'No scrum, no win'
Los mismos protagonistas en las semifinales de la Premiership
Saracens - Northampton, en el Allianz Park, y Leicester - Harlequins, en Welford Road, repiten presencia en la lucha por el título de la Aviva Premiership inglesa
Los 'Sarries', invictos en casa y muy confiados en su manual sudafricano, son claros favoritos pero los Saints tienen la oportunidad de hurgar en una herida aún abierta
Si los Quins hacen su juego de continuación y ataque estarán en sus puntos y ganarán; si los Tigers imponen su ritmo más pausado y su mayor fortaleza física, no
Por José Ignacio Benito 08/05/13
Concluida la temporada regular, al Aviva Premiership inglesa afronta este fin de semana sus semifinales para conocer a los dos protagonistas de la final del próximo 25 de mayo en Twickenham.
Los cuatro equipos que jugaron las semifinales de la temporada pasada repiten presencia, aunque no rivales. Poco o nada cambia en el rugby inglés, pues equipos como Leicester o Saracens ya llevan cuatro 'semis' seguidas. Esta vez los 'Sarries' juegan en casa contra los Saints, mientras que en Welford Road se verán las caras Tigers y Quins para repetir la final pasada.
Lo más destacado de la última jornada de la temporada regular -resultados abajo del todo- fue la victoria ajustada por 22-19 de Harlequins ante Northampton que permite al vigente campeón acabar tercero y, sobre todo, el partidazo en el Sandy Park, donde Exeter se ganó la plaza para la Heineken al vencer 'in extremis' a Gloucester por 40-39 con un golpe de Steenson a falta de un minuto para el ochenta reglamentario.
SARACENS - NORTHAMPTON SAINTS (Domingo 12, Allianz Park)
Es el peor momento de los Saracens en toda la temporada, la semifinal europea perdida contra Toulon puede afectar del mismo modo que lo hicieron los cuartos de final de la Heineken Cup de la temporada pasada cuando Clermont les barrió en casa 3-22; ya no levantaron cabeza en Inglaterra. En el terreno de juego el equipo mostró muchas dudas y, sobre todo, falta de respuestas ante el dominio de Toulon, no había plan B y si no puede imponer su estilo no tiene de donde tirar. Anímicamente tampoco hubo respuestas, nadie tiraba del carro, excepto su gran capitán Steve Borthwick, ausencia de líderes absoluta en el momento de la temporada clave, donde la confianza en el juego que les ha llevado hasta allí no puede faltar.
Su andar por la liga ha sido el que se le supone: firme, duro, muy militar y muy disciplinado; ha ganado a los Quins los dos partidos, a Leicester 27-32 en Welford Road y empató a 9 en su casa; y a sus rivales de ahora les ganó 6-16 y 17-16, es decir, ha sido superior a los buenos de la Liga y sólo ha perdido en despistes contra equipos muy inferiores a ellos, como London Irish por 29-16 el día que Tom Homer volvió a coger su fusil o como Worcester 12-3, mientras que también perdió contra Exeter 14-12 en un partido durísimo y muy peleado y en el Kingsholm por 28-23 sin jugarse ya nada.
Los Saints tienen 'El Muro' ante ellos, sólo Wilkinson lo ha saltado hasta ahora, pero existen grietas por donde colarse y Northampton debe aprovecharlas
Cuatro derrotas en 22 partidos, sus habituales números defensivos sobresalientes, un estilo de juego muy particular basado en hacer desaparecer al rival al estar absolutamente dominado físicamente y, hasta ahora, mentalmente, ocupación total del territorio rival sin necesidad de posesión y dos excelentes pateadores que van sumando de tres en tres mientras en rival se hace pequeño. Desde luego no entusiasma ni enamora con su juego, pero ni falta que hace, pues su efectividad es la que gana partidos. Hubo momentos en la temporada que ganaba partidos con un ensayo y siete golpes, no buscaba ensayos hasta que se desató en el tramo final y hubo resultados no normales para ellos con muchos bonus ofensivos.
Los Saints tienen 'El Muro' ante ellos, sólo Wilkinson lo ha saltado hasta ahora, pero existen grietas por donde colarse y Northampton debe aprovecharlas. Northampton tiene un problema con estos equipos y también una solución. Su problema es que no ganan a nadie que sea superior a ellos, han perdido contra Leicester, Harlequins y los propios Saracens los dos partidos y sus otras derrotas han sido contra London Irish y contra Gloucester. Esto indica que su rugby no les llega para vencer a los buenos, pero tiene una solución... y es que los Saints son de esos equipos que tienen que jugar muy bien para ganar partidos, mientras que otros sacan adelante partidos jugando mal, como Leicester. Tiene que hacer un grandísimo partido para ganar, su delantera tiene que imponerse, marcar el ritmo y dar a los 'Sarries' su propia medicina, pues Toulon demostró que este equipo se queda sin ideas ofensivas si su delantera no domina y gente como Farrel o Ashton desaparece.
Saracens es claro favorito, invictos en casa y muy confiados en su sistema, pero Northampton tiene la oportunidad de hurgar en una herida todavía abierta si logra ir por delante en el marcador y llena de dudas el manual sudafricano de los Sarries.
LEICESTER TIGERS - HARLEQUINS (sábado 11, Welford Road)
Por alguna razón, los Quins le tiene tomada la medida a los Tigers, les han vencido en los últimos tres partidos que han jugado: la final pasada y los dos del presente campeonato (9-22 y 25-21) en tres campos diferentes, por lo que tampoco les debe imponer el ambiente del único terreno de juego de Inglaterra que se llena hasta la bandera partido tras partido y sea el rival que sea.
Es muy habitual que Welford Road presente llenos de 24.000 espectadores, con un público más propio del Sur de Francia que del serio ambiente inglés, pero sin tampoco exagerar mucho. Lo más parecido a un ambiente francés sería el Sandy Park de los Exeter Chiefs. Ha sido más por la propia inercia competitiva innata de Leicester que por su buen juego por lo que han sido segundos, la pesada maquinaria Tiger siempre se termina imponiendo en estas largas temporadas regulares de 22 jornadas, pero no se observa ese paso adelante necesario para ganar los partidos importantes.
Los Quins le tiene tomada la medida a los Tigers, les han vencido en los últimos tres partidos que han jugado: la final pasada y los dos del presente campeonato
Parece que está en su límite de juego y no veo cómo puede dar ese paso para ir más allá de llegar donde se le supone y así lo dicen sus resultados esta temporada: contra Toulon jugó al máximo y no llegó, no ha ganado a los 'Sarries' ni a los Quins y ha perdido contra buenos equipos como Gloucester 27-21, Wasps 14-12 y Bath 27-26; y su gran victoria de la temporada fue contra Toulouse en ese partido bajo la nieve que sacó por amor propio y coraje, no por juego.
Richard Corkerill recuperó el orgullo de la camiseta como buen ex Tigers que es, la delantera funciona como siempre, lenta pero inexorable, el medio melé es un noveno delantero, el apertura sólo obedece y los tres cuartos funcionan como arietes, no hay apenas creatividad, es un esquema inglés 100%, efectivo, muy clásico y tradicional... demasiado para cómo se mueve el rugby en 2013 y es por ello por lo que tiene tantísimos problemas cuando juega con un equipo poco tradicional como Harlequins, rápido, con mucha continuidad en su juego, rapidísimos en los 'rucks', que dá balones a sus alas, un equipo poco convencional para lo que es este rugby. Así lo vio un jugador adelantado a su tiempo, también poco convencional para esa época, con una visión de juego más propia de un apertura que de un nº 8, en definitiva con la característica que define al gran jugador: la lectura del juego. Así empezó el gran Dean Richards a construir esto, hasta el lamentable 'Bloodgate' que acabó con su reputación y eso que venía de ser el entrenador de las cuatro ligas inglesas consecutivas y las dos Heineken con sus Tigers, pero vio que el rugby iba por otro camino más rápido y quiso adaptarse antes que los demás, lo dicho, la lectura de juego.
Connor O'Shea continuó su trabajo de forma excelente, con una Challenge Cup y una Premiership, y llega muy bien a semifinales, dejando atrás su mala racha de resultados tras acabar el VI Naciones con tres derrotas ante Exeter, Saracens y Gloucester seguidas y la eliminación de la Heineken en casa ante Munster. Es de los que ganan atacando, no defendiendo, por eso perdió esos partidos, pues recibió lo habitual pero no anotó lo que suele. Aquí está el partido, si los Quins están en sus puntos ganarán y sólo estarán en ellos si hacen su juego de continuación y ataque; si Leicester impone su ritmo más pausado y su mayor fortaleza física, poquito a poco la apisonadora Tiger se hará con el partido.
Por primera vez desde que escribo en Marca, no voy a dar a Leicester favorito, me la juego con los Quins, esta vez por corazón y cabeza.
http://www.marca.com/2013/05/08/mas_deportes/rugby/1368028655.html