6-3 y 6-2. Robredo mantuvo el tipo ante el número dos del mundo, que había ganado al español en nueve de las diez ocasiones en las que se habían topado antes de la cita en Melbourne.

El jugador español, ahora situado en el puesto 52 del mundo, tuteó al helvético mientras mantuvo la precisión necesaria para hacer frente al intercambio propuesto por el suizo. De hecho, Robredo se anotó la segunda manga, que obligó a Roger Federer a un esfuerzo mayor para sacar adelante el compromiso.

El campeón tiró de recursos para evitar la amenaza del tenista de Hostalric, que ya fue incapaz de mantener el tono físico y el tino en los tiros y poco a poco se desmoronó hasta ceder el triunfo. Tardó dos horas y media en claudicar Tommy Robredo. Federer, que sumó su victoria 58 en el Open de Australia, la máxima hasta ahora en la Era Open, se enfrentará en cuartos de final al ganador del choque entre su compatriota Stanislas Wawrinka y el el estadounidense Andy Roddick.

Berdych no dio opción a Verdasco
Fernando Verdasco, incapaz de salir a flote ante el mejor juego de su adversario, el checo Tomas Berdych, sexto favorito, se despidió del Open de Australia, el torneo del Grand Slam que más proyección ha generado al jugador español, arrollado por su adversario 6-4, 6-2 y 6-3.

El tenista madrileño, de 27 años y noveno del mundo, ofreció una de esas versiones en las que, invadido por la inestabilidad sobre la pista, divide el gasto de energía entre la lucha consigo mismo y con el rival.

Tomas Berdych, con el que había jugado en diez ocasiones, no aguardaba una batalla tan clara. Sobre todo al inicio, cuando el madrileño quebró, por primera y única vez el saque del centroeuropeo. Es el checo un tenista que ha madurado. Que a sus virtudes, evidentes, añade ahora la ambición por atravesar las expectativas. Se vio en el pasado Wimbledon, donde Berdych llegó a la final, que perdió contra el español Rafael Nadal. Pero empieza a ser un hombre a tener en cuenta en todas las grandes citas.

Desde que el checo enmendó la pérdida de su saque todo fue coser y cantar para él. Fue a más. Y rentabilizó la desorientación del madrileño, incómodo, impreciso, que reclamó en varias ocasiones la asistencia del médico de pista para ser atendido en el tobillo.

Djokovic destroza a Almagro
El serbio Novak Djokovic, tercer favorito y campeón en el 2008, borró de un plumazo las expectativas del español Nicolás Almagro, que salió malparado de la cita de octavos, que atravesó el balcánico tras imponerse por 6-3, 6-4 y 6-0.

Djokovic fue contundente. Tardó una hora y 44 minutos en tumbar al español, que nunca pudo cuestionar el servicio de su adversario y que siempre fue a contracorriente en el marcador.

La cuarta ronda del primer Grand Slam de la temporada es una barrera infranqueable para Almagro, que nunca ha podido superar. En esta ocasión, a pesar del buen nivel que evidenció en los choques anteriores, contra el francés Stephane Robert (6-4, 6-3, 6-7 y 7-5), el ruso Igor Andreev (7-5, 2-6, 4-6, 7-6 y 7-5) y el croata Ivan Ljubicic (6-4, 7-6 y 6-3), cayó ante un reputado rival, años atrás campeón en el Melbourne Park.

Verdasco tiene roto un hueso del tobillo y podría pasar por el quirófano

"Tengo que hablar con el doctor Ángel Cotorro para ver qué decisión debo tomar sobre el tobillo. Si seguir jugando o parar para quitarme el hueso que tengo roto", aseguró.

Fernando Verdasco podría pasar por el quirófano para solventar una rotura en un hueso del tobillo izquierdo, que detectó hace tres semanas en un encuentro con el francés Gael Monfils, en el Kooyong Classic de Melbourne.

El dolor reapareció en el pie del jugador madrileño en el encuentro contra el checo Tomas Berdych, de la cuarta ronda del primer Grand Slam de la temporada, que afrontó infiltrado en varias ocasiones.


Tras el partido contra Monfils en Kooyong, el jugador fue sometido a diversas pruebas, entre ellas una resonancia, que detectó la rotura de un hueso del tobillo. Verdasco maneja varias opciones. La del quirófano "es la última", aunque también es valorada.

"Tengo que hablar con el doctor Ángel Cotorro para ver qué decisión debo tomar sobre el tobillo. Para ver qué puedo hacer. Si seguir jugando o parar para quitarme el hueso que tengo roto. Aunque esta es la última opción porque me perdería varios torneos", explicó el jugador tras su derrota ante Berdych.

"Operarme es la última posibilidad. Manejamos otras para así poder seguir con la temporada y acudir a los torneos de San José, Memphis, Acapulco y la Copa Davis", proyectos inmediatos del jugador madrileño.

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La 'Armada' se queda sin representantes en el dobles

Después de su encontronazo con Feliciano López y Juan Mónaco en segunda ronda, el indio Mahesh Bhupathi continúa con su provocación en Twitter: @Maheshbhupathi Vaaammmmmmooossssss

La 'Armada' española se quedó sin representación en el cuadro de dobles del Open de Australia después de que las duplas formadas por Tommy Robredo y Marcel Granollers y David Marrero y Rubén Ramírez-Hidalgo fueran eliminados en tercera ronda.

Los indios Mahesh Bhupathi y Leander Paes, terceros cabezas de serie, fueron los verdugos de la dupla española formada por Tommy Robredo y Marcel Granollers, a quienes doblegaron por un marcador global de 6-4, 4-6 y 6-4 tras una hora y cincuenta y dos minutos de juego en un partido celebrado en la Pista 2 de Melbourne Park.

Anteriormente, la dupla formada por David Marrero y Rubén Ramírez-Hidalgo cayó ante la pareja formada por el estadounidense Eric Butorac y Jean-Julien Rojer, de las Antillas Neerlandesas, por un tanteo de 6-3 y 6-4 tras una hora y cuarto de juego en un choque disputado en la Pista 3 de Melbourne Park.

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Vera Zvonareva cumple los pronósticos y asegura su presencia en cuartos de final

Vera Zvonareva, Petra Kvitova y Agnieszka Radwanska se clasificaron para los cuartos de final del Open de Australia después de imponerse a Iveta Benesova, Flavia Pennetta y Shuai Peng respectivamente.

La rusa Vera Zvonareva firmó su mejor resultado en Melbourne Park en 2009, cuando cayó en las semifinales ante su compatriota Dina Safina. Desde entonces, la moscovita ha ido creciendo como tenista hasta ocupar el segundo puesto del escalafón mundial, si bien quizá le falte un gran triunfo para reivindicarse como reina del circuito. De momento, Vera se ha clasificado para los cuartos de final en Australia merced a su victoria sobre la checa Iveta Benesova, gran sorpresa de este torneo en la vertiente femenina, a quien doblegó por un marcador global de 6-4 y 6-1 tras una hora y cuarto de juego en un choque disputado en la Hisense Arena.

Tras superar unos primeros momentos de duda en los compases iniciales del partido en el que cedió su servicio, Benesova se hizo con la batuta del mismo, pasando de un 0-2 a un 4-2 a favor que sin embargo no supo reaccionar. Zvonareva, tan irregular como seria, se metió en pista y abrió ángulos imposibles con su derecha para terminar remontando el primer parcial y encarrilando un segundo en el que la checa acabó físicamente tocada y tirando la toalla.


La rival de Zvonareva en cuartos de final será la checa Petra Kvitova, revelación del 2010 para la WTA, que se impuso a la italiana Flavia Pennetta por un tanteo de 3-6, 6-3 y 6-3 tras una hora y cincuenta y cinco minutos de juego. Se trata del mejor resultado en Australia de Kvitova, que sólo había ganado un partido en sus tres participaciones anteriores. Zvonareva y Kvitova se han enfrentado en dos ocasiones hasta la fecha, repartiéndose una victoria cada tenista. En Indian Wells 2009 la victoria fue para la rusa (6-3, 6-1), mientras que en Roma 2010 el triunfo fue para la checa (6-4, 6-0).

También estará presente en cuartos de final la polaca Agnieszka Radwanska, duodécima cabeza de serie del cuadro, que se deshizo de la china Shuai Peng, por un marcador de 7-5, 3-6 y 7-5 tras dos horas y cuarenta y cuatro minutos de juego en un encuentro celebrado en la Margaret Court Arena. Radwanska, que tuvo que salvar dos bolas de partido en contra en el tercer acto (5-4 y 40-15 abajo), podría medirse en la siguiente fase a la belga Kim Clijsters, tercera favorita, si ésta vence a la rusa Ekaterina Makarova en el choque que cierra la jornada en Melbourne Park.

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Aleksandr Dolgopolov da la campanada al eliminar a Robin Soderling en octavos de final

El revés cortado de Dolgopolov hizo mucho daño a su rival, que acusó su mal porcentaje con el segundo servicio (38%). Soderling nunca ha pasado de octavos de final en el Open de Australia. Murray sólo ha perdido 21 juegos hasta el momento.

Aleksandr Dolgopolov Jr. protagonizó la gran sorpresa de la jornada al doblegar a Robin Soderling en cinco mangas y clasificándose para los cuartos de final de su primer Open de Australia. El próximo rival del ucraniano será Andy Murray, que se deshizo por la vía rápida de Jürgen Melzer.

El ucraniano Aleksandr Dolgopolov Jr., debutante en el Open de Australia, se deshizo del sueco Robin Soderling, cuarto cabeza de serie del torneo, por un tanteo de 1-6, 6-3, 6-1, 4-6 y 6-2 tras un maratón de dos horas y treinta y seis minutos de juego en el choque que abrió la jornada en la Rod Laver Arena. Soderling sigue gafado con el primer Grand Slam de la temporada, donde nunca ha superado la barrera de octavos de final. En esta ocasión alcanzó dicha fase tras vencer consecutivamente a Potito Starace, Gilles Müller y Jan Hernych sin ceder un sólo set. Tampoco parecía que lo iba a 'regalar' ante Dolgopolov, a quien los nervios pasaron factura en el inicio del partido, cediendo el primer set con un contundente 6-1. Los 'cañones' de Soderling a 220 km/h marcaban el ritmo a seguir.

Hasta que el ucraniano se desquitó la presión. Ahí demostró, con gran variedad de golpes, que su tenis es diferente al estereotipo de jugador pegador que tanto se estilo en los últimos años. Irregular y con aspectos que mejorar, nada que su juventud no pueda arreglar, fue haciendo suyo el partido, moviendo a un Soderling aquejado de problemas en su pie derecho, a quien le empezaban a entrar dudas y que acabó cediendo dos sets de manera consecutiva merced a destacar más la nómina de errores (51) que la de aciertos (34). Maquilló el resultado el sueco, imbatible esta temporada (desde que trabaja con Claudio Pistolesi), donde ya conquistó el torneo de Brisbane, haciéndose con el cuarto parcial y dejando el choque por resolver en el quinto y definitivo.


A pesar de la inexperiencia de Dolgopolov, con un bagaje de 1-1 en partidos a cinco sets (ganó a Arnaud Clement en Roland Garros 2010 y perdió ante Jo-Wilfred Tsonga en Wimbledon 2010), la manga definitiva fue suya desde el primer momento. No sólo rompió el saque a su rival, sino que su efectividad con el servicio le hizo administrar plácidamente la renta hasta echar el cierre nuevamente al resto. Jim Courier recordó tras el partido la época en la que Dolgopolov, siendo su padre (Oleksandr) entrenador de Dmitri Medvedev, peloteaba con él cuando sólo tenía tres años. Hoy tiene 22, está asentado en el puesto 46 del ranking ATP y acaba de conseguir su mejor resultado como profesional, alcanzar los cuartos de final del Open de Australia.

Murray va como un ciclón
Andy Murray aún no sabe lo que es ganar un Grand Slam, aunque muchos son los que creen que tarde o temprano lo conseguirá. Hasta la fecha ha estado a punto en dos ocasiones, US Open 2008 y Open de Australia del año pasado. El 'feeling' del escocés con el tapete australiano se ha prolongado esta temporada, donde está exhibiendo un buen nivel de tenis y resultados contundentes. La última víctima de Murray ha sido el austriaco Jürgen Melzer, a quien ha doblegado por un tanteo de 6-3, 6-1 y 6-1 tras una hora y cuarenta y cinco minutos de juego en un choque disputado en la Rod Laver Arena.


El pupilo de Alex Corretja, entrenador a tiempo parcial del momento sólo hasta mitad de temporada, saltó a la pista dispuesto a imponer su ley del juego directo. Haciendo de su derecha en aceleración la generadora de gran parte de sus golpes ganadores, fue tomando los mandos del partido y desniveló la balanza en el cuarto juego con un break que su rival ya no pudo recuperar. Por delante en el marcador, Murray no sólo jugó bien sino que por momentos daba la impresión de gustarse. Tardó siete minutos en lograr el break en el juego inicial, pero a partir de ahí todo fue coser y cantar.

A su juego en el fondo de pista, resto agresivo y buen juego de piernas, el escocés añadió un mejor si cabe porcentaje con el servicio. Firmó a su favor el juego inicial del tercer acto con tres saques directos para después seguir jugando a placer con su rival, que apenas le hizo trece puntos en el set definitivo. Sólo existe un precedente entre Murray y Dolgopolov. Fue en la eliminatoria de segunda ronda de la Copa Davis en 2006, con victoria para el escocés por un claro 6-3, 6-4 y 6-2.

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Ferrer derriba al 'gigante' Raonic y accede a cuartos de final

Ferrer iguala el mejor resultado de su historia en Australia. Aún no conoce la derrota en lo que llevamos de 2011 (9-0). Raonic saldrá de Melbourne dentro del 'Top-100' (97 en estos momentos). El balcánico acabó con 68 errores no forzados, el español con 10.

David Ferrer su el primer español en clasificarse para los cuartos de final del Open de Australia después de derrotar en cuatro mangas a Milos Raonic, gran revelación de este torneo. El de Jávea buscará el pase a semifinales ante Rafael Nadal o Marin Cilic.

"Todos sabíamos en el vestuario que Milos Raonic es un jugador con un potencial increíble", advertía David Ferrer en la previa. El de Jávea, que ya había entrenado con el canadiense en Valencia durante la pretemporada, se impuso a éste por un marcador global de 4-6, 6-2, 6-3 y 6-4 tras dos horas y treinta y cinco minutos de juego en un choque disputado en la Hisense Arena.


El primer set duró 40 minutos y acabó en nómina de un Raonic al que no le pudo la presión de jugar por primera vez ante un 'Top-Ten' en éste, el segundo Grand Slam de su carrera. El canadiense de origen balcánico, con sus espigados 196 centímetros de altura, enseñó sus cartas sobre el tapete desde el juego inicial. Se limitaría a hacerse fuerte con su servicio y pelotear mínimamente al resto. Sus 'cañonazos' (posee el saque directo más potente del torneo hasta la fecha, a 230 km/h) eran difíciles de controlar para un Ferrer que, sin embargo, daba la sensación de ser superior a su rival en los primeros compases. No obstante, fue el de Jávea quien dispuso de la primera bola de break, en el sexto juego del partido, si bien no la pudo aprovechar. Sin tiempo de lamentos, el español cedió a continuación su servicio después de ver cómo Raonic hacía suya la red (se apuntó 14 de los 17 puntos que se jugó en la cinta). El canadiense administró la renta y cerró el set con un 'ace' y juego en blanco.

Confianza en su esquema de juego
Si hay un adjetivo que puede calificar a Ferrer, ése el de luchador. El pupilo de Javier Piles no bajó la guardia y continuó con su esquema inicial. De nuevo se encontró con bolas de break en el sexto juego, hasta tres, aprovechando la última y rompiendo por primera vez el saque del canadiense, que se desmoronó y acabó cediendo los últimos cuatro juegos del set antes de que el luminoso recobrara el equilibrio. David aprovechó la disminución de prestaciones de Raonic, que bien pudo acusar su juventud (20 años) a la hora de abordar el tercer acto. Tras desaprovechar dos bolas de break en el juego inicial y dos más en el quinto, al pupilo de Galo Blanco le tembló el pulso en el siempre clave octavo juego. Bien es cierto que Ferrer peleó lo indecible haciendo acopio de un extraordinario físico, pero dos errores garrafales de Raonic (un 'smash' desde el fondo de pista y una volea fácil en la red) le condenaron a ceder el servicio y posteriormente el set.

El varapalo anímico y el desgaste físico de estos 10 días de competición (tuvo que jugar tres partidos en la fase previa) por parte de Raonic tuvo como resultado el cuarto set, que comenzó con un break de Ferrer en el juego inicial, donde demostró que sigue siendo uno de los mejores restadores del circuito, y puso la directa hacia la victoria final, que, aunque hubo tímida reacción del canadiense, terminó llegando. Tras este triunfo, David jugará por segunda vez en su carrera los cuartos de final del Open de Australia. En 2008 se vio superado por Novak Djokovic. En esta ocasión, Ferrer se medirá al ganador del choque que enfrenta al español Rafael Nadal y al croata Marin Cilic en el partido que abre la jornada nocturna en la Rod Laver Arena.

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Nadal doblega a Cilic por la vía rápida para sellar su pase a cuartos de final

Rafa jugó con una talla mayor de su camiseta, fruto de debate en los últimos días al parecer molestar al balear en su juego. No cedió el servicio en ninguna ocasión. El partido fue más duro que lo que indica el resultado. La 'Armada' estará presente en semifinales.

Rafael Nadal se clasificó para los cuartos de final del Open de Australia después de doblegar a Marin Cilic. El número 1 del mundo, que tiene asegurada la defensa de los 360 puntos conseguidos el año pasado en Melbourne, se jugará un billete para semifinales ante David Ferrer. La 'Armada', por lo tanto, tiene asegurada presencia en la antesala de la final.

Rafa Nadal está un paso más cerca de la reconquista de las Antípodas. El de Manacor resolvió su compromiso de octavos de final ante el croata Marin Cilic, semifinalista el año pasado en Australia y décimo quinto cabeza de serie en esta ocasión, por un marcador global de 6-2, 6-4 y 6-3 tras dos horas y media de juego en el encuentro que abrió la jornada nocturna en la Rod Laver Arena.

56 minutos para sólo ocho juegos son buena prueba de lo duro que fue el primer parcial del partido a pesar de lo que indica el marcador. Nadal comenzó el choque de la mejor forma posible, con un break en un juego inicial en el que se vio 40-0 abajo y acabó ganando. El balear aprovechó la baja eficacia de Cilic con su primer servicio y la concatenación de errores no forzados de éste en los primeros compases, para tomar una ventaja que, aunque difícil de administrar, le valió a Rafa para jugar con relativa comodidad. Buscó mover a su rival, que agachara sus 198 centímetros de altura con golpes cortados y que se desplazara de lado a lado de la pista con cambios de dirección. Salvó la bola de ruptura que tuvo en los momentos clave, llevó a efecto dos de las cuatro bolas de break y supo meter esa vuelta de tuerca de más cuando la manga lo requirió.


Cilic aguantó mientras duró su fortaleza mental
El partido, que fue más tenso que vistoso, ganó en calidad en el segundo acto. Rafa se vio forzado a jugar con primeros servicios porque el peligro de Cilic al resto aumentó. El croata buscó con insistencia la derecha de Nadal, su punto débil a la hora de preparar su defensa, mientras que el patrón del balear pasaba por mover a su rival. Los dos tuvieron sus opciones al resto, pero fue Rafa en el siempre clave octavo juego quien consiguió quebrar la igualdad. Se mostró sólido desde el fondo y sufrió de nuevo para cerrar el set pero finalmente consiguió tal empresa.

Cilic aguantó en el partido hasta que se lo permitió su combustible. Tanto físico como mental, pues hay que ponerse en la piel de un jugador que piensa en remontar dos sets adversos ante el número 1. Rafa no fue el de los grandes días, pero sí que dio la sensación de haber mejorado sustancialmente. Esperó el momento, que llegó en el séptimo juego, para dar el zarpazo definitivo. Los últimos puntos del partido fueron un quiero y no puedo del croata, que terminó regalando un nuevo break con una doble falta.

En cuartos de final, Nadal tendrá que medirse a Ferrer, que se deshizo en cuatro mangas del canadiense Milos Raonic. Rafa y David, números 1 y 7 del ranking ATP, se han medido hasta la fecha en 14 ocasiones, con un bagaje de 11-3 favorable al balear, que ha ganado los últimos siete duelos entre ambos. El último data de la final del Masters 1.000 de Roma del año pasado, donde Rafa se impuso a David por un tanteo de 7-5 y 6-2.

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Wozniacki-Li Na, primera semifinal del Open Australia

La número uno del mundo aprovechó el cansancio de su rival italiana. Li Na buscará su primera final de un Grand Slam.

La danesa Caroline Wozniacki rentabilizó el gasto físico que lleva acumulado a lo largo del torneo la italiana Francesca Schiavone para sacar adelante el duelo entre ambas y alcanzar la semifinal del Abierto de Australia (3-6, 6-3 y 6-3). Wozniacki logró, por primera vez en su carrera, situarse entre las cuatro finalistas del primer Grand Slam de la temporada después de una lucha de más de dos horas, que prolongan su empeño por conquistar por fin un 'major', que lustre su condición de dominadora del circuito.

Schiavone fue víctima de su propio esfuerzo y de sus errores. Totalizó 47. Casi el doble que su adversaria, que reaccionó con determinación cuando la transalpina, cargada de motivación después de su épico triunfo de octavos ante la rusa Svetlana Kuznetsova, se apuntó el primer set. Un choque largo no convenía a la vigente campeona de Roland Garros, que empezó a acumular las cuatro horas y 44 minutos de dura lucha que mantuvo en la cuarta ronda. Al final, las imprecisiones facilitaron la tarea de la danesa, que se alzó con el triunfo y aseguró su supervivencia en el Abierto de Australia.

Wozniacki se enfrentará en semifinales a la china Li Na, que ganó a la alemana Andrea Petkovic por 6-2 y 6-4 en ochenta minutos. La undécima raqueta del circuito femenino, que la próxima semana aparecerá entre las diez primeras, no dio opción a su adversaria, que estaba en unos cuartos de final por primera vez en su carrera.

La jugadora oriental, que ya fue semifinalista el pasado año, su mejor registro en un Grand Slam hasta el momento, buscará la primera final de su carrera.



Federer gana sin sobresaltos a su compatriota Wawrinka

El suizo alcanzó por séptima vez consecutiva las semifinales del Open Australia. Jugará contra el vencedor del Djokovic-Berdych.

Roger Federer se encontró con el partido más fácil hasta el momento en el duelo suizo ante Stanislas Wawrinka (6-1, 6-3 y 6-3) que le aseguró, por séptimo año consecutivo, su presencia en las semifinales del Abierto de Australia. Fue su compatriota el enemigo más frágil que el número dos del mundo ha tenido en su trayecto.

Wawrinka nunca inquietó su servicio, nunca fue suyo. Solo dispuso de una opción en todo el partido. Que no aprovechó. Su resistencia fue menor que la del español Tommy Robredo y, sobre todo, que la del francés Gilles Simon. Solventó la eventualidad en una hora y cuarenta y siente minutos

Necesitaba Federer un choque de trámite después de los sobresaltos que ha padecido en la primera semana. Lo encontró ante un adversario resignado a su condición de número dos de Suiza, a las sombras del relumbrón que genera permanentemente su paisano.

Desperdició la Wawrinka la ocasión de deshacerse del complejo. Solo ha podido una de las siete veces que ha jugado con el vigente campeón. Fue en tierra hace dos años. El primer duelo entre suizos en los cuartos de final de un Grand Slam no tuvo color. Wawrinka, que afrontó con nueve victorias consecutivas en el 2011 el partido de cuartos, cita que supone su mejor registro en un 'major', asumió su suerte casi antes de saltar a la Rod Laver arena.

La vigésima octava victoria seguida en un Grand Slam de Federer, registro que supera el marcado por el estadounidense Jimmy Connors, mantiene su impecable trayectoria desde la Copa Masters de Londres. Ganó entonces y ganó en Doha. En semifinales jugará contra el vencedor del choque entre el serbio Novak Djokovic y el checo Thomas Berdych.

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Kim Clijsters y Vera Zvonareva se citan en semifinales

La belga no ha cedido un sólo set en lo que llevamos de torneo, mientras que la rusa cedió uno ante Bojana Jovanovski. Clijsters alcanzó las semifinales en cinco acasiones con anterioridad (2002, 2003, 2004, 2006, 2007) y Zvonareva 1 (2009).

Kim Clijsters o Vera Zvonareva será finalista del Open de Australia. La belga y la rusa se jugarán un billete en la gran final del sábado después de derrotar a Agnieszka Radwanska y Petra Kvitova en cuartos de final.

La belga Kim Clijsters se clasificó para sus sextas semifinales del Open de Australia después de doblegar a la polaca Agnieszka Radwanska por un marcador global de 6-3 y 7-6(4) tras una hora y treinta y cuatro minutos de juego en un choque celebrado en la Rod Laver Arena. El partido estuvo muy igualado en todo momento, pero lo ganó quien apostó por llevárselo desde el primer momento. Radwnaksa, que llegaba a cuartos de final tras salvar dos bolas de partido ante la china Shuai Peng, le pesó la responsabilidad de poder jugar por primera vez en su carrera las semifinales de un 'grande' y apostó de comienzo por una táctica defensiva que sólo la mantuvo con opciones cuando encontraba errores de su rival. Cuando Clijsters, que jugó con un vendaje compresor en su muslo izquierdo, calentó la muñeca (acabó con 41 golpes ganadores), se hizo firmemente con el primer parcial. El segundo set ganó en intensidad por parte de ambas tenistas, Radwanska incluso llegó a servir para forzar un tercer acto, pero el tie-break hizo justicia a los visto sobre el tapete. La muerte súbita estuvo controlada en todo momento por la ex número 1 del mundo, que sigue en su empeño de conquistar uno de los Grand Slam que faltan en su excelso palmarés.

Clijsters tendrá como rival en semifinales a la rusa Vera Zvoranera, que se hizo de la checa Petra Kvitova por un tanteo de 6-2 y 6-4 tras una hora y cuarto de juego en el duelo que abrió la décima jornada de competición en la Rod Laver Arena. La moscovita, finalista en los dos últimos Grand Slam (US Open 2010 y Wimbledon 2010) nunca ha pasado de las semifinales en Australia, donde alcanzó esta ronda en 2009. Ahora tendrá otra oportunidad que se ha ganado a pulso después de demostrar su superioridad ante una tenista, reconocida como revelación de la temporada pasada, que apenas le opuso resistencia sobre el tapete australiano. Zvonareva saltó a la pista convencida de resolver el choque por la vía rápida y en apenas diez minutos ya dominaba el marcador con un parcial de 4-0. Tras resolver fácilmente el primer set y tomar ventaja en el segundo (3-1), tuvo un momento de relajación que a punto estuvo de complicarle el sino del partido, si bien reaccionó a tiempo, exhibió un extraoridinario juego desde el fondo de pista, haciendo a la par acopio de un extraordinario físico, y puso el broche y final bajo una gran ovación del respetable.

Zvonareva y Clijsters, números 2 y 3 del ranking y por ende cabezas de serie 2 y 3 del torneo, se han medido hasta la fecha en 9 ocasiones, con un bagaje favorable a la belga de 6-3. Sin embargo, el último enfrentamiento entre ambas, que data del WTA Tour Champioships del año pasado, la victoria fue para la rusa por un tanteo de 6-4 y 7-5.

Justine Henin anuncia su retirada definitiva

La tenista belga, que volvió a la competición en enero de 2010, abandona definitivamente las pistas. Los exámenes médicos no eran halagüeños.

La siete veces campeona de torneos de Grand Slam ha hecho pública, a través de su sitio web, la decisión de poner punto y final a su carrera deportiva. La lesión en el codo derecho que supuso su retirada en la pasada edición de Wimbledon y que la mantuvo en el dique el resto de 2010, ha terminado por decantar su retirada.

Finalista en el primer Grand Slam disputado tras su vuelta a la competición, vio cortada una sensacional primera mitad de temporada al caer lesionada sobre el césped del All England Tennis Club. ''Después del percance de Londres en junio, sabía que las cosas se ponían complicadas para volver. Pero decidí seguir adelante y darlo todo para superar la lesión.


Lastrada físicamente hasta el último partido

Forzada a trabajar con molestias en el día a día, el interrogante del rendimiento se cernía sobre su cabeza toda vez que aproximaba la participación en un torneo oficial. ''Rara vez estuve libre de dolor en los últimos meses, donde el trabajo ha sido agotador. Pasó el tiempo y las dudas han crecido. Al volver a la competición no tuve la respuesta que estaba esperando. Por desgracia sufrí cada día un poco más en las últimas semanas'' comentó.

Tras ser sometida recientemente a diversas pruebas para evaluar el estado de la zona afectada, la ex número uno del mundo se ha visto forzada a dar el doloroso paso. ''Hoy en día, los exámenes médicos son claros y formales. El codo está demasiado dañado y frágil para poder seguir ejerciendo mi pasión y mi profesión a un alto nivel'' añadió.

Orgullosa de haber vuelto a competir

Lógicamente afectada por renunciar, esta vez, de manera involuntaria a la competición, la belga se ha mostrado satisfecha con la decisión de haber regresado a las pistas y no se arrepiente de lo que ha terminado siendo un regreso frustrado. ''Necesito tiempo para digerir todo esto, pero sigo convencida de que a posteriori, incluso si en mi regreso al deporte no he cumplido mis expectativas, todos aprendimos y ganamos un montón de cosas estos últimos 15 meses'' indicó.

Por último, la valona ha querido agradecer el apoyo de todos cuantos han contribuido a forjar su carrera en una emotiva despedida. ''Quiero dar las gracias a todos los que abordaron esta aventura conmigo. Mi entrenador y amigo Carlos, mi familia, mis amigos, mi equipo, todos los que me ayudaron a levantar la cabeza cuando pasé momentos difíciles y han compartido mis lágrimas de alegría. Gracias a mi personal médico que en los últimos meses me ha apoyado con gran profesionalidad y disponibilidad. Por último y lo más importante, gracias a todos. Gracias por estar a mi lado todos estos años. Nunca olvidaré su apoyo y lealtad. Y si tengo una pena es haber estado demasiado protegida en mí mismo y no haber sido más cercana con todos ustedes. Espero que perdonen mis errores y mantengan un recuerdo maravilloso de las emociones que compartimos juntos'' sentenció.

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Andy Murray presenta su candidatura al título con su victoria ante Aleksandr Dolgopolov

El escocés cedió su primer set del campeonato. Dolgopolov se despide de Australia con la vitola de 'revelación del torneo'. El ucraniano acabó con 77 errores no forzados.

Andy Murray se clasificó para las semifinales del Open de Australia después de superar a Aleksandr Dolgopolov Jr. El británico, número 5 del mundo, está a un sólo paso de repetir la final alcanzada en Melbourne Park el año pasado. Para ello deberá superar aún a David Ferrer.

¿Está preparado Andy Murray para conquistar su primer Gran Slam? Después del nivel exhibido en los cinco partidos que lleva en Australia, parece que la respuesta es que sí. Su última víctima sobre el cemento 'aussie' ha sido el ucraniano Aleksandr Dolgopolov Jr., debutante y revelación del torneo, que acabó su aventura oceánica en cuartos de final al ceder ante el número 5 del mundo por un marcadr global de 7-5, 6-2, 6-7(3) y 6-3 tras tres horas y cinco minutos de juego en el choque que dio por concluida la jornada diurna en la Rod Laver Arena. Murray, finalista el año pasado, está a un paso de poder tomarse la revancha.

El primer set fue un correcalles de dos jugadores de gran calidad pero pasados de revoluciones. No obstante, ninguno de los dos firmó un bagaje positivo entre golpes ganadores y errores no forzados durante los 58 minutos que duró la primera manga (9-13 para Murray, 21-26 para Dolgopolov). El británico salió 'enchufado' a la pista, muy bien asentado en el fondo de pista, poniendo en práctica el guión diseñado junto a su técnico Alex Corretja y tomando la iniciativa con prontitud en el luminoso. Con porcentajes discretos al servicio, pero muy acertado al resto, Andy tuvo bola de ponerse con 5-1 y servicio, pero Aleksandr tuvo la reacción que todos esperaban. Mejoró sus números con el saque (10 'aces' en el primer acto) y golpeó dos pasos metido en pista para igualar la contienda. Cuando todo el mundo advertía el tie-break, Murray volvió a reencontrarse con su juego. El escocés necesitó tres bolas de set, pero se valió de acertar en la lectura del saque de su rival para finiquitar con dos restos ganadores una manga tan importante como la primera.

Murray se deja un set que tenía controlado
Más pausado fue el segundo acto. En él Murray volvió a llevar las riendas del juego. Serio, concentrado, sin dar opción a la reacción de su rival, a quien la condición de revelación no le hacía ganar puntos aunque sí llevarse algún aplauso gratuito de la grada. El británico rompió el equilibrio en el tercer juego, ratificando esa ventaja con una gama de servicios variados que terminaron de desconcertar a Dolgopolov. Andy acabó el segundo acto con un 100% de efectividad con el primer servicio (14/14) y cedió sólo dos puntos con el segundo (6/8), clave para entender el porqué de su dominio incontestable sobre el tapete. Bien sabía el de Dunblane que Dolgopolov está hecho de otra raza, por eso dicen que está llamado a verse entre los grandes, es un jugador de esos que no se arruga y capaz de hacer cosas diferentes. Tanto, como darle la vuelta a un 1-3 en contra a base de tesón y un buen servicio, que le sacó de más de un apuro en momentos importantes. Como el undécimo juego, donde tuvo que salvar tres bolas de ruptura que hubieran significado prácticamente tirar la toalla. El set, esta vez sí, se fue al 'tie-break, donde se vio la mejor versión del ucraniano y la peor de Murray, que, tras encontrarse 2-4 abajo, cometió una doble falta, falló un 'smash' a media pista y cedió su primer set del torneo con un revés cruzado al pasillo de dobles.

Cabreado consigo mismo, la reacción de Murray no se hizo esperar. Saltó a la pista dispuesto a recuperar terreno y en plena vorágine de fallos en cadena, el escocés salió beneficiado, logrando un parcial de 4-0 (cediendo sólo un punto), que se vio interrumpido por un break del ucraniano, a quien el gen luchador le impide sacar la bandera blanca sea cual fuere la situación a levantar. Andy, con leves síntomas de cansancio, supo reponerse una vez más y utilizando su derecha como batuta de orquesta, puso el punto y final a un partido con tensión pero sin brillantez. Tras esta victoria, Murray está a un sólo paso de igualar el resultado del Open de Australia del año pasado, donde sólo Roger Federer le privó de conquistar su primer 'grande'. Este año podría tomar cumplida venganza del suizo en la final, pero para ello deberá superar aún el escollo español de David Ferrer.

OPEN DE AUSTRALIA

David Ferrer gana el derbi ante Rafa Nadal y alcanza las semifinales en Australia

Ferrer está invicto lo que llevamos de 2011 (9 victorias). Su mejor resultado en un Grand Slam habían sido las semifinales del US Open 2007. En Australia nunca había pasado de cuartos. Nadal no pierde puntos al igualar los cuartos del año pasado. El balear sufrió problemas en los isquiotibiales de su pierna izquierda.

David Ferrer dio la sopresa de la jornada al ganar el derbi español de cuartos de final a Rafa Nadal y por ende eliminar al número 1 del Open de Australia, evitando así que éste consiguiera ganar los cuatro 'grandes' seguidos. El alicantino se medirá a Andy Murray en semifinales, mientras que el balear tendrá tiempo de recuperarse de sus problemas musculares.

"No es que me lo crea, es que Rafa es muy bueno", advertía un David Ferrer que nunca había pasado de los cuartos de final en el Open de Australia. Quizá con esta afirmación se quitaba presión para lo que estaba por lograr, eliminar a Rafael Nadal del primer Grand Slam de la temporada. Influyeron los problemas físicos del balear, pero sobre todo el buen hacer del alicantino, cuyo juego por momentos rozó la perfección. El marcador final, 6-4, 6-2 y 6-3 tras dos horas y treinta y dos minutos de juego, hizo justicia a lo visto sobre el tapete azul de una abarrotada Rod Laver Arena.


El partido rompió cualquier guión establecido. Los dos primeros juegos del partido duraron 23 minutos, botón de muestra de lo dura que era la batalla entre ambos tenistas sobre el cemento 'aussie'. El peor parado de esta circunstancia salió Nadal, que en el segundo juego notó un pinchazo en los isquitibiales de su pierna izquierda que hicieron saltar las alarmas. Se fue el balear a vestuarios para ser atendido por el fisioterapeuta del torneo y, aunque pudo continuar, su físico ofrecía muchas dudas ante un rival que exigía en demasía. Y es que Ferrer siguió en la misma línea que viene mostrando en tierras oceánicas, muy ágil de piernas, muy fino con su derecha y con una variedad de golpes que vuelve loco a sus rivales. Sólo se le puede achacar que estuviera a punto de dejar una ventaja de 5-2 a favor en esta primera manga por culpa de la precipitación y los nervios. Sus fallos en cadena permitieron que Rafa llegara incluso a tener opciones de igualar el marcador (5-5), pero supo reengancharse a tiempo al partido para cerrar el primer set tras 70 minutos de intenso juego.

Gran nivel y excelente agilidad de piernas de Ferrer
En el tiempo de asueto Nadal se cambió la camiseta, esa de una talla más grande con la que juega para disminuir la sudoración y por consiguiente el desgaste. Sorprendió el balear al romper en blanco el servicio de Ferrer en el segundo juego de la reanuación, pero fue simplemente un oasis en un desierto con muchas dunas que remontar. Se le vio justo de fuerzas, sobre todo cuando jugó a la contra. Por su parte, Ferrer hizo los deberes de una lección que tenía bien aprendida. No es justo comparar épocas, pero por momentos recordó a aquel jugador que enamoró al mundo en 2007 llegando a ser número 4 del mundo y jugando la final de la Copa Masters (por aquel entonces disputada en Shanghai). Buscó con insistencia la derecha de Rafa, moverle de lado a lado y sus latigazos se disfrazaban de ganadores para jolgorio del respetable.

Hasta nueve juegos consecutivos logró Ferrer, lo que traducido sería apuntarse el segundo acto y tomar ventaja en el tercero y a la postre última manga del encuentro. Un set que apenas tuvo historia porque la tensión bajó a medida que se consumía el reloj, fruto de la relajación de 'Ferru' por un lado y las limitaciones de Rafa a medida que acumulaba golpes en su raqueta. Nunca un número 1 del mundo se ha retirado en un Grand Slam en la Era Open y Rafa no iba a ser el primero. Loable fue que siguió siendo competitivo hasta el final, buscando resquicios en el muro que durante todo el choque fue Ferrer. Una vez más David pudo con Golliat.


El rival de Ferrer en semifinales será Andy Murray, con quien se ha medido hasta la fecha en cinco ocasiones, con un bagaje de 3-2 favorable al español.

Nadal: "No me gusta retirarme; no lo hice porque no tenía tanto dolor como para abandonar"

El español cree que no tendrá otra oportunidad de conseguir ganar los cuatro Grand Slam de forma consecutiva.

El número uno del mundo, Rafael Nadal, se mostró contrariado por la situación vivida en el Open de Australia, donde una rotura de fibras en la parte posterior del muslo de la pierna izquierda le mermó para afrontar el encuentro de cuartos de final contra David Ferrer, aunque rechazó abandonar.

"No me gusta retirarme. No me retiré porque no tenía tanto dolor como para abandonar. Me retiro cuando no puedo más de dolor. Y aquí no era el caso. No me retiro porque puedo jugar. A un nivel 'X', que no voy a decir y que no me dio para ganar a un rival que jugó a un gran nivel", explicó.

"No retirarme ha sido lo normal para mí. Hay mucha gente pendiente de esto y no me gusta retirarme. La sensación que queda es fea y prefiero seguir intentándolo", agregó Rafael Nadal tras el encuentro.

"Yo sabía que o David tenía un bajón o yo no tenía opción. Yo con ese nivel no podía llegar a eso en las condiciones en las que estaba", insistió el número uno del mundo.

El tenista español rechazó profundizar sobre si las escasas vacaciones o el virus contraído en Doha habían podido propiciar la dolencia muscular. "No es hora de hacer valoraciones de si he tenido pocas vacaciones o no. Yo creo que lo he hecho perfecto y creo que es un cúmulo de situaciones que se han juntado. En Abu Dabi jugué bien y en Doha caí enfermo. Aquí ha pasado esto, justo cuando mejor estaba", indicó Nadal.

La derrota de Nadal le deja fuera de la posibilidad de convertirse en el tercer jugador de la historia en ganar los cuatro Grand Slam consecutivos, el "Rafa Slam", como se denominó la posibilidad. "Ya no se llama así", dijo el jugador. "Era una oportunidad que tenía y ya no creo que haya muchas más. Pero no vivo para eso ni para récords", señaló.

"Tengo que intentar coger el nivel que tenía antes. En el año pasado llegó en el torneo de Montecarlo", recordó Nadal, que insistió en su convencimiento de que la lesión es una rotura de fibras. "Sé lo que tengo. No tengo nada importante. Es una rotura de fibras. Tengo el punto perfectamente localizado y sé lo que es", concluyó Nadal, que mantiene su idea de ir a disputar la Copa Davis con España frente a Bélgica en Charleroi del 4 al 6 de marzo.

OPEN DE AUSTRALIA

Na Li se carga a Wozniacki y hace historia metiéndose en la final

Wozniacki estuvo a dos juegos de la final. Pero fue incapaz de frenar la reacción y la progresión de una adversaria que sumó su undécimo partido seguido ganado.

Na Li se convirtió en la primera china en alcanzar la final individual de un torneo del Grand Slam, tras superar a la número uno del mundo, la danesa Caroline Wozniacki, del Open de Australia (3-6, 7-5 y 6-3), distanciada una vez más de la conquista de un éxito en un torneo grande.

Wozniacki estuvo a dos juegos de la final. Pero fue incapaz de frenar la reacción y la progresión de una adversaria que sumó su undécimo partido seguido ganado. Desde que conquistó Sídney semanas atrás. En su segundo intento serio la jugadora china, que saldrá de Melbounre con el número siete del mundo y el cuatro si gana el título a la belga Kim Clijsters o la rusa Vera Zvonareva el sábado, semifinalista el pasado año, logró plantarse en la final.

Wozniacki tuvo el partido controlado al principio. Pareció aprender de experiencias pasadas; de las dos derrotas encajadas en los tres partidos que han disputado. El último, precisamente, en este mismo escenario. La tenista danesa, por su parte, tiene en el Melbourne Park una nueva ocasión de introducir un Grand Slam entre los éxitos de su carrera, que ilustre su historial y su condición de dominadora del circuito.

Nunca se dio por vencida Na Li, que afrontó el duelo sin ceder set alguno. Wozniacki transitaba sólida con la conquista del primer parcial y con 4-1 en el segundo. Li juega punto a punto y su rival no pudo frenar la escalada. Con la manga equilibrada Wozniacki, a la que se le echa en cara la condición de número uno sin haber ganado un Grand Slam, empezó a sentir el acoso.



Se verá las caras ante Clijsters

Siete años después, la belga Kim Clijsters alcanzó la final del Abierto de Australia, tras superar a la rusa Vera Zvonareva (6-3 y 6-3), a la que ya ha arrebatado el número dos del mundo, y disputará el título a la china Na Li, que batió a la danesa Caroline Woniacki (3-6, 7-5 y 6-3). Entonces, en el Abierto de Australia del 2004, perdió ante su compatriota Justine Henin, que hace unas horas ha anunciado su retirada definitiva del tenis. En esta ocasión, Clijsters tiene ante sí la posibilidad de sumar su cuarto Grand Slam. El primero al margen del Abierto de Estados Unidos. Ha sido en Nueva York donde la belga ha cosechado sus únicos grandes (2005, 2009 y 2010).

Será la segunda final consecutiva de un Grand Slam para Clijsters, incontestable desde su retorno a la competición, en agosto del 2008. La del Melbourne Park será la novena ocasión en la que la belga puje por un trofeo grande. Cinco derrotas. Pero ninguna después de su retorno, donde no conoce rival. La rusa Vera Zvonareva se topó de nuevo con Kim Clijsters. La que le dejó meses atrás sin el Abierto de Australia. Ahora vuelve a abrirle paso en el trayecto hacia la final de Australia, adonde llegará la belga con el número dos del circuito amarrado

No hubo puja excesiva en el duelo, resuelto en una hora y trece minutos. Zvonareva no fue capaz de inquietar con su resto los saques de Clijsters, que solo perdió una vez su servicio. La jugadora belga situó la situación a favor y nunca vio inquietado el triunfo que le da vía libre hacia la final, donde se medirá a la china Na Li, la última que le ha ganado, recientemente en la final del torneo de Sydney.

OPEN DE AUSTRALIA

Djokovic no da opción a Federer y se planta en la final de Australia

Djokovic, campeón del torneo en 2008, jugará contra el ganador del Ferrer-Murray. Segunda final consecutiva de Grand Slam para el serbio.

El serbio Novak Djokovic se ha convertido en el primer finalista del Open de Australia, primer 'Grand Slam' del año, al imponerse en semifinales al suizo Roger Federer, en tres sets por 7-6(3), 7-5 y 6-4.

El balcánico, campeón en 2008, disputará su segunda final de un 'grande' consecutiva, después de caer en el último US Open ante Rafa Nadal, en el escenario en el que ha conquistado el único gran trofeo que adorna su palmarés.

Con esta victoria, el de Belgrado impedirá a Federer seguir ampliando su récord en 'Grand Slams', que estableció en 16 el pasado año en Melbourne Park y además, deja al de Basilea sin título en cuatro grandes seguidos por primera vez en ocho años, ya que desde Wimbledon 2003 al menos ha ganado uno de cada cuatro.


'Nole' llevó la iniciativa desde los primeros compases, dispuesto a repetir su victoria en las 'semis' de 2008 y del pasado US Open, y su apuesta por un juego agresivo le permitió apear al defensor del cetro y tetracampeón.

Así, tras un primer set muy igualado, sin roturas para ninguno de los contendientes, Djokovic se adelantó con un 4-1 en la 'muerte súbita' que le puso las cosas de cara y aunque falló su primera bola de set, se llevó el parcial con la segunda.

La tónica del choque se alargó a los primeros compases del segundo set, con un 'break' tempranero para Djokovic (2-1) aunque Federer replicó de inmediato (2-2) para devolver la igualdad al electrónico. Poco a poco, el de Basilea se iba encontrando más cómodo y logró una nueva ventaja en el sexto juego (4-2).

Sin embargo, cuando sacaba para llevarse el set (5-4), volvió a cometer varios errores y permitió al serbio gozar de tres bolas de rotura para igualar el marcador. Federer salvó las dos primeras, pero no pudo con la tercera (5-5). A partir de ahí, el revés del suizo dejó de carburar y Djokovic se llegó con facilidad el segundo set.

En el tercero, los nervios rápidamente hicieron mella en el suizo, que se vio abajo al encajar un 'break' en el tercer juego (2-1). De todos modos, su afán de lucha le permitió volver a meterse en el partido en el octavo juego (4-4).

Aunque como ya le había ocurrido en los juegos anteriores, Djokovic recuperó de inmediato el 'break' (5-4) y cerró el partido con su siguiente servicio, al tercer 'match-point', para infligir a Federer la derrota más dolorosa de su carrera desde la final de Roland Garros contra Nadal en 2008.

Ahora, el campeón de la pasada Copa Davis espera rival del encuentro de semifinales que disputarán este viernes el español David Ferrer, verdugo en cuartos de final de Nadal, y el escocés Andy Murray.