'EL ANÁLISIS DEL EXPERTO'
Irlanda, Italia y Escocia también tienen su cuota de protagonismo
Una Irlanda que peleará en el partido inaugural por meterse en las quinielas al título y los dos 'condenados' un año más a eludir la Cuchara de Madera completan el gran Torneo de Rugby del Hemisferio Norte que vuelve a escena este fin de semana
Por José Ignacio Benito 31/01/13
Gales, Inglaterra y Francia, 'primus inter pares'
Tras analizar a los tres favoritos a llevarse el título en la presente edición del VI Naciones -ver enlace superior si todavía no lo has leído- vamos con el estudio de los otros tres países, es decir, una Irlanda que disputará el partido inaugural del Torneo en el Millennium Stadium de Cardiff y que en función de ese resultado podría entrar en las 'quinielas' al título y los dos 'condenados' un año más a pelear por eludir la Cuchara de Madera.
IRLANDA ..... 'La vida de Brian'
Me resisto a ser pesimista con este equipo, el único junto con Escocia que cuenta con una legión de seguidores irreductibles en su ánimo, totalmente identificados con sus colores y con su rugby, honesto, sincero y muy consciente siempre de cuál es su límite y de sus posibilidades reales en los torneos frente a adversarios mucho más potentes. Quiero ver el vaso medio lleno con Irlanda, atrás han quedado años buenísimos, culminados con aquel Grand Slam del 2009 con la mejor generación de jugadores que los de nuestra edad hemos visto y, tras no brillar en exceso en el pasado VI Naciones, recibir un durísimo 60-0 en junio, que ocultó el 22-19 del segundo test. Hablábamos de reacción por parte de Irlanda en la previa de los test de noviembre, gente nueva, muchos jugadores de Ulster, mayoría de edad de Sexton y muchas ganas de agradar y encontrar su sitio en el rugby actual.
Brian O'Driscoll
La materia prima que tiene es la que es y se tiene que apañar con ello, con lo que le ocurre como a Gales, que nota mucho determinadas ausencias y que para funcionar bien nada le puede fallar. A su favor tiene que va a jugar sin presión de ganar, no es favorito y eso puede venirle bien, el calendario es el propicio para ganar al recibir a los grandes en casa, pero para eso va a tener que esperar y construir un equipo como aquel del 2009. Hay mimbres y tiempo para ello, Leinster no deja de ser un buen equipo pese a quedar eliminado en la Heineken Cup, Munster crece reinventándose fiel a sí mismo y seguramente Ulster sea el más fuerte hoy en día.
Quiero ver el lado positivo de las cosas, pero sinceramente no tengo buenas sensaciones, Irlanda ha reaccionado bien convocando lo mejor que tiene, pero parece atascado en su juego, muy plano y con falta de fuerza en la delantera. Los antecedentes de noviembre, si buenos en resultados, no lo fueron en el juego desarrollado. Le ví en directo contra Sudáfrica, fuerte en la primera parte, desapareció en la segunda, sin ninguna posibilidad de ensayo ni golpe, ni entró en 22 contraria ante unos 'Springboks' muy normalitos a los que les bastó poner los kilos por delante para ganar, aprovechándose de la expulsión del nuevo capitan Heaslip. El 53-0 frente a Fiji no se puede valorar, pero sí el 42-24 ante Argentina. Victoria justa, como todas en el rugby, pero yo vi exhaustos física y psicológicamente a los 'Pumas' tras su agotador verano competitivo y su paso por Europa.
Los que queremos a Irlanda por muchos motivos, por Munster yo, debemos hacer nuestra la canción de los crucificados en esa maravillosa película y verlo así.
ITALIA ..... 'Vacaciones en Roma'
Al acabar la pasada edición, concluía que Italia había tocado techo en su juego y que no podía ir más allá de ganar un partido. Eso fue lo que vimos en el terreno de juego y nos sorprendíamos ante la afirmación de Brunel, que sostenía que Italia estaría peleando por el Torneo en cinco años. No le dimos mucha credibilidad, no vimos grandes cambios, un equipo muy aguerrido, con mucho oficio, que obligaba al resto a poner lo mejor, pero que terminaba perdiendo en el tramo final, con muchos fallos en el pateo, mucha diferencia titulares-suplentes y entre delantera y tres cuartos, en definitiva, un equipo con una limitación que parecía infranqueable.
Andrea Lo Cicero
Todo esto parece haber quedado atrás tras los test de noviembre, pues otra Italia, muy distinta a la tradicional, ha aparecido en escena, más rápida, con más juego a la mano, con más presencia de los centros y alas en su ataque y una muy buena dirección de juego. Cumplió sobradamente contra los 'All Blacks', muy notable pese a la derrota, con mucho poderío y galones frente a Tonga y demostrando mucho carácter al no perderle la cara a Australia y estar muy cerca de la remontada.
Este equipo ha cambiado si nos fiamos de los 'test', afronta con mucha moral y confianza este torneo, pues con tres partidos en casa, todo es posible y en las trece ediciones que ha jugado, sólo le falta ganar a Irlanda e Inglaterra.
En cuanto a jugadores, siempre destaca la primera línea, con toda una camada de jóvenes primeras, fuertes, rápidos, con muchas horas de gimnasio y buena alimentación, pero ninguno le quita el puesto a un jugador diez años más viejo que todos ellos. Hablamos, ¡cómo no!, del que siempre destaco, Don Andrea LoCicero, pues es muy reconfortante para los que tenemos ya los 40 ver a uno de los nuestros demostrar que todavía estamos ahí. Al margen de esto, Gori, Bothes, Burton y Orquera parecen haber cogido el estilo que Brunel quiere e incorporan lo clásico de Italia: muy buen trabajo de 'melé' y dominio del juego cerrado para poner el ritmo que le interesa, conseguir muchos golpes y, como buen equipo italiano, no regalar nada y llevar al rival a su terreno para desquiciarle y no dejarle jugar... hacerle un partido muy incómodo, sin ritmo, y cuando se quiera dar cuenta, ya habrá caído en la trampa italiana.
ESCOCIA ..... 'El mito de Sísifo'
En la pasada edición del VI Naciones ya aludíamos a Sísifo y su condena para hacer un símil con lo que le ocurre a Escocia: trabaja bien los partidos, gana sus fases de conquista, avanza, gana terreno, todo el equipo aporta ya al grupo y no sólo la delantera aglutina el ataque. Igual que Sísifo, empieza bien y con ganas a empujar la piedra, la lleva como debe por la montaña hasta que llega casi a la cima, casi hasta la línea de ensayo… y vuelta a empezar. Es su destino, parece que no hay forma de cambiarlo.
En un gesto totalmente desconocido en España, un hombre asume su total responsabilidad en algo que es de su competencia, en los resultados y rendimiento del equipo que él dirige, y presenta la dimisión, pues considera que el equipo da para mucho más, pero por alguna razón él no sabe o no puede sacar del grupo lo que se espera y como máximo responsable que es, así lo asume. Siempre que he escrito de mi equipo he destacado el trabajo del Señor Robinson. Escocia es otra distinta que la que dejó Frank Hayden, ha cambiado al equipo por completo, ya está adaptado a la velocidad que exige el rugby de este siglo, ya no es previsible en ataque y sus tres cuartos participan del juego tanto como la delantera, sabemos atacar, pero es llegar cerca del ensayo y se acaban las ideas, ni por delantera ni por la línea, no hay forma.
El mito de Sísifo
En la pasada edición, sólo tres ensayos pese a hacer buenos partidos. A Inglaterra le dominamos en todo momento, pero el fallo de Parks nos mató; contra Gales se aprovecharon de la inferioridad y jugamos hasta bien; contra Irlanda, sólo un tiempo y a Italia ya fuimos derrotados, sin ánimo tras tampoco jugar mal contra Francia y perder en dos 'zarpazos' de los galos. Junio fue sorprendente, increíble, tres victorias seguidas, una a lo tradicional contra Australia bajo el diluvio y dos de turismo, hasta que llega noviembre y todo indica que haremos grandes test, incluso yo escribí que veía dos victorias, pero fue un desastre y Robinson lo asumió como propio y lo dejó. Creo que ha sido profesional hasta el final, pero le ha pasado como cuando entrenó a Inglaterra: los resultados han determinado su final. Yo le doy las gracias y lo veo hasta positivo, pues ha construido la idea correcta para un rugby tan tradicional y arraigado a los recuerdos como el nuestro, con la vista puesta en la adaptación al actual, muy distinto al genéticamente escocés.
Hay entrenadores que cogen un equipo acabado y lo levantan, de la nada crean un conjunto con cuatro cosas muy claras y funciona bien, pero llega un momento en el que no son capaces de llevarle más allá de donde lo tienen, no le suben ese peldaño necesario para competir de verdad. Quizás Robinson sea de esos que hacen un equipo de las cenizas y lo llevan arriba, pero no saben subirlo más, tienen un tope que no pasan y es cuando entra en acción un entrenador que quizás no sea capaz de construir un grupo, no es entrenador bregador, pero que si le dan el equipo hecho, él si lo puede llevar más allá. Espero que el australiano Scott Johnson sea de esos, que tenga esa categoría, si no será más de lo mismo, empujaremos la piedra con toda dignidad y se nos caerá justo cuando lleguemos a la cima.
Más que resultados, espero un cambio en el equipo, espero que recojamos lo sembrado por Robinson y remontemos esta situación, pero lo cierto es que una gran victoria nos demostraría que todavía somos alguien en el Rugby y que jamás perderemos esa esencia a lo antiguo que tanto gusta. Ganar en Londres el primer partido lo pensamos todos, nuestra fe en el equipo es tal que creemos en la victoria aun en las peores condiciones, eso nadie nos lo puede quitar, pero la realidad de un conjunto que cambia de entrenador es ir poco a poco trabajando. Irlanda, Italia y País de Gales en Murrayfield son los rivales para probarnos a nosotros mismos donde podemos llegar.
El mito de Sísifo viene a decir que no hay castigo más terrible que el trabajo inútil y sin esperanza, empujar la piedra hasta arriba para nada, para que caiga, pero es la forma de poder llegar a la cima y dejar allí la piedra, Escocia trabaja bien, el camino es el adecuado, en algún momento podremos tirarla por el otro lado.
http://www.marca.com/2013/01/31/mas_deportes/rugby/1359650391.html