La llegada de Agirretxe, en suspenso
Calle quiere aceptar la oferta del Recreativo, pero no saldrá si el refuerzo atacante no llega Una nueva lesión del cuarto delantero de la Real, Ifrán, hace dudar a los donostiarras de su salida.
Estaba casi montado en el coche, preparando las monedas para el peaje de camino a Valladolid, adonde debía llegar hoy, y un comunicado de los servicios médicos de la Real Sociedad lo paró todo. «Diego Ifrán: no ha participado en el entrenamiento por presentar una tendinopatía aguda del tendón de Aquiles de su pierna derecha. Realiza tratamiento de fisioterapia». Unas pocas líneas, pero suficientes para amedrentar al club propietario de los derechos de Imanol Agirretxe.
No es que Ifrán haya sido decisivo hasta ahora en el campeonato de Liga. Ha encadenado lesión tras lesión y a pesar de ello Agirretxe no ha entrado en los planes de Martín Lasarte. Pero la cuenta que se hace la Real es otra: si Ifrán tiene para largo, una lesión mínima de Llorente o de Tamudo no tendría recambio en la plantilla si Agirretxe se marcha. Y es que Ifrán no solo es propenso a las lesiones, que le llevan martirizando desde que fichó, sino que además la de ahora puede ser más grave de lo que parece.
El club donostiarra le va a practicar nuevas pruebas a su delantero. De lo que dictaminen esas pruebas dependerá lo que haga con Agirretxe y su cesión al Real Valladolid. Una cesión que, por otra parte, está cerrada y apalabrada en todos sus flecos.
Dominó de delanteros
Este inoportuno frenazo ha tenido además consecuencias sobre terceros implicados. Especialmente sobre Antonio Calle. Al delantero blanquivioleta le ha llamado el Recreativo de Huelva para ofrecerle año y medio de contrato. Y la situación es clara para él. En Valladolid no juega, porque Abel Resino solo utiliza un delantero y ese es Javi Guerra. El club quiere traer a otro. Y en junio acaba contrato. Si a eso se le añade que en Huelva logró un ascenso, jugó en Primera División y dejó muchos amigos, la cosa está clara.
El problema para Calle, un futbolista modelo en su comportamiento en el vestuario y en su implicación con el proyecto blanquivioleta, es que al Valladolid en este caso le sacude el mismo miedo que ahora atenaza a la Real Sociedad. Si deja ir a Calle y Agirretxe finalmente no viene se quedaría con Javi Guerra y los del filial como únicos delanteros. Demasiado riesgo.
Tampoco lo tiene fácil Álvaro Antón, a quien el Recreativo de Huelva también llamó para interesarse por su situación. Ayer por la mañana parecía torcerse todo mientras el jugador explicaba que no sabe más que el interés que tienen en él, sin que se haya hablado de duraciones de contrato, dinero o condiciones. El Recreativo es uno de los clubes que está intentando reforzarse en este mercado invernal, puesto que los onubenses tienen 22 puntos y están a uno de los puestos de descenso, cuya frontera marca el Alcorcón (21 puntos). La operación Agirretxe-Valladolid-Calle-Recreativo está, por tanto, en pies de Ifrán. Concretamente, en su tendón.
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