'EL ANÁLISIS DEL EXPERTO'
¿ Es el fin de un ciclo glorioso en Munster ? (II)
· La temporada pasada ya tuvo dos avisos: perdió en semifinales de la Magners 16-6 contra Leinster y en 'semis' de la Heineken ante Biarritz por 18-7... siempre lejos de Thomond Park · Lo peor... nunca opción de ganar, en ambos partidos se vino abajo físicamente en la segunda parte y fue 'martilleado' tanto por Sexton como por Yachvili
Por JOSÉ IGNACIO BENITO 31/01/11
Justo la semana en la que arranca el Torneo VI Naciones -cuyo Especial está a punto de salir de máquinas... como se decía antiguamente-, aquí llega la segunda parte del artículo en el que analizaba el fin de ciclo de uno de los 'grandes' del rugby europeo, un Munster que por primera vez en doce temporadas no disputará los cuartos de final de su competición favorita... la Heineken Cup. Mucha culpa la tiene el hecho de que lejos de su fortaleza de Thomond Park los irlandeses se hayan mostrado los dos últimos años como un equipo previsible, que sólo es capaz de ganar a los conjuntos que son inferiores a él... nunca a los que son, más o menos, de su nivel. Aunque también ayudó lo suyo el Toulon francés de Jonny Wilkinson. Aquí nos quedábamos el otro día...
Lo hecho, hecho está y es momento de reflexionar. La temporada pasada ya tuvo dos avisos de lo que se avecinaba. Perdió en semifinales de la Magners League 16-6 contra Leinster y también cayó derrotado en 'semis' de la Heineken Cup ante Biarritz por 18-7... siempre lejos de Thomond Park. Bien es verdad que ya quisieran muchos perder en la penúltima ronda de estos torneos, pero es que no tuvo nunca opción de ganar, en ambos partidos se vino abajo físicamente en la segunda parte y fue 'martilleado' tanto por Sexton como por Yachvili.
Dennis Leamy, en la imagen junto a su compañero Murphy, es uno de los muchos jugadores de Munster que piden a gritos un relevo, al igual que los Marcus Horan, John Hayes, Flannery, O'Connell, O'Callaghan, ni admirado Mick O'Driscoll, Wallace, Alan Quinlam, Stringer o Ronan O'Gara.
Sus grandes hombres, sus leyendas vivientes, estaban extenuados y todo indica que esta temporada se repetirá esta situación y, pese a que todavía está 'vivo' en la Magners League, de cuya temporada regular es el actual líder, y en la Challenge Cup, segunda competición continental de clubes en cuyos cuartos de final estará al no haber podido ser uno de los dos mejores segundos de los grupos de la Heineken, parece que también llegará al tramo final de temporada cansado.
Otro indicativo fue la alineación presentada en Toulon, en la que había ocho jugadores con más de 30 años y muy castigados al haber estado casi diez temporadas al máximo nivel internacional, toda su carrera profesional. Profesionales que superan o casi llegan a las 100 'caps' y cuya mayoría pasa de 70: Marcus Horan, John Hayes, Flannery, O'Connell, O'Callaghan, ni admirado Mick O'Driscoll, Wallace (en el 'XV histórico de la ERC'), Dennis Leamy, Alan Quinlam, con más de 200 partidos con Munster, qué decir de Stringer o de Ronan O'Gara, también en el 'XV histórico' y elegido mejor jugador del período 1995-2010. Ahí es nada.
Un equipo que basa casi todo su juego en el poderío y dominio físico debe ver que con 30 años no se aguanta lo mismo que con 20. Más problemas... ¿alguien sabe quién es el suplente de O'Gara? ¿Quién releva a los segundas y a los terceras?. Todos sabemos de memoria la alineación en delantera de Munster, sin embargo, los suplentes del paquete titular de estas temporadas no han gozado de minutos y confianza, son auténticos desconocidos. No así en tres cuartos, donde hemos visto a jugadores contrastados como Howlett, Mafi, Tipoki, Earls, Tuitupou, De Villiers, Warwick o Barry Murphy, un gran centro que hizo pareja con Trevor Halstead.
Ver al vecino triunfar, ver a Leinster ocupar el lugar de mando del Rugby Irlandés también duele y mucho. Y es que el conjunto de Brian O'Driscoll -en la imagen a punto de ensayar ante Munster- y compañía se ha convertido en la referencia de Irlanda en los últimos años.
Se podrían haber fichado jugadores, pero eso no asegura éxito a menos que se fiche gente contrastada que suele cobrar mucho dinero y no están las empresas irlandesas como para patrocinar a lo grande a un club. Munster debe mirar a su provincia y a sus clubes locales para volver a crecer: todo sale de la cantera, compromiso e identidad, jugadores locales son demandados cada vez más por los aficionados de muchos deportes, viendo las medianías que vienen de fuera. Las soluciones a los problemas del equipo de la camiseta roja con el venado y las tres coronas en el escudo y su futuro están en su misma provincia. Al respecto, me parecen indignantes e impropias de un dirigente de rugby las declaraciones del presidente de Toulon, Señor Boudjellal, diciendo que Munster era un equipo patrocinado por el FMI.
Aquí no acaban las penalidades, ahora viene lo peor: ver al vecino triunfar, ver a Leinster ocupar el lugar de mando del Rugby Irlandés... Y es que el conjunto de Brian O'Driscoll y compañía se ha convertido en la referencia de Irlanda en los últimos años. Si en el período 2000/09 Munster dominó con dos Heinenken Cup y otras tantas finales perdidas y dos títulos de la Magners League, todo indica un cambio viendo como Leinster juega. Incluso en el 'XV del Trébol', donde tradicionalmente la delantera y los medios eran de Munster y los tres cuartos de Leinster, son ahora Cian Healy, Jamie Heasley, Reddan, Kearney, Sexton y el sempiterno capitán GOD los que mandan... junto a Stephen Ferris y Rory Best de Ulster. Para más inri, el seleccionador irlandés es el hombre que entrenó el gran Munster de los dos títulos europeos... Declan Kidney.
Todo esto es lo que me dice la cabeza y el frío análisis, pero el corazón me dice otra cosa, me dice que no hay criatura más peligrosa que un león herido, el cual sólo tiene una salida: vencer o morir matando... me dice que hemos sido capaces de realizar grandes hazañas deportivas... me dice que podemos levantarnos y seguir empujando... me dice que con la afición que tenemos, somos capaces de derribar cualquier obstáculo y que jamás dejaremos al equipo solo. Echo la vista atrás y veo grandes gestas, veo orgullo y veo ganas de levantarnos y luchar, 'Stand up and fight', gritarán desde las gradas de la fortaleza de Thomond Park. A día de hoy el lema de Munster adquiere su mayor significado: 'To the brave and faihtful, impossible is nothing'. Amén.
http://www.marca.com/2011/01/31/mas_deportes/rugby/1296480842.html