Bueno, una vez buscadas algunas referencias tanto por webs y periodistas de Vitoria, más o menos está claro que el rendimiento de Alberto allí es bueno, y en concreto me centro en la temporada 2013/2014.
Alberto coge al Alavés en la jornada 32, con 33 puntos y a 5 de una salvación que marcaba por aquel entonces marcaban Mirandés y Real Madrid Castilla. Debuta con un empate (2-2) ante el Zaragoza, con un claro 5-3-2, con Samuel como central libre (fijo en su esquema), Carlos Lázaro en el banquillo y Guzmán creo que sancionado (no jugará hasta la jornada 38).
Sus números en 11 partidos son 5 victorias, 3 empates y 3 derrotas, logra sumar 18 puntos para acabar la liga con 51, salvado gracias al gol de Guzmán en el 90' ante el Jaén.
Para mí es la temporada que deberíamos tomar como referencia, y por lo que leo de periodistas vitorianos (creo que hoy en la SER ha hablado el de la emisora en Vitoria) es claramente más del perfil de Garitano que el de Portugal, con lo cual al final tenemos que volvemos a dar un nuevo bandazo.
No creo que contra el Lugo salga con línea de 5 pero no me extrañaría ver un doble lateral en una de las bandas o a Juanpe de pivote. La idea de Alberto en el Alavés es parecida a la del Eibar que ascendió: arropaditos atrás, salir rápidos a la contra, pocas complicaciones..., lo cual Gaizka Garitano no consiguió aquí y Portugal sólo hizo en uno o dos partidos contados, como el 0-2 en Zaragoza.
La rueda de prensa de momento más que ilusionar como leo en algunos sitios, me parece que es por fin una dosis de realidad después de ver a Portugal vivir en mundos paralelos. Hay detalles que me gustan, por ejemplo decir que la situación del equipo no es cosa de "buena o mala suerte", que es necesario "recuperar un estilo colectivo y abandonar las individualidades", o que el equipo debe ser "competitivo, potente y duro".
No me gusta que venga porque al final es amigo del Chache, pero claro, viendo la cantidad de enemigos que se ha buscado en los últimos años tampoco me extraña. Y desde luego prefiero a Alberto muy por delante de otros iluminados como Toril o casi ex-entrenadores como Esteban Vigo.
De momento, si de verdad ha visto los partidos del Real Valladolid, y en concreto el último en Pamplona, debería dejar en la grada a Mojica y a alguno más.