Yo nunca he tenido fe en adaptarnos al rival. No a largo plazo. Creo que debemos seguir siendo un equipo arropadito, que hace buenos a todos los de atrás y esto es metiendo un líbero como Valiente o Sastre. Así parece que Mitrovic sabe marcar por alto, que Rubio en vez de 30 y pico tiene ventimuchos o que a Peña no se le va ni uno por la espalda. Luego recuperamos el balón y Rubio organiza, Rossi conduce, Bergdich y Ruka corren y Manucho y Guerra se ofrecen y pelean.
Creo que los equipos de Juan Ignacio siempre han salido bien a la contra con el balón raso y alternativas de pase y por eso la gente decía que "jugaban bonito" cuando es una filosofía puramente defensiva y que renuncia a la posesión. Nos ha costado pero contra el Barça ha funcionado lo que en algún partido anterior se intuyó. Eso sí, la temporada que viene necesitamos tres centrales y reemplazar las bajas de Guerra y Manucho, y no podrá ser a base de Eberts, Alcatraces, Ramas, ni Heinzs.
El partido del Barça no debe ser tan sólo una inyección de moral, debe señalar el camino a seguir mientras sigamos con este técnico.